Todo se siente tan raro últimamente. sobre todo esa parte de vida a lo que llamamos "sentimientos".
Ya ni sé cómo describirlo... Gran parte de mí vida me pregunté ¿Cómo es posible que haya gente interesada en varias personas a la vez?
Y es que pienso que no estoy interesada en nadie por ahora, pero me es inevitable dejar de pensar en tres personas, Ja, ja.
Me parece tan confuso, ninguno de los tres tiene nada que ofrecerme. Entonces, ¿Por qué siguen paseando como se les dan la gana por mí mente?
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Primera personita, oh querida personita.
al principio tenía sentido pensarte, y asi poder imaginar miles de escenarios que sabía que nunca se cumplirían.
Imaginarnos aún más cerca de lo que estamos parecía algo tan relajante, aunque era obvio que esas escenas dónde caminábamos de la mano mientras reímos, nunca irían más allá de mí cabeza.
Conocerte sin conocerte me hizo sentir que quizás eras alguien especial.
Desde que te vi llegar a la casa de al lado, supe que este año ibas a llevarte mí tranquilidad y estabilidad.
Cuando pude verte más de cerca, también vi una oportunidad de poder sentir lo que es el cariño mutuo si lo intentaba. Lástima que mí valentía llegó algo tarde, y sin darme cuenta le cedí mí camino a alguien en quien apoyé mí confianza.
Odio admitirlo, pero a veces me pregunto, ¿Que hubiera pasado entre nosotros dos si ella no aparecía?
¿El momento que esperé por semanas se hubiese podido dar?
¿Seguiríamos tan conectados como lo era al principio?
Solo eran dos semanas, dónde no te tendría cerca, o al menos a menos de cinco metros donde fácilmente te llevarías mí atención.
Creí que ya te había superado, que solo eras uno más de los que admiraría desde lejos; y que el sentimiento se iría tan pronto como se fueron nuestras charlas por mensaje. Pero claro, al parecer me equivoqué.
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Tú, segunda personita. Todavía no entiendo que haces en mí cabeza, ni siquiera hablamos y apenas nos podríamos llamar "conocidos".
Contigo me doy cuenta lo manipulable que puedo llegar a ser. Literalmente solo compartimos una noche de bailes y risas. ¿Que? Acabo de sonreír recordando ese momento.
Todos estos años tuve en claro que no me llamarían la atención personas más chicas que yo; entonces explícame porque te pienso más seguido de lo que quiero.
Ni siquiera puedo decir que me gustas, porque sé que no es así. Pero entonces, por qué últimamente me fijo tanto en con quién te juntas? Si, quizás no me caiga bien, pero se supone que no me interesa con quién se junta ni con quién te juntas tú.
Lo más confuso es que no distingo si solo es curiosidad o si hay un poco de celos.
Hay que admitirlo, eres muy lindo, y no puedo decir que no eres mí tipo; pero es que si hay una persona con la que nunca me vería en una relación serías tú.
No me arrepiento de pasar aquella noche divirtiéndome contigo, como al bailar juntos era raro tomarnos las manos, pero ambos sabemos que no fue para nada molesto. Aunque fue el cumpleaños de mí amiga, lo que más recuerdo de la fiesta fue el calor de tu mano junto a la mía.
Pequeño niño travieso, déjame tranquila y ya no invadas mis pensamientos con tu rostro tan... Inexplicable.
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Por último tú, chico de anteojos.
Yo no sé lo que siento cuando pienso en ti. Nunca te hablé en persona, pero cada vez que nos cruzamos no podía evitar mirarte y pensar alguna manera de hablarte.
Hay veces que me pongo a pensar y no estoy segura de qué me causas. Cuando no te veo me haces dudar de si me gustas, pero cada vez que nos encontramos te llevas mí atención por completo.
Cada vez me pasa más seguido, tener la necesidad de verte y poder abrazarte, o aunque sea saludarte.
Ya varias veces te vi observándome, no creas que no me di cuenta. Tengo que admitir que cada vez que me doy cuenta de eso, mí timidez aumenta tanto como la sonrisa en mí rostro.
Yo me pregunto, ¿Cómo será la próxima vez que nos encontremos? Hasta ahora cada vez que estuvimos en el mismo lugar apenas cruzamos miradas. Pero hace unas semanas me animé –con algo de ayuda– y te mandé un mensaje, y la verdad sentí un calorcito en el corazón cuando al final del día noté que habíamos hablado toda la mañana y un poco de la tarde.
¿Me estaré ilusionando con tan poco? Es muy probable. Pero ahora solo espero a que llegue el día en que pueda volver a verte, mientras pienso en si por fin hablaremos en persona o simplemente seguiremos como hasta ahora: observando al otro desde lejos.
