ERROR 🕯️

3.4K 389 20
                                    

♥️🧸💚

💛

Wang Yibo es un chico misterioso, cuyos miedos estaban ocultos en lo más profundo de su persona, al igual que su personalidad, pero Zhan lo conocía tan bien que no era necesario ver dos veces a su novio para saber que estaba aterrado.

Oculto su sonrisa tratando de no parecer malvado. Wang Yibo, le tenía miedo a la oscuridad.

Cuando dormían, la ventana dejaba entrar la luz de las luces del exterior y la sala siempre estaba iluminada, en cambio, ahora el departamento estaba sumido en las sombras.

Al parecer hubo una sobrecarga y el generador se averió. Al principio zhan no le tomo importancia y se levantó a abrir la ventana para dejar entrar el fresco de la noche, al acostarse se acomodó encima de su novio, volviendo al mundo de los sueños, frunció su ceño al sentir a Wang abrazarlo con más fuerza y pegarse lo humanamente posible a su cuerpo.

Parpadeó y esperó a que su novio se durmiera, pasaron los minutos y las caricias en su espalda no paraban. Alzó su mirada, viendo a Yibo posar fijamente sus ojos en el techo.

- Bobo - llamó - ¿No puedes dormir?

Wang se tensó al escuchar la voz del doncel, bajó su mirada acariciando sus cabellos.

- No

- ¿Por el calor?

- Mn

El doncel no le creyó, no sabía por qué parecía que su novio mentía. Suspiró al sentir movimiento en su vientre, su bebé también estaba despierto.

Pasó sus dedos por el terso del mayor, jugando con la tela, ambos en silencio, disfrutando de la compañía del otro, Zhan se perdió en sus pensamientos y sonrió levemente al recordar su infancia.

Se sostuvo con sus manos viendo al castaño que detuvo sus caricias, pero no aparto sus brazos, al sentir al doncel moverse.

- ¿Tienes malvaviscos? - preguntó con una sonrisa.

Wang asintió.

♥️🧸💚

- Mira, esto es así - zhan explico con emoción, se acomodó en el suelo de la sala y alejó la vela a una distancia.

Con un palillo de brocheta, insertó varios malvaviscos en el pico y los acercó a la llama.

Wang imitó a Zhan, el olor a dulce quemado llegó a su nariz, vio el bombón blanco quemarse y tornarse oscuro. Con rapidez el doncel agitó sus malvaviscos y le soplo apagando la llama que se había encendido.

El ligero humo escapó del dulce, Yibo alejó los suyos de la vela y miro a su novio. El doncel sopló para enfriar su alimento y luego los metió a su boca.

- ¡Mn! Está caliente - agitó un poco su último malvavisco antes de comerlo.

Miró a su novio que permanecía sentado.

- Vamos, Yibo. Come, te gustará

Wang miro el dulce antes de llevarlo a su boca, era un sabor extraño y una parte sabía a quemado, miró a su novio extrañado de que le gustará.

- ¿Está rico, no? - sus ojos brillaban con emoción, esperando la respuesta de su novio

Yibo asintió

- No está mal

Zhan agarró más malvaviscos de la bolsa para seguir con su hoguera.

Su novio hizo lo mismo, viendo a su doncel comer con emoción, durante esos momentos olvido su miedo a la oscuridad, desde pequeño estaba solo en casa y la oscuridad era su única compañía, de alguna manera temía que Zhan algún día también despereciera.

IDIOTADonde viven las historias. Descúbrelo ahora