UNA ÚLTIMA ESPERANZA

D I E S C I N U E V E

— oye Jules.

Me giro para ver a mis  amigas al frente de mi mesa  linda se sienta en la silla que esta a mi lado mientras que danna se sienta sobre la mesa.

—¿llevamos dias que no te vemos?.

a pasado una semana desde que alexis fue hospitalizado y la mayoría del Tiempo la pasó en el. Hospital alexis fue anestesiado y casi siempre está dormido por los medicamentos por lo que nicholas me contó la noticia no le cayó muy bien por lo que nunca quiere que lo visiten pero ellos siempre están hay.

— lo siento chicas — me disculpo.

—¿como esta alexis? — me pregunta linda.

— por lo que me a dicho nicholas esta todo bien —linda asiente.

— pobre alexis — dice linda.

— hoy iremos a comprar los vestidos para la 
Graduación, se que estas mal por lo de tu novio — hace una pausa.

— pero nos gustaría que vinieras con nosotras — me dice miró a danna quien me da un asentimiento de cabeza.

— luego de salir de eso te acompañamos al hospital.

— bien vamos — digo finalmente y ellas sonríen complacidas.

El resto del día solo garabateo en mi cuaderno y no presto mucha atención ya que mi cabeza está echa un remolino de pensamientos.

—¿ Jules? - silencio -

— oye Jules. — salgo de mi burbuja para ver al peli azul de nicholas frente de mi

— oh, hola nicholas — le saludo.

— pensé que te gustaría ir al. Cine hoy ¿que te parece? — frunso en ceño.

— lo siento nicholas pero mis amigas me llevarán a comprar los vestido para la graduación y luego iré a ver a alexis otro día  — digo levantandome de mi asiento y tomando mis cosas.

Nicholas frunce sus labios en una fina línea.

— okey otro día será.

Salgo del salón.

La situación fue confusa y extraña.

Muy extraña.

***
—¡oh Dios mío!

Salgo de mi habitación  con el ceño fruncido.

—¡EVAN LOUIS JONES! — se escucha la voz aterrorizada de mi madre camino hacia el cuarto de mi hermano.

Teresa jones es una hermosa mujer que le dio buenos genes a sus hijos su cabello castaño más oscuro que el mio esta amarrado en una cola de caballo.

Entró a la habitación que está echa un desastre arrugó la nariz cuando un olor extraño entra por mis fosas nasales.

—¿que huele haci? — preguntó mamá quien tiene en sus manos la escoba de barrer le pega a Evan en la costilla este se remueve y se queja.

Mamá murmura cosas molesta miéntras me ignora completamente.

Me acerco a mi hermano quien está acostado en su cama.

— evan puedes explicar parece que en tu cuarto paso un huracán de  desastres.

Mi hermano me mira como si mi voz le aturdiera y le pesarán los huesos — lizzy terminó conmigo.

Dijo, mi boca se abre en shock

— oh, evan lo siento mucho hermano — digo abrazándolo evan no dice nada y eso lo agradezco por que soy un desastre consolando.

—¿cuando pasó?.