Epílogo.

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Charles le dió su taza de café a Max, quedandose el con la suya antes de sentarse en el sofá y acurrucarse contra el costado de su pareja.

Ahora tenían 25 años, estaban juntos y Max había salido del infierno al que le obligaban a llamar casa.

Después de que le quitaran la custodia a Jos y que la madre de Max no hubiese querido involucrarse con él, la familia Leclerc acogió a Max, que fue algo diferente a adoptarlo, ya que aunque Pascale y Hervé tuvieron su custodia, su tutela siempre estuvo a cargo de la administración que decidió que se podía quedar con ellos.

Obviamente se mudó junto con la familia y aunque Charles y él le contaron a los padres de Charles que eran pareja y ellos no tuvieron ningún tipo de problema con eso, decidieron que lo mejor sería que cada uno tuviese su propia habitación (aunque Max siempre terminaba durmiendo con Charles).

Ahora, años después, finalmente habían podido vivir ellos 2 juntos en un complejo de apartamentos en Mónaco.

-¿Sabes? Solía pensar que tu casa estaba embrujada.- Comentó Charles.

Max sonrió divertido.

-¿Por qué?-

-No le encontraba otra explicación a que tu padre fuera tan malo contigo y que tu madre y hermana hubiesen desaparecido sin dejar rastro.- Respondió.

-Supongo que eso tendría sentido en tu cabeza de niño de 7 años, ¿verdad?-

-No creía que alguien pudiese ser tan malo por voluntad propia, así que sí, eso tenía sentido en mi cabeza de 7 años.-

-Sí... es un poco triste lo piensas bien.-

Charles asintió, tomando un sorbo de su café.

-¿Te acuerdas cuando estabas tan cansado que confundiste un batido de chocolate con café con leché y se lo escupiste en la cara a Hervé?- Preguntó Max.

-Sí, quien diría que ahora es mi bebida favorita.-

-A veces yo sigo sin creérmelo, lo odiabas con todo tu corazón- Dijo Max entre risas.

-Bueno, casi todas las personas cambian, Max.- Respondió Charles con suficiencia.

Hubo un silencio, únicamente siendo interrumpido por Charles tomando sorbos al café.

-¿Crees que el Lunes podamos ir a visitar a tu padre al cementerio?-

-El Lunes no creo que tengamos algo importante que hacer, así que si. Lo dices por lo del compromiso, ¿verdad?-

Max le había pedido matrimonio a Charles hacia 3 días. Todavía nadie se había enterado.

-Por supuesto, el merece saberlo. A parte, quiero que se entere el primero.- Sonrió.

-El seguro que estará feliz de que tu seas con el que me case.- Le dió un pico en los labios antes de acurrucarse sobre el pecho de su prometido.

-Te amo.- Dijo Max.

-Yo también.- Respondió Charles.

Finalmente estaban bien.

Ya hemos llegado al final de la historia, no sabéis lo mucho que he llorado haciendo esto.

Quiero dejar en claro que no se nada sobre las familias de acogida y lo poco que he investigado ha sido muy superficialmente, aunque no he tocado mucho el tema.

Y aunque creo que es muy obvio, las 3 partes finales de los capítulos son un guiño unas a otras.

¡Gracias por leer hasta el final!

Chao!! <3

Seven // Lestappen //Donde viven las historias. Descúbrelo ahora