—Nos vemos Sasuke—se despidió la pelirosa
—Hasta pronto
Sasuke estaba por emprender su viaje, pero ¿por qué no se iba? ¿por qué no dejaba de ver los orbes verdes de su esposa? ella hacía lo mismo, ¿por que el debía romper el contacto visual?
—¡Baba!—balbuceo la pequeña Sarada
Sarada llamó la atención de sus padres.
—En su lenguaje dice que te cuides—bromeó su madre
—Nos vemos, Sarada—se despidió juntando sus dedos y con sumo cuidado los dejo en la frente de su hija, al retirar su mano Sarada extendió sus manitos y capturó la de su padre, sus manitos eran tan pequeñas que no lograba abarcar por completo uno de los dedos de su padre.
—Sarada, tu padre debe irse
—No importa, además puede llorar si retiro mi mano sin cuidado
¿La bebe podría llorar si Sasuke deshiciera el agarre? Tal vez, ¿O Sasuke quería seguir sintiendo el contacto de su pequeña? era lo más probable.
De lejos el quinto y sexto Hokage observaban la escena con dulzura.
—Nunca creí ver a Sasuke Uchiha formar una familia, mucho menos con mi discípula—comento Tsunade
—Sasuke solo era un niño que necesitaba el amor de una familia, y Sakura se ha encargado de que el vuelva a sentir aquellos lazos que una vez perdió—habló Kakashi.
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—Mamá, ¿papá todavía nos quiere?
—Por supuesto Sarada, ¿por qué la pregunta?—la pelirroja dejó de cortar los vegetales para prestarle total atención a su pequeña hija.
—Es solo que...nunca viene a verme—la pequeña murmuro decepcionada
—Sarada—llamó su madre—tu padre está en una misión muy importante, que no te vea no significa que te deje de querer, el siempre te tiene presente—sonrió cálidamente.
—¿Cómo puedes saberlo?
—Solo lo se—la pelirroja junto sus dedos para dejar un golpecito en la frente de su hija, pero siempre manteniendo esa cálida sonrisa que tranquilizó a su pequeña.
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Las dudas e inseguridad de Sarada fueron creciendo de acuerdo con los años, ella no recuerda haber visto a su padre alguna vez en su vida.
No fue hasta que tomó la arriesgada decisión de perseguir a Naruto, quien se encontraría con él, lo que les llevó a un secuestro, peleas, y verdades.
Ver a su esposa e hija después de tanto tiempo fue como un recordatorio para Sasuke, tiene una familia que le espera.
Había tomado la difícil decisión de no volver a la aldea, con el propósito de no poner en riesgo a su familia como la aldea, pero Sarada había crecido, ya no era aquella bebe indefensa a la que debía cuidar de que no perdiera el equilibrio al caminar.
"—S-Sasuke, ¡Bienvenido!—le recibió su esposa, no estaba enterada de su regreso.
Ochos meses habían pasado desde la última vez que la familia Uchiha se reunió, actualmente Sarada estaba por cumplir dos años, Sasuke no estaba al tanto, pero Sarada estaba aprendiendo a caminar y por mas que Sakura insistiera, no había logrado escuchar la primera palabra de su pequeña.
Sarada empezó a balbucear mientras dejaba de lado sus juguetes y se dirigía gateando a la puerta donde se detuvo para observar con curiosidad a su padre.
Luego de inspeccionarlo continuó su camino hacia sus pies donde se aferró a su pantalón para ponerse de pie.
Sasuke se inclinó un poco para tener la mano detrás de la espalda de su hija, una medida de seguridad en caso de que perdiera el equilibrio.
—¡Papá!—chilló la pequeña con una sonrisa.
Su madre quedó sorprendida y desconcertada al ver que la primera palabra de Sarada fuera "papá", después de pasar meses y meses enseñándole a decir mamá.
Sasuke había arruinado un plan de meses, sin tener idea alguna.
Por otro lado, los latidos del pelinegro se aceleraron, era la primera vez que escuchaba a Sarada hablar correctamente, su pecho se sintió cálido ante el llamado que le hizo su hija."
Tras recordar el último momento que tuvo en familia, y ver como ha cambiado la situación, su familia siempre correría riesgos, esté presente o no, lo mejor es afrontarlo como lo que son: la familia Uchiha.
—Bien, ya pueden probar mi receta de takoyakis—la pequeña Uchiha habia tomado la desicion de encargarse de la cena, mientras sus padres esperaban.
Su madre fue la primera en probar su platillo, en el rostro de Sakura se reflejaba un "¡Delicioso!"
—Están sabrosos, ¿verdad Sasuke?
—Saben muy bien, Sarada—respondio con una sonrisa de lado.
—¿E-Enserio?—pregunto avergonzada
—¡Por supuesto, debes pasarme la receta!—pidió su madre
Mientras cenaban y charlaban, en un momento de la conversacion Sarada queria hablar sobre un tema que llevaba dias pensando en cómo hacerlo.
—Mamá, Papá—sus padres prestaron total atencion a su llamado—En unos dias se celebrara el festival para las familias, y se que tienen trabajo que hacer, pero me preguntaba si...
—Estaré presente, Kakashi tambien me pidio no faltar—hablo Sasuke
—¿Eh? ¿Enserio? Tsunade-sama tambien me pidio lo mismo—comentó Sakura
Extraño, ¿no? ¿Qué planes tienen entre manos los antiguos Hokages?
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