𝙀𝙨𝙨𝙚𝙣𝙯𝙖 || 𝙋𝙖𝙗𝙡𝙤 𝙂𝙖𝙫𝙞

Sette

Maratón 1/3

Alice.

Echaba de menos a mi hermana,ya habían pasado tres días y yo solo sabía llorar,solo habían pasado tres días que para mi pasaron como años.

Pedri y Pablo me animaban para que lo arreglara,me preguntaron varias veces el motivo de la pelea,pero yo le decía que empezamos a tirarnos trapos sucios.

—No puedes seguir así Ali,levante el culo tan bonito que tienes,y vamos a dar una vuelta —me dio Pedri una cachetada en el culo.

—¡Oye! ¡No toques ahí! —frunció el ceño Pablo y mató a Pedri con una mirada asesina.

—Como si fuera la primera vez que lo tocara —rodé los ojos.

—Exacto —sonrió victorioso el canario. —¿Y ustedes dos que? ¿Que sois?

Pablo y yo nos miramos sin saber que decir.

Nos tratábamos como novios,pero no éramos nada,eso a mi padre no le servía.

—No lo sé —hablé esta vez mirando a Pedri.

—Os tratáis como novios —dijo el canario mirando a ambos.

—Y por eso tú no le puedes tocar el culo —seguía Pablo con su retahíla.

—Vale Gavi,que ya me ha quedado claro,pero tú aún no le has puesto un dedo encima y yo si —se defendio Pedri y yo reí ante la situación.

Se estaban "peleando" sin sentido.

—Bueno basta,voy a merendar —se levanto Pablo del sofá y se fue a la cocina.

—¿Sigue en pie lo de ir a dar una vuelta? —pregunté y Pedri asintió.

—Pero esperemos al celoso,vamos a arreglarnos mientras.

Fui a ducharme,no había salido durante tres días,necesitaba que me diera el aire y el sol un poco.

El agua caliente recorría todo mi cuerpo. Cogí el champú y me lo esparcí por todo el pelo y así sucesivamente con el acondicionador y el gel. Tiempo después,salí de la ducha enrollada en dos toallas,en el pelo y en el cuerpo.

Salí a la habitación y estaba Pablo tirado con el móvil,que novedad.

—¿A donde vas? —me pregunto.

—¿No te lo a dicho Pedri? Vamos a salir y tú también vienes,te estábamos esperando a que merendaras —le expliqué.

—Es verdad,me voy a duchar,por cierto,tus sobaos esos están buenísimos —dijo el entrando en el baño con una risita.

—¿¡Te has comido mis sobaos?! —aporreé la puerta hasta que el la abrió dejándome caer en su pecho,un poco más y me ve el alma.

—Si me los he comido inmigrante,¿algún problema? —preguntó el vacilando y se llevó una ostia.

—Por llamarle inmigrante y por comerte mis sobaos —le saqué el dedo de en medio y cerré la puerta del baño.

Cogí unos vaqueros blancos y una camiseta rosa de mangas cortas rosa con una chaqueta vaquera,unos botines blancos y arreando.

Me maquillé,tenía algunas ojeras,me las tape con corrector y ya me maquille,me desenrede el pelo y lo dejé a que se secara al aire.

—Ya —salió Pablo del baño vestido,el vapor que había en el baño se fundó en mis fosas nasales,olía a vainilla el gel.

—Yo aún no estoy,me tengo que pintar los labios.

—Pues venga,te espero entonces.

Me pinte los labios rosa y me acerqué a él y lo besé.

—¡Oye! —se limpió el la boca. —Seguro que me has pintado.

—Es fijo tonto —reí al ver su cara,no se lo creía y se fue a mirar al espejo.

—Me creía,porque no se como se quita el pintalabios.

—Con desmaquillante niño —dije saliendo de la habitación y me choqué con Pedri.

—Joder que susto —dijo Pedri llevándose una mano al pecho.

—Au —me toque la cabeza,me había dado un buen porrazo con la cabeza de Pedri.

—Mira por donde ibas rubia —dijo Pedri.

—Gilipollas,tú mira también,yo iba saliendo de la habitación.

—Bueno... ¿Nos vamos o que? —me empujó Pablo hacía delante para que le pudiera salir de la habitación.

—Sí,vámonos ya —dije sin quitar la mirada de Pedri mientras yo le daba una mala mirada y el me miraba el culo y me estaba comiendo con la mirada.

Si las miradas mataran,la tuya me hizo el amor.