Pagando lo acordado

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En un día normal o uno que parecía serlo—durante la hora del almuerzo— un grupo de cuatro jóvenes de segundo año de preparatoria conversaban en una de las mesas del comedor escolar.

De entre tantos temas que podían escoger para hablar, el grupo decidió centrarse en unas chicas.

-¿Se dieron cuenta de que transfirieron a cinco chicas? Mírenlas, están Justo ahí.- Habló uno de ellos mientras señalaba a una mesa donde se encontraban cinco chicas con rostro iguales y cabellos también del mismo color.

-Y no es coincidencia que todas vinieran al mismo tiempo. Escuché que son quintillizas y son bastante lindas.

-¿Quintillizas? No pensé que algo así existiría...- Cuando el tercero de ellos terminó de hablar, él dirigió su atención a uno de los presentes, quien parecía más centrado en su comida que en la conversación.- ¿Que ocurre T/N? ¿No estás interesado en las mujeres?

El tono burlón de su amigo hizo que el recién mencionado finalmente se uniera a la conversación.

-No es eso. Es solo que no entiendo porque se emocionan tanto. En la escuela ya hay muchas chicas y no veo que hablen con ninguna, que estás sean nuevas no significa que vayan a interesarse en ustedes.- Mencionó T/N continuando con su almuerzo tan solo finalizó con su pequeño monólogo.

Los tres chicos que lo escucharon soltaron un suspiro de decepción cada uno.

-Matando nuestras ilusiones tan temprano, ¿no puedes ser un poco menos franco? No tiene nada de malo mirar un poco...

-En lugar de franco, yo lo llamaría cruel. Por algo no tienes novia.

Ante tal acusación, T/N decidió no quedarse callado.

-Tú tampoco tienes. Yo al menos he tenido.

-Si terminaste con ella es porque no funcionó. ¿De qué te sirve haber tenido novia si no eres bueno en las relaciones?

-La primera relación no suele terminar bien para la mayoría de las personas... pero mentiría si negara que no funcionó.

La realidad era que T/N pudo haber dado una mejor respuesta para no darle la razón a uno de sus amigos, pero no veía caso en seguir discutiendo por algo como eso. Sin embargo, aquel otro chico no tenía la intención de dar aquel tema por cerrado.

-Si eres tan bueno, ¿por qué no invitas a una de ellas a salir?- El tono burlón volvió a la voz de aquel amigo que antes había insinuado que T/N no era bueno para las relaciones.

-¿Cuando dije que era bueno?- Más que confusión, la voz de T/N reflejaba cansancio, como si discutir fuera una acción habitual en aquel grupo.

Los otros dos jóvenes solo observaban la discusión entre sus dos amigos, como su aquello fuera lo más divertido del mundo.

-No lo dijiste directamente, pero lo hiciste sonar así. No es lo que dices, sino como lo dices.

Aunque no quisiera admitirlo, T/N no podía negar que aquellas palabras eran ciertas.

-¿Qué quieres que diga, "Hola, soy T/N T/A. Sé que nos conocemos, pero me preguntaba si quisieras salir conmigo"? Si me va bien no me darán una cachetada...

-Tú encuentra la manera.

-Olvídalo... estoy seguro de que sabes que no funcionará, solo quieres burlarte de mí.

-Eres un aguafiestas... pero me atrapaste.- Finalizó el chico soltando una carcajada.

Una vez la hora del almuerzo terminó, T/N regresó al salón de clases junto a aquel amigo que antes lo había retado a invitar a salir a una de las quintillizas, después de todo, ellos dos compartían clase.

Por una apuesta... (Nino Nakano x T/N)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora