Acababa de ducharme hace unos minutos y cuando salí de la habitación vi a Minho con comida en la mesa de centro que estaba en la sala, tenía hambre así que felizmente comí, aunque su compañía era agradable.
Sin prisa alguna, me alimente, mirando mi plato de comida y de ves en cuando mirando a Minho, notando que me miraba cada tantos segundos, tenía una sonrisa calida en su rostro y eso causaba que me estremeciera, Minho estaba comenzando que alborotar mis sentimientos o tal vez ya lo hacía desde antes, y hasta ahora me daba cuenta.
—¿Aún tienes hambre?— Preguntó Minho en cuando termine de comer, negué con la cabeza y el asintió, levantando los platos.
—Minho.— Él volteo a verme atento en cuando terminó de limpiar, se sento a mi lado.
—¿Pasa algo?, ¿te sientes mal?— Me miró.
—No, solo... gracias por la comida.— Dije tímido y el asintió con una sonrisa cálida.
—No es nada, además, no debo dejar que mi omega enferme.— ¿Su omega?, lo dijo tan tranquilo y parecía no haberse dado cuenta de lo que dijo.
—¿Tus padres no te han llamado por tu ausencia?— Pregunte curioso, tratando de ignorar lo que acaba de decir.
—No lo sé, apague mi celular.— Dijo tan tranquilo, parecía no importarle.
—¿Por qué hiciste eso?, no deberias apagar tu celular, puede servirte para una emergencia.— Intentó regañarlo.
—Solo no queria que nos molestaran.— Me miró a los ojos mientras lo decía.— Además, soy un adulto y no necesito de su permiso.— Aún tenía sus ojos en mi y eso estaba poniéndome un poco nervioso.
—No me mires asi.— Susurre.
—¿Así como?
—Sigues mirándome como hace años, y eso me está poniendo nervioso.— Susurre sin despegar mi mirada de él, se acercó a mi y de manera peligrosa su rostro estaba a centímetros del mío.
—¿Debería dejar de hacerlo?— Murmuró y aunque queria sonar indiferente, en el habia una pizca de coqueteo, su mano derecha se dirigió a mi mejilla y comenzó a dejar caricias suaves.
+Alfa
Era tan masoquista, porque no queria despegar mi mirada de sus ojos penetrantes, aunque había un pequeño destello en ellos.
Su pulgar se dirigió a mi labio inferior dejando leves caricias y parecía mirarlos, su lengua humedece sus labios.
—Quiero besarte, Hyunnie.— Su respiración parecía volverse agitada poco a poco.
Sin responder aún, mi mirada se dirigí a sus labios y después a sus ojos, el miraba atentamente mis labios, era demasiado obvio que lo hacía.
Por mero impulso o tal vez deseo, rompí aquella distancia y bese sus labios, sintiendo mi estómago volverse un caos, mis mejillas sonrojarse, mis manos colocándose poco a poco en su nuca, sintiendo que sus suaves labios estaban adentrandome a una pequeña burbuja de la cual solo nosotros dos éramos testigos. Mis ojos estaban cerrados, y leves jadeos salían de mi boca, sintiendo satisfacción de tener sus labios junto a los míos.
Solté un leve suspiró en el beso, y tal vez fue el comienzo de esta larga noche.
La diosa luna iluminaba la habitación y sintiéndose satisfecha de que ambos nos unieramos sin tener una pizca de culpa, o que trataramos de dar vuelta atrás y detener esto.
Minho y yo queríamos continuar y tener una noche de la que ambos disfrutariamos y nuestros lobos se sentirían orgullosos.
—Te quiero omega.— Dijo mientras repartía besos cerca de mi mandíbula.— Te deseo tanto.— Y sabía que no lo detendría y el tampoco.
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Comienzo a sentir la luz del sol topar en mi rostro, frunci el ceño y jadeo de molestia, trato de darme vuelta en la cama, pero torpemente mi frente golpea con el de alguien más.
Asustado abrí los ojos, mis mejillas se sonrojan al ver a Minho frente a mi.
Dormía tan tranquilo, su respiración estaba tan calmada, parecía que no había sentido el golpe que le había dado accidentalmente.
Sentí mis mejillas más calientes al darme cuenta que no estaba vestido, ambos no lo estábamos, escenas de la noche anterior vienen a mi mente y siento un poco de vergüenza.
Cubri mi rostro por un momento y niego, sintiéndome tímido por lo que hace horas había ocurrido en dicha habitación, pero mi omega se sentía tan feliz y satisfecho de ello.
Quite mis manos de mi rostro y miro a Minho, estaba tan adentrado a su sueño y me gustaba verlo tan tranquilo, una pequeña sonrisa involuntaria aparece en mis labios y mi mano va en busca de su rostro, dejando caricias suaves.
Continuo por unos minutos, dejo pequeñas caricias y después me pongo de pie, dirigiéndome al baño para así darme una ducha.
Solo tome una toalla y entre a la ducha, encendiendo la regadera y dejando que las gotas de agua mojaran mi cuerpo, soltando algunos suspiros, pensando en todo lo ocurrido, en lo que quería descubrir.
Solté otro suspiro.
Abrí los ojos en cuando siendo unos brazos rodear mi cuerpo, volteo y me doy cuenta que era Minho, tenia una sonrisa coqueta en su rostro, aunque extrañamente me gustaba esto, costandome admitirlo.
—Dulce omega.— Dijo mientras su rostro se enterraba entre mi cuello.
Mis mejillas estaban sonrojadas, pero dejé que lo hiciera.
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Holaaa Una disculpa por desaparecerme, pero la escuela está absorbiendo todo el tiempo que tengo y apenas hoy pude tomarme un pequeño respiro, creí que iba a poder actualizar y crear máscapítulos, pero no pude debido al tiempo y al cansancio, pero aquíestá un nuevo capítulo. Por favor quieran lo mucho, me esforcé mucho y no estaba segura en subirlo o no.
Por favor tenganme mucha paciencia♡ Nos leemos pronto♡ (eso espero)
