Pequeño Cachorro [NamMin]

Capítulo 25

Para no dejarlos tanto tiempo sin capítulos, porque igual se que están enganchados en la historia, acá les dejo uno. Los amo.

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Corría desesperado por todos los pasillos, necesitaba encontrarlo, necesitaba saber cómo estaba su alfa. Al reconocer su aroma se adentra a la habitación sin autorización de nadie, verlo ahí, recostado con un montón de cables en su cuerpo hizo que su corazón doliera ¿Pero que había hecho su humano? Las lágrimas no tardaron en llenar sus ojos, sentía como todo se estaba acabando.
Se acercó lentamente, tocando suavemente la frente de su alfa, luego pasando sus dedos por el rostro, hasta acariciar sus labios. Fue cuando decidió esparcir sus feromonas, notando como Hoseok empezaba a removerse inquieto en la cama, abriendo lentamente sus ojos.

– ¿Taehyung? – tosió un poco – ¿Que estás haciendo aquí? – al notar el color peculiar de sus ojos, sabía que no era el humano.

– Amor – se recostó a su lado, aferrándose a su cintura dirigiendo su nariz hacia el cuello del alfa – lo siento, puedes marcarme otra vez, puedes hacerlo, mi amor.

– No – se separó del Omega que lo vio demasiado triste – puede que tú lo desees, pero tú humano no me quiere – acarició su mejilla, limpiando las lágrimas.

– ¿Tu si quieres? – lo miro con cariño – dime qué si quieres, cariño.

– ¿Sabes cuántas veces soñé con encontrar a mi destinado? – beso su frente – ¿Sabes cuánto deseaba tenerlo conmigo? Eres mi alma gemela y me encantaría estar contigo, por eso el día que apareciste quería cortejarte, lo anhelaba – le sonrió – pero tú humano no quiere y no puedo obligarlo a hacerlo.

– Márcame – lloro desesperado – por favor, no quiero que mueras, podré convencer a Taehyung, por favor, por favor márcame.

– No puedo – ahora él que estaba llorando era el alfa – estaré bien, lo prometo. Pero creo que está vez, debemos separarnos, así que por favor, deja que el vuelva.

– ¡No! – se aferró a su cuerpo – N-no puedes hacerme esto, por favor, no me hagas esto de nuevo.

– Mi bello Omega – unió sus labios, sintiendo que está sería la última vez – mi querido destinado, es momento de decir adiós.

– No, por favor mi amor, no me hagas esto de nuevo, me estás matando, por favor – Hoseok no pudo hacer nada más, simplemente lo abrazo acariciando su cabello – Hobi, mi amado Alfa.

– Lo siento mucho – beso de nuevo su frente – tal vez en la siguiente vida.

Con eso el lobo de Taehyung se derrumbó, ya no quería vivir más, no quería hacerlo más. Ya había sufrido demasiado, había sentido dolor y ya no quería sentirlo más, beso los labios de su alfa una última vez, la última vez que lo vería de nuevo.
Se levanto de aquella cama, saliendo de aquella habitación para después derrumbarse ¿Cuánto más tenía que vivir para estar con él? ¿Acaso estaba pagando algo? Por favor Diosa luna, por favor, quiero estar con mi alfa ¿No puedo tener eso?

Dejo que Taehyung volviera a tomar el control, sintiendo de nuevo el dolor invadiendo todo su cuerpo. Tratando de soportarlo, tratando de entender que era lo que había pasado y porque estaba en el hospital.

Oye ¿Que hiciste?
Trato de comunicarse con su lobo, pero este no respondió.
Vamos, dime ¿Que paso? Respóndeme, por favor.
Nada, no había respuesta, lo que hacía que su corazón se sintiera aún más vacío, ya no tenía a su lobo con él, ya no estaba, no podía sentirlo.

(...)

Después de un día tan agotador, decidieron volver a casa donde encontraron a su hermoso cachorrito, recostado en un montón de almohadas en la sala, llevando uno de sus piecitos a la boca que lo hacía ver bastante adorable. El niño al notar el olor a uva de su mami, dirigió su mirada a todas partes hasta que extendió las manos hacia el rubio, que no dudo en tomarlo en brazos.

– Mi precioso bebé – le beso las mejillas haciendo que Jungmin sonriera gustoso.

– mmm-mmma – trataba de pronunciar alguna palabra, al ser imposible para él hizo un puchero.

Mami.

Decia su pequeño lobo, buscando con desespero el pezón de su mamá para poder empezar a succionarlo.

– Creo que lo estamos mal acostumbrando a darle pecho – dijo Namjoon – ya va a cumplir un año, creo que deberíamos dejar que coma otras cosas.

El niño lo miro enojado, no podían quitarle su chupón, era de él, de nadie más y su papá no tenía el derecho de quitarle eso, era suyo, también su mami era de él no de su papá.

– No me mires así, cachorrito – trato de acercarse pero el niño se alejo – debes comer otras cosas.

Cuando trato de tocarle la mejilla, Jungmin le dió un pequeño manotazo para que no se le acercará, Namjoon lo miro sorprendido a lo que el pequeño cachorro le tomo cero importancia, para seguir succionando el pezón de su mami. Podía notar como sus ojitos miraban con amor al Omega, sonreía de vez en cuando y con su pequeña manita acariciaba el pecho de su madre.

– Es un bebé todavía – decía Jimin arrullandolo en sus brazos – podemos intentar darle otras cosas de comer, pero de eso a quitarle su leche creo que podríamos esperar unos meses más.

El niño gruño molesto, no podían quitarle su pezón.

– Pequeño gruñón – Namjoon beso su mejilla – te amo, mi pequeño cachorrito.

El niño le sonrió, después el alfa dirigió su mirada al Omega, era realmente hermoso, se acercó para besar su frente dulcemente.

– Mi bello Omega – se acercó para abrazar a ambos.

Al menos había una pareja que estaba llevando las cosas bien, iban poco a poco descubriendo sus sentimientos, mientras que la otra solo se estaban hiriendo más.