¿Toallas higiénicas? (YoonTae) TERMINADA.

11.

— Hyung si no estás listo, no debes hacerlo.— Y aunque ciertamente YoonGi no se sentía del todo listo para hablar con su madre, estar ahí con TaeHyung lo hacía tener una valentía que jamás tuvo antes.

— Solo quédate a mi lado y todo estará bien.—

Y así fue, TaeHyung se aferró a la mano de YoonGi sin importarle mucho nada más que la paz mental que le daba al mayor, porque después de todo eso para el menor era un significado del amor, apoyar a tu pareja en todo lo que pudiera necesitar y si ahora lo necesitaba en aquel lugar él estaría ahí.

Cuando entraron a la casa de la madre del mayor YoonGi se tensó, todo el lugar le recordaba a lo que fue un momento tener una familia normal y completa, ahora estaba dividido en la lealtad que siempre le tuvo a su padre y aquel cariño que jamás pudo borrar por su madre.

— Hyung no seas tan duro con ella, por favor.— Quiso reír al oír las palabras, lo que quería era huir, pero jamás lo diría, huir de nuevo sería escapar de algo inevitable.

Es irónico que los adultos tienden a decirte que todo será mejor cuando crezcas, suelen decir también que entenderás sus decisiones cuando eres adulto y si bien YoonGi quiso entender las razones de su madre jamás pudo porque jamás la había escuchado.

Y aunque no lo crees escuchar a alguien hablar de su error también es sanar, todo lo que amenice un poco tu daño es sanar, YoonGi sabía que no la iba a perdonar o eso pensaba al verla dormir en aquella cama, pero al menos sus palabras podrían mitigar un poco su pena.

— Volvamos más tarde, está dormida.— Y aunque las palabras de su menor hicieron eco en su cabeza sabia que no lo haría más tarde, quizá si se iba ahora jamás volvería.

— ¿Volverías a alguien que te lastimo? — TaeHyung sonrió, esa ciudad lo había lastimado, más estaba ahí de vuelta por sus padres.

— Si me importa esa persona lo haría, es destructivo pero real. Siempre regresas a lo que te lastimo algún día porque de esa visita sacas una catarsis, Hyung.—

— ¿Y si no estoy listo para esa catarsis? —

— Quiero darte esa catarsis, hijo.—

TaeHyung soltó un suspiro al oír a la persona que posiblemente más lastimo a su hyung, pero no dijo nada, su interior estaba sumido a la tranquilidad que no estaba familiarizado por el apretón en su mano, lo hizo saber que su mayor lo necesitaba tranquilo.

— ¿Por qué lo hiciste? —

Fue la primera pregunta que sonó fría, pero estaba llena de sentimientos por dentro porque no fue el YoonGi fuerte de ahora el que hablaba con la boca seca y ganas de llorar, era su niño interior que grito esa pregunta encerrado en la jaula que su madre lo enjaulo cuando lo abandono, la mujer que se supone que debía amarlo porque lo dio a luz, la mujer que lo traiciono por primera vez.

— No te mentiré...— La mujer se sentó en la cama con mucho esfuerzo, pero ni YoonGi, ni TaeHyung se movieron, ambos querían la respuesta.— No era feliz con tu padre, lo engañé por mucho tiempo y no quería seguir haciéndolo, no era justo.—

TaeHyung se mordió el labio con fuerza para no hablar.

— Vaya respuesta de mierda.— Dijo con ironía, saco un cigarrillo y lo apoyo en su boca mirando a su madre, TaeHyung miro la acción suspirando, era un reto.

— Abriré la ventana para que pueda salir el humo.—

Sin más, el mayor prendió el cigarrillo sin importarle la tos que provoco en su madre, estaba temblando y necesitaba calmarse.

— Hiciste una perforación en tu labio...—

— Sí, como un tatuaje en la espalda y no o sabías por qué jamás llamas, solo para avisar que una puta transferencia está hecha cuando dije claramente la última vez que vine, que no la quería.—

—Eras menor de edad...— La mujer miro como la mano de TaeHyung se aferraba a la de su hijo, dio una negación en seco que se arrepintió de haber dado.

—Ni te atrevas a decir algo de él, de él no. Es la única persona que no te permitiré ni siquiera ensuciar con tus palabras, así que al grano ¿Para quién no era justo? — La mujer dejo caer una pequeña lágrima casi invisible que no seco hacer notar su debilidad, fortaleza mentirosa que también había heredero YoonGi.

— Para todos, lo únicos que veías era indiferencia de mi parte, no era justo para ti...—

— Dime la verdad, mujer. Yo también ocupe esas palabras con mi padre cuando pensé que fue su culpa que lo engañaras, esa indigencia también se la aplique, esos gritos que estás conteniendo también contuve... Todo para el porqué no estabas y él jamás me culpo, jamás me levanto la mano, jamás se quejó por hacerlo...—

La mujer soltó las palabras entre gritos.

— ¡Eres la fiel copia de él! ¡Eres igual que él físicamente! ¡Todo lo que me enamoro del físicamente eres tú! — TaeHyung apretó la mano de su mayor cuando este se iba a acercar a ella, molesto.

Él también lo estaba, pero sabía que no quería ver una disputa mayor a las palabras y si lo soltaba pensaba que su mayor podría hacer cualquier cosa, el cigarrillo ya no funcionaba porque YoonGi estaba hiperventilando.

— Respira Hyung.—

Un grito casi agudo salió de YoonGi "¿La oíste?"

— Lo hice, no lo merece, solo respira y haz la siguiente pregunta.—

— Perdón ¿Qué no merezco? — TaeHyung tomo una bocanada de aire, tomando fuerza de donde ya no tenía, porque toda su fuerza se mermó en dársela a su mayor.

— Que se altere más de lo que ya está y haga algo de lo que se arrepienta de por vida, señora.—

— No quiero más, no necesito más. Ya dijo lo que necesitaba oír.— Dijo YoonGi al borde de las lágrimas.

— ¡Hice todo lo que hice por un bien mayor, en ese momento no se sintió así, pero no quería hacer un daño mayor! —

— Pero el daño lo hiciste y no a la persona correcta. Dañaste a un inocente que no te pidió la vida, dañaste a un pedazo de ti. No quiero nada más, solo... Déjame sanar y perdonarte a mi tiempo, aunque eso te dañe, es lo mejor.—

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