Vuelo a Ninguna Parte

Capítulo 2: Seguridad

Tony Stark corrió por el pasillo. Es un maldito multimillonario, un genio inventor, un playboy que posee su propio jet privado y estaba perdiendo su vuelo. ¡Inconcebible! Pepper definitivamente se está vengando de él. Al ver el pasaje C más adelante, Tony por un momento quiso darse la vuelta y dejarlo todo. Pero luego recordó la mirada de Potts, apretó los dientes y siguió caminando. El aterrizaje casi había terminado, quedaban unas diez personas en el pasillo. Ignorando la fila, el hombre se acercó al bastón. Apenas lo vieron, los rostros de los empleados de la aerolínea estallaron en sonrisas.

“Buenas tardes, Sr. Stark, Norwegian Air se complace en darle la bienvenida a bordo de nuestro avión, pase”, Judith, según su placa, parecía estar saltando de su piel de emoción. Ella le señaló el pasaje al avión sin siquiera revisar su boleto.

"Gracias, Judith", Tony le devolvió la dulce sonrisa y subió a bordo.

Stark encontró rápidamente su asiento: la clase ejecutiva estaba en el morro del avión. Obviamente, Pepper no encontró un lugar en el costado, por lo que debería volar con un pasajero más en el centro. Por el momento, el asiento de al lado estaba vacío. Todos los presentes lo miraron. Asombroso.

"Buenas tardes, señor Stark. Mi nombre es Cheryl, soy su asistente de vuelo. ¿Champagne o jugo?" Cheryl era una rubia delgada con una linda apariencia. A veces, a Tony le parecía que los asistentes de vuelo se hacían en las fábricas: se parecían mucho.

"Champagne servirá", dijo.

La chica le entregó un vaso. Los últimos pasajeros estaban a bordo. Madre con un bebé. Asombroso. Esperó a que se suba a la parte trasera del avión. Pero esto es interesante... El siguiente era un chico joven con una figura excelente. Probablemente un atleta, aunque Tony no sabía qué deporte podría conducir a tal físico. Negro como la noche, su cabello contrastaba maravillosamente con su piel pálida. Había cierta sutileza aristocrática en él. Malditamente joven y malditamente guapo.

Cuando el chico pasó junto al asiento vacío junto a Tony, el hombre se sorprendió al notar que se sentía decepcionado. Maldita sea, 'Tony, tal vez sea lo mejor. Es demasiado joven para ti.'

"¡Señor!" llamó Cheryl. "¿Tienes asiento prioritario en tu billete? Tú perteneces aquí.” Ella lo llevó al asiento al lado de Tony.

"Maldita sea", Stark respiró suavemente por lo bajo.

El chico agradeció a la azafata y se sentó en una silla. Tony continuó mirándolo discretamente. Definitivamente demasiado joven. '¿Tiene incluso veinte? Tony, esta es una muy mala idea. Pepper definitivamente no estará feliz con esto.'

"Oye, guapo", dijo Stark antes de darse cuenta de que había abierto la boca. 'Dios mio guapo? Esta es quizás la peor cosa que podrías decirle en un avión a un joven desconocido de veinte años, si tienes suerte. Maldita sea, Tony, no estás en un bar. '

El tipo miró a Stark con desconcierto, y el hombre parecía haber sido golpeado en el estómago. El joven tenía increíbles ojos verdes que Tony nunca había visto antes. Aún más sorprendente fue que los ojos del joven no expresaron ni un ápice de reconocimiento, una agradable sorpresa. Y esta mirada... nítida, plena, mirando directamente al alma. Parecía que, a pesar de su edad, este chico había pasado por mucho.

"¿Hola?" respondió con incertidumbre, obviamente confundido por el saludo de Tony.

Acento británico, debe averiguar con urgencia cuántos años tiene y olvidarlo para siempre o ... Por otro lado, puede conocerlo, anotar su número y esperar hasta que crezca. El pensamiento enfrió al hombre. 'Joder, Tony, no anotas números, no empiezas relaciones, tienes sexo, una vez con tu pareja, despierta.'