Say you won't let go

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Severus siempre se había considerado una persona fuerte, fiel a sus convicciones, alguien que por más difícil que estuviera la situación, no se rompería... no, él no, él podía doblarse pero jamas romperse...o al menos eso creía hasta que finalmente ese día se dio cuenta de lo equivocado que estaba.

Y no podía culpar la por la forma en que reacciono, realmente el único responsable de sus decisiones era el mismo, tan solo deseaba que Lily le hubiera dejado explicarse y conocer la verdad detrás de todo, antes de siquiera asumir y dar por hecho que todos los rumores que corrían en Hogwarts desde el comienzo del ciclo escolar, sobre el siendo un mortifago y que en su brazo izquierdo yacía la marca tenebrosa como prueba de su lealtad al señor tenebroso, eran ciertos.

Por supuesto, algo de verdad había en todas esas acusaciones que ponían a su persona en el ojo del huracán, sin embargo, aunque ciertamente Severus había tomado la marca durante el verano de ese mismo año de 1977, no lo hizo por las razones que todos pensaban. El no creía en la supremacía de la sangre y aunque detestaba a los muggles por causa de su maldito padre alcohólico y abusivo, tampoco estaba de acuerdo con el asesinato masivo e indiscriminado de muggles inocentes y Lily lo sabía mejor que nadie, después de todo llevaban mas de ocho años siendo amigos y ¡Por Merlín! Su mejor amiga era hija de muggles, el mismo era un mestizo, simplemente era ridículo siquiera pensar que el se asociaría con esos asesinos por ese tipo de cosas... Aún así, una vez mas los prejuicios sobre su persona habían ganado, incluso entre sus propios amigos...su novio y ¿Esta vez? Esta vez no pudo evitar romperse.

Le dolía el pecho, le faltaba el aire y su mente se nublaba tan solo de pensar en lo que había sucedido momentos antes en aquel pasillo. En sus oídos todavía retumbaban las palabras que le gritó la pelirroja, envenenándole la mente y su mirada plagada de odio aún podía sentirla atravesando todo su ser como un par de dagas afiladas, dejándole agonizante y sangrando en medio de su propia miseria.

El lo sabía, que tarde o temprano su pasado "oscuro" por ser un fiel amante de las artes oscuras, fascinado por todo lo relacionado con las mismas y sus viejas y cuestionables amistades con otros Slytherin que apoyaban la causa del señor tenebroso, vendrían a cobrar factura, pero no se imagino que así, tan repentino y devastador como había terminado todo. Tontamente, tuvo la esperanza de que tendría mas tiempo para poder lidiar con las consecuencias y no acabar destrozado como ahora se sentía, que a quienes consideraba sus amigos le darían la oportunidad de explicar sus razones antes de darle la espalda, pero se equivoco...

En su mente, seguía atrapado en aquella pesadilla, repitiendo una y otra vez sin descanso la "Cacería de brujas" en la que se había visto involucrado esa mañana junto con Regulus, quien desapareció de su vista en medio del caos y aunque en esos momentos no se encontraba en condiciones para preocuparse por el, por lo menos esperaba que estuviera mejor que él, aunque ya podía suponer que no era así, Reg era mucho mas sensible que el y si a Severus le había dejado en ese estado, no podía imaginar como le estaba afectando todo eso a su amigo.

"Te enseñare la mía si me enseñas la tuya"

Le había dicho Avery con una sonrisa maliciosa luego de que, junto con Mulciber le interceptaran en el pasillo justo afuera del gran comedor cuando el y Regulus iban de camino al desayuno.

"No se de que estas hablando, pero estas bloqueando mi camino. Muévete"

Fue su respuesta despectiva e intento sortear a ambos Slytherin para proseguir con su camino, pero a donde quiera que diera un paso uno de los dos le volvía a bloquear el camino.

Ya no quiero amarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora