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Lollapalooza, aquel festival que tanta gente esperaba, y entre esa gente se encontraban Sara y Miguel, quienes estaban llenos de ilusión por disfrutar de un gran evento como ese y disfrutar del verano, de por fin poder descansar.

Tras varias horas arreglando sus outfits, Sara y Miguel se dirigieron al festival, no podían aguantar más las ganas de ver a New Jeans, aquellas chicas eran su prioridad en el evento, pero igualmente pensaban quedarse a escuchar al resto de artistas, nunca se sabe donde se pueden encontrar nuevos grupos a los que stanear.

Una vez entraron, no dudaron en dirigirse al escenario donde el grupo actuaría, no querían perder la oportunidad de tener una buena visión, al mismo tiempo que tampoco se sentían aplastados por la multitud de gente.

Una vez estaban colocados, revisaron la zona, tenían un hueco de salida bastante amplio, perfecto por si había que ir al baño en algún momento, habían encontrado el lugar perfecto. Sin embargo, no habían contado con un pequeño detalle, no habían cogido nada para beber ni comer.

Aprovechando que aún no había mucha gente, y que tenían una salida rápida, Miguel no dudó en ofrecerse a comprar algo para beber y comer, mientras Sara se quedaba custodiando su lugar, no iban a permitir que nadie les moviese de allí.

El chico no tardó en dirigirse a uno de los puestos de comida, revisando lo que todos aquellos puestos ofrecían, debía elegir algo bastante contundente, iban a estar bastantes horas de pie, además de saltando y gritando como buenos locos cuando subiese New Jeans al escenario.

Una vez decidió lo que iba a pedir, no tardó en encargarlo, esperando frente al puesto a que lo preparasen. Miguel revisaba sus redes scoailes cuando empezó a sentir una mirada sobre él, tenía la sensación de que alguien tenía puesta la mirada fija en él, lo que le parecía extraño, que salvo Sara, nadie más le conocía en aquel evento.

Decidió revisar si su sospecha era cierta cuando encontró una mirada que chocó con la suya, estaba en lo cierto, una mirada fija estaba puesta en él. Un chico de pelo rosado no dejaba de mirarle, completamente embobado, hasta que las miradas de Miguel y él chocaron, alejando la mirada hacia otro lado, rogando que Miguel no le hubiese pillado, mientras que este solo pudo evitar reír al notar el sonrojo de aquel chico.

Escuchar como el dueño del puesto le llamaba sacó a Miguel del trance con aquel curioso chico, mientras se preparaba para pagar, sacando su cartera. Estaba a nada de entregar el dinero cuando alguien le detuvo, extendiendo una tarjeta de crédito al dueño del puesto.

Pagaré por lo del chico y por lo mío -afirmó, mientras Miguel levantaba la mirada, descubriendo que era el mismo chico de las miradas, ¿por qué estaba haciendo aquello?.

Una vez todo estaba pagado, el chico de pelo rosa no dudó en darle su pedido a Miguel, dedicándole una sonrisa cálida mientras que sus miradas volcían a conectarse.

Muchas gracias, aunque no hacía falta -respondió Miguel, ante lo que el contrario no pudo evitar rascarse la nuca.

Te lo debía por haberme quedado mirándote -concluyó, con cierto rubor en sus mejillas.- Espero que disfrutes de la comida, guapo.

Y tras aqeullas palabras, aquel chico desapareció entre la multitud de gente, a paso rápido, mientras Miguel seguía sin entender nada, ¿qué acababa de pasar en tan solo unos minutos?.

A paso decidido e intentando que nada se cayese de sus manos, Miguel volvió con su amiga, quién no dudó en preguntar que había pasado al ver el rostro de sorpresa de su amigo. Miguel no dudó en contarle a Sara, quién no pudo evitar dejar un pequeño golpe en el hombro de su amigo.

¿Pero tú estás tonto? -preguntó la chica, mientras daba un sorbo a su botela de agua.- ¿Por qué no le has pedido el número?. O mínimo el nombre.

No es mi culpa -respondió Miguel, encogiéndose de hombros.- Fue él quién salió corriendo. Además, creo que se estaba muriendo de la vergüenza porque le había pillado mirándome, así que dudo que me hubiese dado tanta información.

Que sepas que vamos a salir luego a buscarlo -afirmó la chica, haciendo que Miguel rodara los ojos.- Pero eso va a ser después de ver a Tomorrow X Together.

Que sepas que acepto verlos porque ya estamos aquí y no hay nada más que hacer, si no, te quedarías bien solita -afirmó Miguel, ante lo que Sara alzaba la ceja incrédula.

Oh, venga ya. Si luego eres tú el primero que se hace fan al verles, mira lo que te pasó con Enhypen -recordó la chica, llevándose un side eye de su amigo.

Lo dice la que poco más y me deja sorda porque vio a Heeseung bailar -contratacó el chico, ganándose un pellizco de su amiga.

Y sin darse cuenta, el momento había llegado, tal y como los gritos de los fans anunciaban, había llegado el turno de New Jeans en el escenario.

Rápidamente, Miguel y Sara dejaron aquella "discusión" para dejarse la garganta y las energías disfrutando de la actuación de las chicas, aún no asimilaban que estaban viendo a uno de sus grupos favoritos en vivo y en directo, estaban disfrutando como niños pequeños de aquello.

𝑭𝒍𝒊𝒓𝒕𝒚 𝑳𝒐𝒗𝒆 / 𝗖𝗵𝗼𝗶 𝗬𝗲𝗼𝗻-𝗷𝘂𝗻 & 𝗖𝗵𝗼𝗶 𝗕𝗲𝗼𝗺-𝗴𝘆𝘂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora