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Calidez

Las calles de ciudad Kidom están desoladas, la nubes cubren todo el perímetro y parece que otra vez, el clima no será favorable.

Pasos apresurados se escuchan de fondo y pronto se distingue al causante que anda por la avenida principal.

Una capucha cubre su identidad, tiene ropa casual pero lo suficientemente abrigado y una mochila colgando de sus hombros.

Un maullido lastimero es oído por la persona y detiene sus pasos para indagar de su origen.

Es lo que ha estado persiguiendo desde hace unos momentos, el silencio entre los rincones es beneficioso y lo usa a su favor para agudizar más sus sentidos.

Sus ojos recorren los alrededores hasta que se topan con un árbol cercano en el centro de la plaza principal. Una tenue sonrisa se vislumbra tras la capucha y el desconocido emprende caminó hacia dicha ubicación.

Una vez cerca, alza la mirada y encuentra un pequeño gatito color naranjita aferrado a la rama más gruesa del árbol, está temblando y llama con urgencia para que alguien lo rescate.

La persona se quita la capucha y muestra su cabellera rubia ceniza la cual se moja con las gotas de lluvia que empiezan a caer con parsimonia.

Un sudor resbala por su frente y la piel de su cuello también se nota perlada debido a la carrera que estuvo haciendo debido al gato que iba persiguiendo con anterioridad.

Se acerca al tronco y estudia la distancia que debería escalar para llegar al animalito, no obstante, hace una mueca al recordar que jamás ha realizado aquella acción y lo más probable es que caiga de bruces contra el suelo antes de poder alcanzar al minino.

Piensa un poco más y concluye que solo tiene esa opción para lograr su objetivo.

Arruga sus mangas hasta el codo y observa detenidamente las palmas de sus manos, estas poseen un pequeño rocío de sudor.

Hace unas semanas que lo ha ido practicando y esta podría ser una buena oportunidad para conocer cuánto ha mejorado desde la última vez.

Izuku le ha dicho que todo depende de la concentración y de la confianza en su propio poder, bueno, entre otros aspectos importantes.

El joven, que responde al nombre de Katsuki, flexiona una rodilla hacia adelante y su otra pierna la estira hacia atrás, creando una postura firme, extiende sus brazos en la misma dirección y enfoca las manos hacia el suelo.

Fija su mirada en la rama, una tenue luz naranja se asoma desde sus palmas y pequeñas explosiones, parecidas a fuegos artificiales, comienzan a distinguirse.

Concentró más su poder y una ruidosa explosión detonó contra el asfalto, aquello provocó un impulso que lo separó unos metros de la superficie, logró llegar hasta la rama y se sostuvo de ella con fuerza para no caer.

El ajetreo provocó que el gatito erice su pelaje y que su cola se ponga rígida, debido al susto estiró su patita y comenzó a arañar el brazo del joven, afortunadamente su polera era lo suficientemente gruesa para no sentirlo.

Katsuki sonríe algo incómodo por el rechazo rotundo pero aquello no lo hace desistir de su acción.

Se acomoda mejor sobre la ramaz escuchando un crujido por el exceso de peso que puede resistir, se quita su mochila y lo pone delante suyo, busca algo en el interior y poco después saca un trozito de pan, espera que se vea apetitoso para el animalito.

Estira ambas manos y como es costumbre, el gatito comenzó a chillar y a atacar con sus uñitas.

—Oh, vamos, no seas gruñón.. solo quiero bajarte de aquí...—

Héroe [DekuKatsu] +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora