Capítulo 3

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El polvo envuelto en astillas, hielo y escombros había estado de moda durante los últimos minutos. El hombre del turbante había sido el tercero en usar un mástil de un barco para entrar a la batalla, para sorprender a sus adversarios y el elemento recurrente había surtido efecto en las tres ocasiones, pues en todas ellas el mástil apareció en el momento preciso para sorprender a los marines y los piratas que peleaban en la plaza de ejecución. Aunque la dos últimas ocasiones fueron más impactantes, llenas de un sentimiento extraño para los marines, pues las dos últimas interrupciones, cambiaron completamente la batalla y mostraron a piratas extraños que mantenían control sobre los tres almirantes mientras eran observados por el resto, absortos en la batalla que estaban llevando a cabo en medio de la plaza de ejecución, frente a los ojos de leyendas como Sengoku y Garp, que vieron la pelea con asombro y miedo. Y no era para menos. Portgas D Ace parecía estar a punto de ser libre. La Marina estaba perdiendo al intentar detener a aquellos que querían liberar al hijo de Gol D Roger y recientemente habían descubierto que el Rey de los Piratas había tenido un segundo hijo. Uno que les estaba causando los mismos problemas que el padre.

La prioridad de toda la Marina era ejecutar a Ace, terminar con el legado del hombre más peligroso del mundo. Por otro lado, la prioridad de los Piratas de Shirohige y los presos de Impel Down, era salvar a Ace de las garras del gobierno y mantenerlo alejado de los marines y los almirantes.

Y las cosas parecían ir por el camino correcto para los piratas.

Monkey D Luffy había llegado a crear un camino que lo llevaría directamente hacia la plataforma con ayuda de los miembros de los Revolucionarios de Dragon y estaba dispuesto a tomarlo sin miedo, decidido a salvar a su hermano, algo que la Marina no estaba dispuesta a permitir.

Una explosión alertó a los marines y piratas en la zona, obligándolos a mirar hacia otro lado y no ver como Sombrero de Paja tomaba el camino que iba hacia su hermano, corriendo hacia la plataforma mientras Boa Hancock derribaba y enfrentaba a Smoker, uno de los miembros de la Marina que había estado detrás de la cabeza de Monkey D Luffy desde que pasó por Loguetown.

En la plaza el enfrentamiento entre Aokiji y Kizaru contra Guts y Hisoka había tenido un nuevo cambio de ritmo. Una tercera persona había evitado que el arlequín fuera dañado por uno de los almirantes y había mantenido a los dos extraños piratas completamente ilesos, todo mientras Akainu y Naruto seguían en un enfrentamiento directo, ligeramente sangriento, salvaje por parte del segundo hijo de Gol D Roger.

―¡Je!―la cabeza del desconocido del turbante se levantó ligeramente, mostrando el rostro de un hombre. Tenía un aspecto ligeramente desaliñado, con una barba de tres días ocupando su mentón y que no parecía que fuera a desaparecer pronto. Al contrario que sus compañeros, su vestimenta parecía ser menos extravagante. Cubría todo su cuerpo y parecía una vestimenta proveniente de Arabasta―. Si no llego a intervenir, probablemente ambos estarían muertos.

Los ojos ámbar del hombre se movieron hacia Hisoka por unos segundos antes de mirar a Aokiji, el causante del ataque que habría convertido al arlequín en un alfiletero.

―No es como si tuviéramos problemas con ellos―Hisoka mostró una sonrisa burlesca. Sus ojos no abandonaron en ningún momento a Aokiji―. Es solo que estábamos jugando y permitiendo que los viejos sigan pensando que son grandes.

Había burla implícita en las palabras del pirata; burla que no pasó desapercibida para el almirante de cabello oscuro. Aokiji sacó ambas manos de los bolsillos y su pantalón y señaló al intruso.

―Arara―el hielo había comenzado a formarse bajo os pies del almirante―. Voy a tener que enseñar un poco de "respeto" de una forma más ardiente aquí.

La Voluntad DDonde viven las historias. Descúbrelo ahora