2.- Discusiones.

100 15 2
                                    

- ¿Entonces Sean pegó a Ethan? -Preguntó Courtney con los ojos como platos mientras yo ponía el código a mi taquilla. Primer día de clase, ¡qué emoción! (Nótese la ironía).

- No, solo le empujó, Courtney.

- ¿Y qué pasó después?

- Pues Ethan se encaró, pero mi hermano no estaba lo suficientemente borracho como para iniciar una pelea con uno de sus mejores amigos, así que me cogió y me llevó a casa con él.

- Entiendo... - Susurró pensativa, con una mano en su barbilla.

- ¿Llegaste a tirarte a Sean? Si es así, no quiero detalles. Mi hermano y mi mejor amiga, ugh. - Hago una mueca de asco. - No había más hombres en todo California, ¿verdad? Tenía que ser MI hermano.

- Oh, vamos April, no te pongas así. - Dijo sonriente, pasando un brazo sobre mi hombro. - Él no es como los demás.

- Oh, no, no, no. - Me aparto y me pongo enfrente de ella, cerrando el paso. - Así se empieza, "él es diferente", "él no me trata como una puta", "él no sé qué, él no se cual, blablabla". Y después... - La señalo con mi dedo. - Tú acabas en la cama de mi hermano, profundamente enamorada, y yo acabo sola escuchando tus gemidos desde mi habitación.

- Lees demasiado, tonta. - Contesta apartando mi mano y emprendiendo de nuevo su marcha.

- No es eso Court. Tú también conoces a Sean, sabes que se acuesta con una cada noche y después las deja tiradas. Lo sabes.

- Mira April, Ethan era igual, mírale ahora. - Contesta. Courtney 1, April 0. ¡Señoras y señores, hagan sus apuestas!

- Paso Courtney. -En ese mismo instante suena el timbre que indica el comienzo de las clases. «Salvada por la campana». - Latín. - No podría empezar peor, ¿verdad? La asignatura que más odio un lunes a primera hora.

- Literatura...- Suspira Court. - Dios, odio literatura.

- Me voy ya, que llego tarde. - Sonrío y me despido de ella con un beso en la mejilla. Mientras me alejo, le grito. - ¡Piensa que es mi hermano, Court!

- ¡Pues seríamos hermanas! - Responde igual de alto. De verdad que esta chica no tiene remedio.

Primera hora. Latín con el profesor Brown. Ese hombre era tanto o más malo de lo que decían. Pero si nada más llegar nos ha cambiado a todos de sitio, es más, a mí la primera. No llevábamos ni 10 minutos de clase y ya me tenía manía. Ahora estaba sentada con un nerd, ¡un nerd! No podía caer más bajo, ¿verdad?

Tras la clase de matemáticas (clase normal, el profesor no me hizo bullying, nada que añadir), corrí hasta la cafetería como si mi vida dependiera de ello. Esta mañana no había desayunado y mi estómago era una orquesta, la cual no tocaba precisamente Beethoven o Mozart.

Aún no había pensado que hacer con Ethan. Quería pensar que todo había sido cosa del alcohol y lo que fuera que se hubiese fumado, pero, aun así, se portó demasiado mal conmigo. No quiero cortar con él por dos motivos. El primero: me gustaba lo suficiente como permanecer con él, aunque quizás menos de lo que debería gustarme; el segundo y último: la repercusión en el instituto sería demasiado grande como para arriesgarme.

Llego a la cola y cuando los estudiantes se dan cuenta de mi presencia me ceden el paso. Cojo un flan, una manzana y un zumo de naranja. Voy hacia la mesa de los populares (la cual nunca está ocupada) y me siento, esperando que llegue Courtney antes de que lo haga Ethan.

Pero, como no, la mañana sí que podía salir peor.

- April, yo... - Le miro. Tiene ojeras, parece no haber dormido nada desde el sábado.

