Knight intentó separarse de pitaya después de un rato, el dragón ya tenía bastante tiempo pegado de él y Knight se quería separar del abrazo pero pitaya no se quería mover.
-Pitaya quítate, eres pesado-
El rubio intentó separarle pero no logró moverle mucho, hasta que el dragón se movió por sí mismeAl separarse se percató de una pequeña mancha oscura en el cuello de su pareja así que sin perder ni un segundo le empezó a quitar el gorjal de la armadura. Knight le reclamo pero no le detuvo por lo que a los pocos segundos el cuello del guardia estaba expuesto dejando ver múltiples moretones, aunque estos no eran por golpes, estos fueron hechos por el dragón cuando estaba aburride y knight le dejaba pasar su boca por todo su cuerpo.
Estas marcas solo duraban unos 12 días pero knight siempre tenía uno que otro en alguna parte del cuerpo por la constante atención de pitayaPitaya regresó a la realidad cuando Knight le quitó el gorjal de las manos
-Ok suficiente, tengo que volver al trabajo-
El rubio se iba a colocar de nuevo la parte de su armadura pero fue detenido por el dragón que tomó sus manos para apartarlas y poder acercarse a su cuello
Knight se sorprendió un poco pero no lo apartó, el dragón solo se acercó para darle un pequeño beso en el cuello como de costumbre; después de eso pitaya le dio otro beso, luego otro y otro, y otro, y así hasta que de repente knight sintió la lengua del dragón tocando su cuello. Pitaya acercó a su pareja en un abrazo nuevamente mientras paseaba su lengua por su cuello mientras que el rubio solo soltaba leves jadeos y se aferraba al cuello del dragón buscando soporte.Podrían seguir así por todo el día pero knight tenía responsabilidades, (aunque en ese momento se le hayan olvidado por el contacto con el dragón) así que pitaya decidió soltarlo, no sin antes darle otro beso en el cuello pero en este, a diferencia de los otros, empezó a succionar la piel del rubio con la intención de dejar una marca más. Aunque Knight siempre le reclamaba a pitaya por ser celoso no podía evitar derretirse en sus brazos cuando el dragón era posesivo y lo tomaba con fuerza para marcarlo de una u otra forma.
Cuando por fin se separaron, knight se cubrió el cuello un poco adolorido, los moretones seguían siendo heridas después de todo
-Que te vaya bien el trabajo-
Dijo pitaya regresandole el gorjal que knight ni siquiera se dio cuenta que soltó.