Internado Málintón, profecías#2 . *en edición*

Cap 015. Resaca

Kiara
Siento la pulsación en mis cienes y me cubro la cara con una almohada. Lo que me sorprende es que la almohada parece de carne y hueso. Abro los ojos por completo y grito al ver la cabellera rubia de Mateo
— Maldita sea...— el chico me mira estresado
— ¿Que pasó anoche?— preguntó al borde de un sutil colapso
— No lo sé.— Dise el rubio mientras tira de su cabello con desesperación
— Pero que diablos.— susurra la voz rota de Alan
— O mierda.— Dise el Rubio
— Mateo que diablos te ocurre.— Dise y lo mira mal
Unas risitas que provienen debajo de la cama hacen que la broma se valla a la mierda, con fastidio veo a Isabela usando las piernas de Alex como su almohada personal
— Esto es horrible.— suelto enojada
— Toma mi amor.— Alan me pasa una especie de remedio
Le doy un suave trago al batido que no se ve tan mal. Una vez doy el primer trago lo escupo haciendo que caiga en el cabello de Manuel, el chico me fulmina con la mirada y todos ríen mientras yo aguanto mis ganas de morirme en este mismo instante
— Si tanto me amas no me tienes que dar un remedio de brujería.— digo enojada
Alan ríe y se acerca a mi con el vaso del demonio
— Debes tomártelo.— Dise mi Chico
— No me harás esto.— digo y el ríe
— Tienes que tomártelo.— el susurra
Sierro los ojos y dejo que el lleve el batido  a mis labios, el hace que un poco del líquido caiga poco a poco en mi boca y me lo tomo lo más rápido que puedo. Al terminar corro al baño y saco todo lo que está en mi estómago con rapidez, el asco me invade y juro que nesecito un baño
Se que estamos en el último piso del internado que es la casa de los desordenados 5. Camino algo mareada y camino al cuarto de Alan, agarro una de sus camisas y unos vaqueros que ruego no me queden tan horribles
Me dirijo al baño con una toalla en mano y recojo mi cabello en una coleta, me doy una buena ducha y cuando ya no me siento tan asquerosa salgo con la ropa que me queda gigante. Pero al menos resuelve
— Te vez como mi abuela.— mi hermana me mira
— Al menos no me veo como un alma en pena.— digo
— Yo también voy a parecerme a mi abuela, con permiso.— Dise
Ella me saca la lengua y camina hacia la amplia ducha de los chicos, yo me lanzo en la cama y cubro mi cara con una cobija
— Ahora... ¿Cómo van a ir a sus habitaciones?— pregunta Mateo
************
Los chicos miran la ventana con miedo, yo y Isa nos reímos
— No los dejaremos caer lo juro.— digo
Alan asiente y se sostiene de mi mano. Bajo con el y caemos perfectos en el suelo, el chico me abrasa y luego se ríe. Bajo a mi novio y a Mateo y luego Isa a Matthew y a Manuel. Jugamos piedra papel o tijera y como yo pierdo subo a por Alex
— Yo... Me voy a matar.— me río
— Solo sostente.— el asiente
Alex se agarra de mi brazo temblando, me lanzo con el chico a un lado y lo sostengo lo más fuerte que puedo
— Mamá... ya no puedo.—
El se suelta de mi brazo
— ¡Aleeeeeeeeeexxxxx!— grito
El chico se sostiene de mi pie y me hala hacia abajo. Sierro los ojos esperando el impacto sabiendo que me estoy cayendo de un sexto piso
Al llegar siento unos brazos sostenerme pero también tres golpes en seco. Abro los ojos y veo a Manuel y Mateo en sima de Alex, el chico grita y todos lo ven preocupados
— Me rompí una pierna.— Dise
— Dios no puedes ser más idiota.— dice Matthew
Los chicos cargan a Alex mientras reciben sus quejas

