Krist no sabia porque había aceptado ir a ese lugar, lo odiaba, sin embargo,lo extrañaba, nunca pensó que lo perdería así, tan rápido. Llego al lugar que había evitado durante meses, en cuanto vio la tumba, sus ojos se llenaron de lagrimas no pudo soportarlo mas y callo de rodillas al suelo
-Te extraño,te extraño tanto, han pasado meses y sigo sin poder asimilar que ya no estas a mi lado.
Paso horas llorándole a aquella tumba de quien tanto amo. En secreto se culpaba por la muerte de esa persona, si tan solo...
No, no debía lamentarse, a el no le gustara verlo así. Sonrió recordando el día en que se conocieron, el día que empezaron a salir...el día que ocurrió todo.
- Holi ¿puedo sentarme?
- Hola, por supuesto adelante - el chico sonrió y para Krist fue la sonrisa mas bella que haya visto jamas.
En ese momento llego su profesor y aunque quisiera tener algún tema de conversación con este lindo chico, no pudo. No comprendía que estaba sucediendo y al parecer su semblante lo delato debido a que el chico le ofreció amablemente su ayuda, tímidamente acepto.
Después de ese día comenzaron a charlar mas y a verse en sus tiempo libres, platicar por mensaje y cada mínimo detalle que hacían los acercaba mas, inevitablemente terminaron sintiendo atracción mutua, aunque ninguno confeso nada por temor a que solo fueran ilusiones. Todos sabían de ese enamoramiento menos ellos, por supuesto sus amigos los alentaban pero el miedo seguía ahí.
Una tarde de invierno, mientras nevaba decidieron salir un momento juntos, pues no podían mover la "cita" a otro día debido a que ambos estarían ocupados. Ese día, después de salir de cenar caminaban tranquilamente de regreso a sus casa cuando Krist volteo a verlo
- Sing ¿que estas haciendo? - rió porque lo vio muy nerviosos buscando algo entre sus bolsillos
-Krist, desde que te conocí descubrí que la persona correcta puede llegar de la manera mas inesperada, escucharte hablar de todo lo que te gusta, o quejarte de lo que detestas es tan adorable para mi, quisiera hacerlo siempre, pero siendo mas que tu amigo
En ese momento Singto saco una caja que estaba repleta de chocolates, Krist obviamente acepto. Sus amigos los felicitaron al enterarse.
Todo iba viento en popa en su relación, pasaban tiempo juntos sin dejar de lado a sus amistades, aveces salían en grupo se turnaban para ir a la casa del otro, su relación duro 5 años antes de ese accidente.
Ese día tenían una cita, sin embargo Sinto llego media hora tarde, Krist no dijo nada terminaron el día en silencio claro, hasta llegar a su casa en donde comenzó la pelea
- Krist, te he dicho mil y un veces que no tengo a nadie - gritaba exasperado Singto -es solo que mi amiga, necesitaba ayuda.
- Te creo sin embargo, aunque ya te dije mil y un veces que esa chica me causa inseguridad sigues cerca de ella, entiende Singto, no te pido que te alejes solo te estoy pidiendo que pongas limites, no pasaría nada si fuera la primera vez, pero ya van cuatro veces que te lo repito y no es justo que yo me este sintiendo así y tu estés como si nada.
- Dime ¿porque te causa inseguridad?
- No me gusta la cercanía que tiene, y no me malinterpretes, se perfectamente que no tiene intenciones de amistad y se perfectamente que tu no le harás caso, pero no me gusta que este tan cerca tuyo y tu, pedazo de imbécil no se de cuenta porque están tan malditamente cegado por su falsa amabilidad y falsas tragedias, teniéndole lastima que no te das cuenta de lo que en verdad es.
- Entonces dime ¿quien es realmente Krist? ya que eres experto en la gente, cuéntame.
- A pesar de tu estúpido sarcasmo te lo diré, es una mentirosa que se acerco a ti a base de mentiras y falsas tragedias porque ¿ adivina que? todas esas tragedias que le pasaron a la desdichada chica son inventadas o robadas de sus ex amigos.
- ¿y tu como sabes todo eso? es obvio que estas inventando todo contra ella, Krist yo te amo a ti te lo he dicho una y mil veces, mira hagamos esto, yo me alejo de ella, pero no definitivamente porque, es una chica que me entiende a la perfección.
- Haz lo que quieras, yo ya no intentare nada, me voy de la casa.
Antes de que Krist pisara siquiera la recamara Singto lo detuvo, hablaron mas tranquilos y se arreglaron, claro con una condición-capricho de Krist y fue que Singto fuera por su comida favorita para compensarlo, lo puso muy de buenas, antes de salir Singto le dio lo que seria su ultimo beso sin saberlo... pasaron 20 minutos
30 minutos
40 minutos
1 hora
Krist ya estaba preocupado y cuando recibió una llamada del hospital diciéndole que su pareja estaba en urgencia por un accidente automovilístico se detuvo todo por un momento, corrio asustado hacia la dirección del hospital. Sin embargo llego tarde, apenas entro al hospital vio a los padres de su novio llorando y la mirada que le dieron... esa maldita mirada le dijo todo y nunca lo olvidara.
Solo asistió al funeral de su amado pero después de ese día, no quiso salir del departamento que una vez compartió con su novio, todos se preocuparon y aunque lo buscaban el no salia. Todo el día lo pasaba acostado abrazando un peluche que en su momento le dio Singto. Gun fue a visitarlo después de un mes sin salir y le hizo entender que la vida debía seguir sin el, claro debía guardarle luto y si el no quería tener mas una relación nadie lo obligaba a hacerlo, pero no podía detenerse solo porque el se haba ido...
Y ahí estaba de nuevo, en el cementerio frente a la tumba de su novio.
-Te extraño tanto, no solo yo, muffin siempre busca a su padre - rió con amargura - seguiré con mi vida, pero prometo que no te olvidare. Te amo Singto, no pude decírtelo ese día porque salirte rápido pero te amo gracias por los mejores 5 años de mi vida, prometo venir a visitarte seguido.
Con eso Krist se fue caminando con los ojos rojos e hinchados pero con un peso menos en su pecho