Niñero (Adaptación)

Capítulo 2

NARRA GAVI

Él se quedó callado sin saber que decir y yo me fuí a sentar a que terminara de preparar el desayuno.

Tenía que idear un plan para escaparme esta noche, no podía faltar a esa fiesta, todos iban a ir y tenía que admitir que algo en mi interior ardía lleno de excitación el solo pensar en que me descubra.

El día entero Pedri trato de evitarme lo más posible, que no era mucho dado el hecho de que estábamos en la misma casa. Solo me hablaba para preguntarme cosas sin importancia y fue así hasta que dio hasta la noche en la que ya tenía mi plan para escaparme que no creía que iba a ser tan difícil si me sabía su horario.

Eran las diez y comencé a prepararme, salí del baño que tenía en mi propio cuarto con la toalla enrollada en mis caderas y justo se abrió la puerta de mi habitación haciendo que pegue un salto del susto.

Pedri: ¿Qué haces?.

Gavi: Cantando... ¿Que crees? - dije sarcástico al ser muy obvio lo que hacía siempre me baño antes de acostarme. - él solo asintió sin confiar mucho en lo que decía. Comenzó a ver mi cuerpo y sus ojos me recorrieron entero. Aún tenía algunas gotas del agua recorriendo mi abdomen y espalda.

Él reaccionó y se fue enseguida, causando que se me salga una sonrisa triunfante, ya lo tenía atrapado solo era cuestión de tiempo para que caiga.

Una hora después me puse una bata de baño y me acosté en la cama esperando a que abra y me vea dormir para que se valla y deje de vigilarme.

Como supuse, él entró a mi cuarto y me vio dormir, luego, se fue, cuando escuché sus pasos alejarse, lo más silencioso posible comencé a ponerme la ropa con la que iba a salir, hice todo lo que me faltaba y comencé a bajar las escaleras lentamente sin hacer ningún ruido. Podía escuchar desde aquí como estaba en la habitación de huéspedes caminando haciendo quien sabe que y me fui por la puerta trasera.

Pude sentir como el aire fresco de la noche golpeaba mi rostro fuertemente haciéndome sentir libre, pedí un taxi y me fui a la fiesta.

Siempre había una frase que me repetía cuando hacia este tipo de cosas.

"Mas vale pedir perdón que pedir permiso"

Eran las tres de la mañana y esa vocecita en lo más profundo de mi mente me advirtió que me tenía que ir, si no quería mas problemas de lo que suponía que ya tenía, así que no me hice esperar y comencé a despedirme de todos.

La había pasado bien pero no bebí mucho y personalmente nunca me hubiera ido a esta hora, siempre llegaba a la casa como a las cinco, incluso hubo una vez que llegue a las siete de la mañana ya que me había ido a la casa de alguien que había seguido con la fiesta, pero eso no era lo importante en este momento.

Ferrán: ¿Ya te vas? ¿Tan rápido?.

Gavi: Si Fer es recuerda, no puedo llegar tan tarde.

Ferrán: ¡Pelo es si es tempranou hahah! - Se podía notar a leguas que estaba borracho, cuanto desearía estar así ahora mismo, para así treverme y subirme sobre Pedri y follarlo o bueno, que el me folle a mí. - Bueno me saludas a... - jadea - y dile que lo quiero. - yo solo me reí y me fui del lugar, él era el único con el que valía la pena despedirme.

Llegué a casa justo como me fuí y al entrar por la puerta trasera pude ver la luz de la sala prendida haciendo que me paralice al pensar que Pedri se dió cuenta.

Una cosa es pensar en la posibilidad de que me descubra y otra muy grande es que me haya de verdad descubierto, pude sentir mi cuerpo comenzar a sudar y mi estomago empezar a dolerme de los nervios. Entre lentamente, estaba a punto de subir las escaleras cuando una voz me paró, haciendo que gire la cabeza asustado hasta quedar frente a él quien me miraba serio como siempre pero podía notar una chispa en sus ojos que me hacían sentir intranquilo.