***

Bueno, decir que el estúpido de Alex se calló de la ventana y se rompió una pierna con éxito es poco. aún me pregunto porque diablos se soltó. En la enfermería la enfermera pone una venda en la pierna del chico y este sonríe adolorido
— Estás listo, ten más cuidado.— la enfermera le da unos toquecitos en la cabeza y luego se va
— Eres un idiota.— Dise Matthew
Rio y en eso la puerta se abre, Santiago y Liam pasan viéndose  como borrachos en pena y se dirigen al estante de las pastillas
— Te metiste demasiado alcohol.— bromea Liam
— Y tu demasiado pelinegra.— Santiago ríe
— ¿Y tu rubia que?— entrecierro mis ojos hacia Isa
Ella ríe y ignora el comentario de los chicos. Ellos voltean y nos miran y luego siguen en lo suyo
— Chicos creo que voy a morir. Veo la luz.— me río
— Alex no seas tan dramático solo te caíste de un sexto piso.— Dise Mateo
Isabela y yo volteamos hacia el
— Yo me caí de un octavo piso escapando de la casa de mi ex.— Dise Manuel
Yo me río y lo miro
— Son idiotas.— digo
— Habla la que tiene una camisa más grande que todo su ser.— le saco la lengua a Isa
— Tu de que hablas si eres más enana que yo y la camisa también te queda gigante.— Alan se levanta
El pasa por alado de Liam y Santiago y agarra dos píldoras, luego pone una en mi mano y otra para Isabela
— ¿Te traigo agua?— pregunta mi novio
Yo asiento y el sale de la habitación, yo pongo la cabeza en la camilla del moribundo y sierro los ojos por un segundo. Comienzo a pensar que esto de dormirme en cada lugar pocible se me está haciendo común pero no le presto atención y lucho en contra del sueño
— Aquí está tu vaso pequeña.—
Abro los ojos y detallo al chico frente a mi de pies a cabeza. La camisa se pega a su cuerpo como una segunda piel, sus ojos me miran con amor y sus labios se ven mejor desde aquí. Sus mechas rojas caen despeinadas, dándole un estilo sexi de chico malo
El acerca el vaso a mi y yo lo sostengo. El abre mi boca sosteniendo mi mandíbula suavemente y coloca la píldora debajo de mi lengua, un escalofrío me recorre por lo intenso que nos estamos mirando. El sigue sosteniendo mi mandíbula y yo llevo el baso a mis labios suavemente y antes de dar el trago me relamo los labios
Alan deja su mirada en la zona y yo le doy un trago suave al baso. Asiendo que el agua baje por mi garganta
Santiago
:
La noche de ayer fue bastante agotadora, fue difícil verla con Alan pero nada se compara a la escena que tengo frente a mis ojos justo ahora. Veo como el sostiene la mandíbula de Kiara y los dos se miran como si fueran el mundo del otro
Ella bebe el agua no sin antes relamerse los labios mirándolo a él. El cuerpo del chico se tensa de pies a cabeza y podría jurar que ahora mismo está en completo shock
Cuando ella bebe el agua lanza el vaso a un lado y ataca los labios del pelirrojo. Me quedo elado viendo la escena y Liam a mi lado está estático, no tenemos reacción ninguna y juro que no se que tipo de reacción tendría ante esto
Camino despacio hacia la puerta de la enfermería sin si quiera temblar. Al salir de la enfermería camino hacia el jardín y al llegar me lanzo al pasto. Liam a mi lado suspira y me mira
— Todo esto es una mierda por completo.— Dise y yo asiento
— Nesecito que esto pase rápido.— Liam me mira
— No sé si de verdad quiero que pase rápido porque aún no sé si estoy listo.— Lo miro y suspiro
El jardín está desolado, nadie nos mira y juro que nunca avía disfrutado tanto estar en un lugar en silencio junto a mi mejor amigo. Cuando la ligera lluvia comienza a caer sobre mi ni si quiera pienso en levantarme
Aunque cayera un diluvio me quedaría solo sintiendo el agua chocar contra el suelo
La tormenta ataca despacio y Liam se levanta, el extiende su mano y yo la tomo para levantarme, el comienza a caminar bajo la lluvia y yo lo sigo en silencio
Nos adentramos en el bosque y al llegar comenzamos a correr
***
Liam sostiene un poco de leña y comienza con la fogata mientras que yo organizo la cómoda mesa de madera con los alimentos necesarios. Me levanto y comienzo a poner la comida en el fuego junto a mi mejor amigo
— No me voy a quejar porque llevo tiempo haciéndolo.— me río
— Es difícil no quejarse hermano.— el asiente
— Santiago pensé que todo esto sería diferente.— lo miro
— Yo también pensé lo mismo. Pensé que sería fácil de lidiar con todo esto.— asiento
Liam agarra el poyo y lo saca del fuego y lo sirve en un plato. Yo agarro un pedazo de poyo y una ensalada que teníamos aquí en la cabaña. Comienzo a comer junto a mi mejor amigo y sierro los ojos para intentar pensar en algo que no sea ella. Pero sus ojos café aparecen en mi mente
Quisiera poder decirle lo que siento. Quisiera abrasarla y intentar que me entendiera pero es en vano seguir intentando. Kiara sabe que lo daría todo por ella pero muero por verla
Y entonces. Mi pulsera brilla al igual que la de Liam
Me teletransportó a donde la pulsera me llama. Al llegar la castaña se lanza a mis brazos y me mira
— No me dejes. No te vallas por favor.— susurra
Liam me mira ya que estamos en la habitación de las chicas. El asiente y yo me siento junto a Kiara
— Soñé que te pasaba algo... Que algo te sacaba de mi vida... Pensé que tú...— la abrazo y hago que se calle
Sus labios se tuercen en una sonrisa suave y lo se porque sus labios están justo en mi pecho. La electricidad recorre mi pecho a pesar de la camisa
— Te quiero.—
Mi corazón late desbocado y la recuesto en la cama. La miro y sonrió
— Tanbien te quiero.—
La cubro de pies a cabeza y acaricio su cabello. Dejo un beso en su frente y me marcho de la habitación
...
Okkk
Esto no es lo que yo pensaba que saldría de este cap
No me arrepiento, pero siento que ya le estamos dando muchas largas a este asunto
Así que
Próximo capítulo potente
No adelanto nada más

Nos leemos 🌻
🐉