Ayer me mandó unos 15 mensajes y me llamó 12 veces. No contesté a ninguna de las cosas. Sinceramente, no me apetecía hablar con él en ese momento. No porque estuviera enfadada, sino porque necesitaba aclarar las ideas y él no era la persona adecuada. No funcionó, ya que ahora mismo, al mirarle a los ojos, estoy más confusa que ayer.

- Te pasaste. - Contesto seca.

- Lo sé, lo sé. Y lo siento. Juro que no sabía lo que estaba haciendo, me dejé llevar porque estaba jodidamente colocado y... no sé qué decir. Ya sé que no me tienes que perdonar ni nada porque lo hice mal, pero me arrepiento de todo lo de ayer April. Si me das otra oportunidad te juro que no volveré a hacer algo como eso. Por favor. - Ahora enserio. Si un chico así, te dice algo así... Te vuelve loca.

- ¿Prometes que no lo harás? - Contesto dudosa.

- Te lo prometo.

- Joder... Está bien. - Digo al final. - No me hagas arrepentirme.

- Claro que no, April. - Contesta dándome un rápido beso en los labios.

Entonces llega Courtney, tirándose (literalmente) en la silla y moviendo la mesa, haciendo que mi manzana salga rodando por la cafetería.

- ¿Habéis visto lo bueno que está el nuevo profesor de matemáticas? - Dice sonriente.

- A April no le interesa, teniéndome a mí. - Egocéntrico. Courtney me miró con cara de "lo habéis arreglado y yo me entero ahora, más tarde te interrogaré".

- Bueno, sí. - Contesto. - ¿Sabéis que el director Williams ha organizado una reunión para todos los padres? No entiendo para qué, pero si acabamos de empezar.

- Probablemente sea para orientar y esas cosas, ya sabes. - Dijo Court. Entonces llegaron Aiden y Sean. La tensión entre Ethan y mi hermano era tan pronunciada que se podría cortar con unas tijeras.

Aiden era el mejor amigo de Ethan y Sean. Los tres eran completamente inseparables. Y digo eran, porque desde el sábado no sé qué ocurrirá.

- Chicos, me voy. El día ha sido largo, no sé. Estoy cansada. - Hablo.

- Te llevo April. - Contesta Sean. - Hasta mañana chicos.

Salimos hacia el aparcamiento en un silencio un tanto incómodo. Éste no se rompe hasta que Sean ya ha arrancado el coche y se está dirigiendo a casa.

- ¿Cuántas veces más hizo eso? - Preguntó seco.

- ¿El qué?

- No te hagas la tonta April. El obligarte a... joder. -Hace una pausa. - A follar. -Dice al fin.

- Nunca. El sábado fue la primera vez que se comportó así.

- ¿Le has perdonado?

- Sí. - Se tensa. Lo noto por como sus nudillos están blancos al volante y aprieta la mandíbula.

No contesta, ni contesto. Así que simplemente pasamos el resto del trayecto en un silencio demasiado incómodo, escuchando música aburrida que ninguno de los dos se atrevía a cambiar.

- ¡Hola mamá! - Grito al llegar a casa.

- ¡Venid aquí chicos! - Responde desde la cocina.

- ¿Qué pasa? - Pregunta Sean cuando ya estamos frente a ella.

- Pues veréis, he hecho unos amigos fabulosos en la reunión de esta mañana. - Contesta risueña. - Y esta noche van a venir a cenar, así que quiero que os comportéis perfectamente.

- Claro, ¿pero quiénes son?

- La familia Dallas.

Parece que hoy va a ser un día divertido.

____________________________________________

(n/a): ¡Gracias por esas +100 lecturas! Significa mucho para nosotras.

No os olvidéis de votar y comentar, que eso te ayuda mucho a seguir escribiendo.

Posdata: Ethan en multimedia.

Popular or NerdDonde viven las historias. Descúbrelo ahora