FIFTEEN

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La de cabellos oscuros miraba con fascinación los bosques de las Smoky Mountains, a pesar de haber visto demasiados en todos los lugares que ha visitado ella siempre se fascinaba por las cosas mínimas

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La de cabellos oscuros miraba con fascinación los bosques de las Smoky Mountains, a pesar de haber visto demasiados en todos los lugares que ha visitado ella siempre se fascinaba por las cosas mínimas.

Y los bosques le parecían una belleza, una maravilla que debía ser muy bien cuidada.

Una voz la distrajo de su paz y tranquilidad.

—¿Estás bien? ¿Ray pesa mucho? —cuestionó Klaus con burla al cobrizo.

—Estoy bien —respondió este irritado.

—¿Estas seguro? Ya llevamos andando un buen rato.

—Puedo ayudarte si quieres Stef —ofreció ella preocupada por su amigo, ignorando al híbrido.

—Gracias Yoon, pero estoy bien —le respondió él con amabilidad—. Y se que tenemos que aguantarnos pero preferiría que nos saltáramos el hecho de platicar, la verdad —esta vez habló mirando al híbrido.

—Me preocupas —replicó él—. Tu odio hacia ti mismo te está asfixiando.

–Porque estoy harto de cazar hombres lobo. Llevamos haciéndolo todo el verano.

—Gracias a nuestro querido Ray, hemos encontrado una manada.

Y entonces ella pudo mirar a una manada de licántropos, o eso supuso.

Caminaron hacia ellos y entonces Stefan lanzó al licántropo al suelo, una mujer inmediatamente fue hacia él.

—¿Quienes son?

—La pregunta importante es quien soy yo —respondió Niklaus—. Por favor, perdonen la intrusión, me llamo Klaus.

—Eres el híbrido —espetó la mujer.

—¿Te han hablado de mi? Fantástico —sonrió levemente mientras que ella rodaba los ojos ante el gran ego y narcisismo que él tenía.

YoonSuk se acercó a Stefan y colocó su cabeza en el hombro de este, quien la abrazó por los hombros mientras ambos miraban de mala manera al híbrido.

—Les diré que es fascinante —espetó el híbrido ya sentado, el par de amigos para su lástima estaban cerca de él—. Un hombre lobo que no está atado a la luna, un vampiro que no se quema al sol. Un híbrido.

Entonces Ray despertó, la rubia de inmediato se quiso acercar a ayudar pero Stefan la detuvo del brazo.

—Justo a tiempo, Ray. Muy dramático.

—¿Qué me está pasando?

—Stefan.

El de cabellos cobrizos simplemente asintió mientras que se levantaba y soltaba la mano de YoonSuk.

Klaus por su parte miró fijamente a la de cabellos castaños con el ceño fruncido ¿Por que tomaba la mano del cobrizo?

YoonSuk solo desvió la mirada e ignoro todo lo que estaba ocurriendo a su alrededor.

𝐒𝐄𝐑𝐄𝐍𝐃𝐈𝐏𝐈𝐓𝐘|| 𝐊𝐋𝐀𝐔𝐒 𝐌𝐈𝐊𝐀𝐄𝐋𝐒𝐎𝐍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora