𝙋𝙨𝙮𝙘𝙝𝙤 𝙇𝙤𝙫𝙚 🦋 𝙝𝙮𝙪𝙣𝙝𝙤

Chapter ϟ 35

━ [Hyunjin] ━

—¡Cariño, te extrañé demasiado! — admití tan pronto abrí la puerta del departamento y no dudé en abrazar a Minho. Ah, deseaba tanto tenerlo entre mis brazos porque me hace sentir tan jodidamente bien. Y no quería aceptarlo, pero me he vuelto tan dependiente de sus besos y caricias que me siento tan deprimido cuando no lo tengo a mi lado. Y al percatarme de que no he sido abrazado de regresó, me separé de él y le pregunté con tono serio—: ¿Sucedió algo, cariño?

—¿Qué le hiciste a Joy? — me preguntó con tono serio tras cruzarse de brazos.

—No sé de qué hablas— admití.

—Tengo la certeza de que sabes muy bien de que hablo.

Abulté los labios antes de decir—: Cariño, no quería que ella te alejara de mi lado porque te amo demasiado y no puedo vivir sin ti.

—¿Y es por ello por lo que decidiste asesinarla?

—Yo...

—Sabes que te puedo denunciar por lo que hiciste, ¿cierto? — me interrumpió con tono hosco.

—Cariño...

—Ponte de rodillas— me ordenó y no pude evitar acatar su orden en silencio. El peligris no dudó en desabrochar sus pantalones para después, bajarlos junto con su bóxer e inesperadamente, me tomó del cabello para hacer mi cabeza hacia atrás mientras decía—: Abre la boca, perra.

Gemí al sentir su pene dentro de mi boca y me fue imposible sentir arcadas puesto que ha llegado demasiado profundo en mi garganta, pero es tan jodidamente delicioso y satisfactorio el momento que no puedo evitar dejarme llevar por completo. Puse mis manos sobre los magníficos muslos de Minho para sostenerme pues el peligris ha decidido ser demasiado tosco.

—Eso es... Trágatelo todo— murmuró mientras movía sus caderas en busca de mi boca pues ha decidido follarla como si su vida dependiera de ello. —Te gusta ser toda una perra mala, ¿cierto?

—Mhm— gemí a modo de respuesta y luego, elevé la mirada hasta encontrarme con la de él y sentí mi pene temblar a causa de la necesidad que siento de ser tocado y follado por el peligris. Ah, no tengo duda de que estoy completamente enganchado de Lee Minho y tengo el presentimiento que en lugar de disminuir lo que siento por él, está aumentando sin control.

—¿Sabes lo jodidamente excitado que me siento ahora mismo? — me preguntó con voz ronca. —Saber que has asesinado a esa entrometida, me ha hecho sentir tan caliente— admitió y me sentí inmensamente feliz porque he hecho lo correcto.

De pronto, se corrió en mi boca y me lo tragué todo sin despegar mi mirada de la suya que se volvió más oscura.

Minho me ayudó a ponerme de pie y después, fuimos directamente a mi habitación en donde nos desnudamos por completo para continuar con la diversión.

—¿En verdad no te molesta lo que hice? — le pregunté tan pronto nos abrazamos.

—Sé que está mal, pero no puedo evitar sentirme tan libre— confesó.

—Hemos sido hechos el uno para el otro, ¿no lo crees, cariño? — le pregunté antes de lamer desde su hombro hasta el lóbulo de su oreja y sonreí con satisfacción al sentir el cuerpo de Minho tensarse.

—Sí, tienes toda la razón, bebé— admitió.

Me alejé un poco de Minho y comencé a masturbar nuestros miembros a la vez.

—Quiero ser tuyo para siempre y que tu seas mío para siempre— dije.

—Ah... sí— murmuró Minho entre gemidos. —Somos uno mismo, bebé.

Continué con mi movimientos hasta que nos corrimos y después, nos dejamos caer en la cama para tomar un poco de aire para continuar teniendo placentera diversión, sin embargo, no contábamos con que íbamos a quedarnos profundamente dormidos.