07

22 3 0
                                    

»𝗣𝗲𝗿𝘀𝗽𝗲𝗰𝘁𝗶𝘃𝗮 𝗱𝗲 𝗞𝘆𝗼𝗺𝗶

En pocos minutos llegamos a la empresa, aún era temprano por lo que probablemente esté casi vacía. De la van salimos una a una y la última en dejar el vehículo fui yo.

Entramos y tal como sospeché en la agencia no había ni un alma; ni siquiera la recepcionista había llegado.

En grupo nos dirigimos al ascensor, sí, el mismo ascensor donde conocí a Hyunjin; que por cierto no quiere abandonar mi mente.

El sólo pensar en su atractiva personalidad y llamativa altura hace que sienta revoloteos en mi estómago.

—Kyomi, llegó el elevador.— dice Mina en japonés mientras toca mi hombro 

—Ahh... si, gracias Minari. —contesto a lo que ella asiente con una sonrisa 

Por si no lo sabían Sana, Mina, Momo y yo, hablamos en japonés cuando estamos solas. ¿La razón? Es muy divertido ver como las demás miembros intentan comprender lo que decimos.

Todas –junto con el manager– entramos al ascensor, el cual tiene capacidad para un máximo de 15 personas, por lo que es bastante amplio.

Recuerdos con Hyunjin nublan nuevamente mi cabeza, cosa que no puedo evitar. Sus manos, su aroma... todo de el me fascina.

El sonido de que hemos llegado a nuestro piso resuena en el elevador, y al abrirse las puertas salimos tal y como una manada.

Nos dirigimos hacia una parte del quinto piso que claramente no conocía, se encuentra una sala –que es muy probable que sea una oficina– y unas sillas de espera.

Al estar justo frente a la puerta cada una de las miembros entra a excepción de Momo, quien se acerca a mi.

—No tardo ¿Okey? Acabando esto te llevo a la escuela. No vayas a ningún lado y no te muevas ¿Entendido?

—Entendido.

Ella me sonríe levemente y entra a la sala donde la puerta se cierra firmemente. 

Proceso a sentarme en una de las sillas y mirar a la nada; todo el ambiente está en silencio, hasta que es roto por el sonido del ascensor.

Parece que alguien ha llegado, giro un poco mi cabeza hacia la puerta del elevador; de el sale un chico no tan alto que viste ropa deportiva y una gorra.

De un momento a otro tropieza haciendo que caiga sobre sus rodillas en un no tan sonoro estruendo. Por instinto me levanto para así ayudarlo a levantarse y de paso preguntar como se siente. 

Le extiendo mi mano derecha que toma un poco dudoso.

—¿Te encuentras bien?— pregunto con voz suave

—Si... muchas gracias por preguntar, pero creo que deberia irme.— responde de igual manera

—Un momento, tu rodilla está lastimada. ¿Me dejarías desinfectar la herida y colocar una venda?

El me mira algo confundido, ¿tanto le sorprende que me ofrezca a ayudarlo?

—Umm... claro, supongo...

Toma asiento en donde yo estaba y me mira expectante. De mi mochila saco un poco de alcohol y una gasa; con la cual me dedico a limpiar la herida.

Después de el mismo compartimento saco una venda, y la coloco en su herida; en realidad no era tan grave solo un pequeño raspón, pero aún así no dejaba de ser doloroso.

Me levanto a tirar el material recién usado –gasa– y lavo mis manos en un baño cercano, al regresar el aún continua sentado, mientras mira la venda.

—Muchas gracias, ya no duele tanto. — dice mientras ríe un poco

—No hay de que, espero que con eso te sientas mejor.— digo imitando su gesto

—A propósito soy Bang Christopher.— comenta estirando su mano en forma de saludo 

—Soy Hirai Kyomi, un placer.— contesto tomando su mano

—¿Hirai? ¿Eres hermana de Momo?

—Ehh ¿sí? ¿Por qué, sucede algo?— preguntó algo alarmada

—No para nada, soy un amigo cercano de ella y las demás chicas, es todo.

—¿Eres cercano a las miembros de Twice?

—Se puede decir que si.

—¿De verdad? ¿Por qué?

—Larga historia.

De un momento a otro la puerta de donde estaban las chicas se abrió, una por una salió para quedar frente a Christopher y a mi.

—¿Chris?¿Eres tu? Cuanto tiempo sin verte, sin duda ya creciste.— dijo Jihyo

—Jihyo ¿Cómo han estado? Hace mucho no las veía por aquí.

—Supira— Pues como ya sabrás pronto haremos comeback así que hay mucho que hacer.— dice riendo un poco

—Ya veo.

La plática entre las chicas y el se prolongó por algunos pocos minutos para después querer presentarme a él. 

—Ella es Kyomi, hermana de Momo. Pero parece que ya se conocen.— dijo Sana tímidamente 

Un momento, Sana nunca es tímida; ¿Acaso le gusta el?

—De hecho si, nos acabamos de conocer.— contesta entre risas

Yo solo le miro con una leve sonrisa.

—Ya veo...

—Ajá. 

—Chicas, no es por molestar pero ya es un poco tarde.— digo viendo la hora, son las 7:29 am

Por lo que me había dicho Momo las clases comenzaban a las 8:00, así que relativamente voy tarde

—Tienes razón tenemos que irnos. Nos vemos luego Chris, cuídate.— habla Jihyo

Nos despedimos de él y nuevamente entramos al ascensor, en poco tiempo bajamos y salimos de la empresa para volver a entrar a la van.

...

Exactamente fueron 10 minutos de camino hacia la escuela. Ésta tenía escrito en grande «Escuela Secundaria Seongnae»; varios grupos de alumnos entraban sin parar al colegio y fue ahí donde los nervios se apoderaron de mi.

—Bueno Kyomi, es hora de que entres a la escuela.— dijo Momo

—Hace un poco de frío afuera, no te vayas a resfriar.— le sigue Nayeon

—¡Ah! Ya sé. Toma abrígate con ésto. — Tzuyu me había prestado su suéter color beige

—Gracias Yoda, gracias chicas. Creo que es hora de irme.— digo con un poco de nervios

—Tu tranquila en todo momento, trata de no meterte en peleas ¿Sí?— comenta Jeongyeon

—Pero si te pegan, pégales mucho más fuerte ¿entendido? 

—¡Chaeyoung! No mal aconsejes a la niña.— regaña Jihyo

—No la mal aconsejo, de hecho es un gran consejo ¿no es así?

De ahí se armó un debate sobre quien tenía la razón.

—Bueno chicas, las dejo. Tengo que entrar si no quiero llegar tarde.— digo levantándome de mi asiento y dirigiéndome a la salida del vehículo.

Todas cambiaron sus expresiones y comenzaron a darme frases y palabras alentadoras.

Al salir de la van todas las miradas de los estudiantes se posaron en mi, tanto mujeres como hombres no dejaban de abrir los ojos ante mi presencia mientras caminaba hacia la entrada principal.

Dios, tengo miedo, dame fuerzas para continuar...

ℓσνє αт ƒιяѕт ѕιgнт | Hwang HyunjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora