~•Capitulo 14•~

349 38 6
                                    

Llegué a casa agitado de tanto haber corrido.

Abrí la puerta de mi casa y entré.

— Hola cariño —. Dijo mi madre quién se encontraba frente a mi.

— Hola mamá, lamento llegar tarde —. Dije inclinado mientras mis manos se encontraban en mis rodillas y recuperaba el aliento.

— Oh, no te preocupes cariño, ¿Por qué vienes tan agitado? —. Me miró mi madre.

— Oh, es sólo que.... —. Mi madre me interrumpió.

— Ah, veo que has traído una amiga a casa —. Dijo mi madre mientras miraba detrás de mí.

¿Que?, Pero si yo no había traído a nadie.

Giré mi cabeza hacía atrás.

Sentí como mi alma abandonaba mi cuerpo.

Su maldita sonrisa que tanto me daba miedo estaba pintada en sus labios.

— Hola, buenas noches señora Jeon —. Ella hizo una reverencia.

— Buenas noches —. Mi madre le sonrió—. ¿Cariño estás bien? Estás muy pálido.

— Vete —. Le dije a esa maldita mujer.

— Jungkook no puedo creer lo grosero que eres —. Dijo mi madre—. Por favor entra, ¿Quieres algo de beber?.

— Claro —. Ella le sonrió y entro a mi casa.

Salí corriendo de ahí, no quería verla, sólo me hacia recordar al horrible pasado.

Subí las escaleras y entré a mi habitación ignorando los gritos de mi madre.

Cerré la puerta con seguro.

Corrí hacía el lado de mi cama.

— ¿Que demonios haré? —. Me pregunte a mi mismo dando vueltas por mi habitación mientras agarraba mi cabello con desesperación.

No quería que ella estuviera aquí, no quería que estuviera en mi casa.

Pasaron unos pocos minutos y seguía dando vueltas en mi habitación pensando en hacer algo.

En eso tocaron la puerta.

— Hola Jungkookie, soy yo, te he traído té, habré la puerta —. Dijo mientras tocaba la puerta de mi habitación.

— ¡Lárgate! —. Dije asustado.

— Por favor abre Jungkookie, ya verás que la pasaremos muy bien —. Dijo ella mientras reía "delicadamente"—. Ya verás que... Nos divertiremos como en los viejos tiempos.

Mi piel se erizó.

Sentí como de nuevo mi alma abandonaba una vez más mi cuerpo.

Sentí el sudor en todo mi cuerpo, un sudor frío.

A mi mente se me vinieron recuerdos de lo que ella me hacía cuando era pequeño.

Corri hacia mi baño y saque mi teléfono de el bolsillo de mi pantalón.

Ella aún insistía mientras seguía tocando la puerta de mi habitación.

Lágrimas comenzaron a salir de mis ojos.

Y comencé a llamar a Tn.

Puse el teléfono en mi oreja.

— El número al que usted marco se encuentra ocupado u apagado—.

— Maldición, por favor contesta Tn —. Le marque otra vez.

— El número al que usted marco se encuentra ocupado u apagado —.

Él Estúpido De Mi Ex ⛓️🥀•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora