Me Convertí en el Hermano Mayor de la Heroína de una Novela Abusiva (danmei).

Prólogo.

El día que murió Jun Huailang, llovió en Chang'an.

Al mediodía, se habían acumulado profundos charcos en el suelo de piedra caliza, pero la lluvia no cesaba. La fría lluvia que barría el viento otoñal sólo podía caer.

Los trescientos cincuenta y seis miembros de la familia Jun se arrodillaron ante la Puerta Xuanwu¹ tan densos como tallos en un campo de lino, esperando su ejecución.

Jun Huailang se arrodilló en primer lugar en el campo de ejecución, con el cabello y la ropa empapados y los labios pálidos. La lluvia caía sobre su rostro, pero parecía no sentirla. En sus oídos se oía el llanto de las mujeres y los cotilleos de la multitud.

No necesitaba escuchar, ya sabía lo que decían.

La familia Jun fue una de las fundadoras del Gran Yong. Doscientos años atrás, el antepasado de la familia Jun había luchado junto al primer emperador de Yong. Tras fundar el país se le concedió el título de duque Yongning² y este título nobiliario se había transmitido a través de muchas generaciones.

El primer emperador de Yong era un hombre desconfiado. La mayoría de los ministros que ayudaron a fundar la nueva dinastía fueron asesinados una vez que cumplieron su propósito³. A nadie se le permitió una muerte pacífica. Sólo la familia Jun había sido honrada durante doscientos años, hasta hoy.

Ejecutar a esa familia y apoderarse de todos sus bienes no sería posible en ninguna corte o dinastía. Pero tampoco era extraño que las cosas llegaran a este punto.

Después de todo, el gobernante del estado vasallo Yunnan se había revelado, y los soldados estuvieron a punto de atacar Chang'an hacía un mes. Da Yong se vio sumido en el desorden por culpa de una sola persona.

Esta persona no era el traidor que incitó a la rebelión armada, más bien era el traidor que asesinó al príncipe Qin, Xue Yan.

En el momento en que el rey de Yunnan levantó su ejército, Xue Yan estaba en el norte preparado para la batalla contra los invasores Tujue⁴. En poco más de un mes, derrotó sin esfuerzo al ejército de 200.000 Tujue e incluso reconquistó la prefectura Yan que había estado ocupada por ellos durante muchos años.

Tras aplastar a los Tujue, corrió inmediatamente hacia el sur con el ejército, llegando cuando las tropas de Yunnan rodeaban Chang'an. En los últimos meses, el rey de Yunnan había triunfado en todas las batallas, pero inesperadamente su caballería acorazada fue eliminada con facilidad. Con un solo golpe de espada, el rey de Yunnan, que había estado a medio paso de convertirse en emperador, fue decapitado y dejado colgado frente a la puerta de Xuanwu.

La sangre del cuello del rey de Yunnan manchó los ladrillos grises. Con esto todo el mundo pensó que la paz volvería a Chang'an. Nadie esperaba que, a partir de ese día, Chang'an ya no tendría paz.

Después de que el príncipe Qin matara al rey de Yunnan, asaltó la Ciudad Imperial con su ejército. De una estocada, apuñaló al emperador hasta la muerte en el Trono del Dragón.

Inmediatamente después, el príncipe Qin asesinó a todos y cada uno de sus propios hermanos por su propia mano. Sólo el octavo príncipe de tres años se salvó. Xue Yan envolvió al niño de tres años en una túnica de dragón y lo empujó al trono, con él mismo como regente.

Toda la sociedad fue sacudida. Naturalmente, los funcionarios se le opusieron uno tras otro. Algunos se le opusieron por el parricidio y el regicidio, otros porque sus propios intereses sufrieron. Intentaron utilizar las leyes y la etiqueta ancestral para alejar a este gobernante ilegítimo.

Estaba claro que no entendían en absoluto a Xue Yan.

Desde el Palacio Imperial, apuntó con su espada a la corte. El anterior emperador había sido asesinado y el nuevo emperador era un niño. Todo lo que necesitó fue una sola palabra o mirada y un sinnúmero de funcionarios de la corte fueron, sin previo aviso, descubiertos por la Oficina de Inteligencia. Sin siquiera una condena, ya fueron arrastrados a la Puerta Xuanwu y decapitados.