El deber de un Mech.

Destino.

Retomabamos la situación que había ocurrido al final. Nuestro protagonista había ido desesperadamente de vuelta en el lugar donde se quedaron sus compañeros, había pasado a su modo alterno para acelerar el paso. Mientras que en el punto de vista de los micromasters, la escena mostraba a Fire gritando mientras disparaba sin detenerse con sus ametralladoras a todo su alrededor, árboles, rocas, su cuerpo se encontraba en un estado deplorable. Lleno de cortes, quemaduras como partes de su cuerpo descubiertas este seguía luchando ¿Pero qué pasó para estar así?

Las dudas se resolvían tras observarse como velozmente él destron Ferak soltó un potente puñetazo en todo el torso del micromaster. Fire se detuvo repentinamente soltando un suspiro a duras penas, observándose como sus manos temblaban soltando las ametralladoras. Su atacante con una gran sonrisa en su rostro le miraba fijamente mientras soltaba carcajadas.

Ferak:

– Hahaha ¿Qué sucede, fuimos demasiado para tí? Es sorprendente como a diferencia de tus dos amigos, fuiste él más molesto ¿Alguna última palabra qué decir?

Fire:

– Sí... Pu... Pudrete.

Usando sus fuerzas de reserva le escupió en el rostro. Su oponente enojado tras aquella forma de actuar del Micromaster, limpiándose el carburante de su cara con su mano izquierda, pondría lentamente una expresión seria. Quitando bruscamente su puño del cuerpo de Fire dejándolo totalmente abierto, exponiendo su chispa. En ello, Fang, Macabre, Decepticon bullie, Backfire y Doublecrosser miraban la situación. Para seguido observar como Ferak se volteaba hacia ellos sonriendo.

Ferak:

– Parece ser que nuestro trabajo ya está hecho. Sigamos buscando al último que falta.

Fire:

– Nn... No...

Ferak:

– ¿Hmm? ¿Todavía te sigues moviendo? Eres realmente necio.

Comentaba molesto tras bajar su mirada para ver cómo aquel Micromaster sostendría su pierna derecha. En un intento de hablar este mismo alza su mirada para verlo con desprecio.

Fire:

– Ghhh... Co... Cómo... ¿Sa-sabían qué estábamos... Aquí? Nghh...

Ferak:

– Oh... ¿Quieres saberlo? Mejor deja que nuestro querido jefe de la misión, Macabre lo diga para tí.

Macabre:

– Claro, al menos antes de que mueras. Te dejaremos el gusto de que sepas cómo pudimos ubicarlos tan fácilmente y saber el recorrido que tomarían. Oh acaso ¿Piensas qué ese poblado era una mera casualidad qué lo hayamos destruido?

Fire:

– ¿Q-qué...? En... Entonces.

Macabre:

– Entonces, nos adelantamos a su recorrido y nos divertimos un buen rato con esos civiles. Necesitábamos algo con que matar el tiempo. Pero me imagino que eso no responde tú pregunta ¿No es así? Bueno... Déjame decirte que en tú querida civilización tenemos un... Espía.