Tan enamorada de tus ojos. (Gojo Satoru)

Capítulo 1: "Un nuevo comienzo"

¿Por qué siempre hay una maldita maleta que no cierra bien? Es como si se pusieran de acuerdo la empresas de maletas y dijeran "Vamos a vender una que cierre bien y otra que no, que se jodan" solo por diversión. La próxima vez me compro una mochila de montañero.

Mañana por fin es el gran día, trabajaré en la Escuela Técnica de Magia Metropolitana de Tokio como ayudante, puede que no sea un trabajo del que presumir pero para mi lo es. Aunque en realidad solo iré para hacer una prueba...ojalá me contraten.

Me saqué el título de hechicera más tarde de lo usual por lo que podrían haberme mandado a la mierda, menos mal que no ha sido así.

Vendí mi piso para poder costearme todo el viaje, vivir en un pueblo en la otra punta de Japón no ayudó mucho, el poco dinero que sobró lo decidí ahorrar ante la posibilidad de que cualquier cosa pudiera salir mal.
Ahora me encontraba en un hotel guardando el pijama que había usado la noche anterior, el pueblo estaba a una hora del aeropuerto más cercano y no me quedo más remedio que reservar una habitación.

Después de pasar millones de controles, abrir las maletas para ver que no tenía nada ilegal y luego tener que cerrar la maldita maleta que no cierra bien, por fin estaba en el avión.
No era la primera vez que subía a uno pero aún así estoy muy nerviosa.
¿Y si he dejado todo para nada? ¿Estaré haciendo lo correcto? ¿Qué pasa si sale mal? Ya no tengo un lugar al qué volver y tampoco me espera nadie, ya no...

Mis piernas se volvieron gelatina cuando aterrizamos, ya no solo por las horas de avión, los nervios me comían. Mi corazón latía tan rápido que, lo juro, se veía como salía de mi pecho, mi boca estaba completamente seca y apenas sentía mis manos.

Estos síntomas empeoraron cuando estaba en la salida del aeropuerto con mis maletas, apenas podía verme los pies con tanta gente, menos mal que tenía mi técnica porque sino hubiera acabado aplastada.
No veo a la persona que la escuela envió para recogerme. ¿Se han puesto todos de acuerdo para no dejarme ver nada o qué? Un hueco, solo pido un hueco para ver la puñetera carretera. Tampoco pido tanto.
Como un milagro apareció a lo lejos un cartel con mi nombre, gracias al universo.

-Buenas tardes, yo soy Hirawa Sora.

-Encantado señorita Hirawa, soy Kiyotaka Ijichi uno de los asistentes de la escuela. ¿Me permite ayudarla?

-Sí, muchas gracias.

Parecía agotado, tenía las mejillas hundida y sus ojeras muy marcadas, debe ser duro ser asistente... No hablamos mucho durante el trayecto, tampoco soy muy habladora.

He de admitir que el paisaje era hermoso, de los más bellos que he visto. En la ciudad había tanta vida, tanta gente... Y el camino a la escuela era tan verde y lleno de naturaleza...

-Bienvenida a la Escuela señorita, espero a que sea de su agrado.

-Seguro que sí, gracias. -Al bajar vi a un hombre el cual supuse que era el director ya que me dijo que estaría esperándome en la entrada.

-Bienvenida Hirawa Sora. Soy Masamichi Yaga y el director de esta institución.

-Encantada de conocerle por fin. -Al darnos la mano es cuando realmente me di cuenta de lo pequeña que era ante él.

-Primero le mostraré las instalaciones siendo su habitación la última y luego irá conociendo a los profesores, alumnos, etc.

-De acuerdo director, muchas gracias.

-Antes de empezar quiero preguntar ¿qué te ha motivado querer estar aquí?

-Quiero ver hasta donde puedo llegar antes de morir, quiero irme de este mundo siendo una persona fuerte y habiendo hecho todo lo que he querido.