Letras de amor

CAPÍTULO 2 "Los hermanos De León"

Era tarde para Sebastian, Nissa y Nora se habían duchado antes que el y le estaban esperando, pasarían por Mattias al aeropuerto y más tarde irían a conocer a los padres de Bastian, claro Nora moría por tardar en recoger al novio de su hermana, no sabia que le atenía en casa de los Leblanc.

-Y dicen que las chicas nos tardamos más- mascullaba Nissa mientras cambiaba la pagina de su libro.

-Oh vamos, lo dices por que fuiste la primera en ducharse- le atajo Nora removiéndose en su asiento un poco incómoda. Momentos después se escucho la puerta de la habitación de Bastian abrirse y salió este con el cabello húmedo revuelto, su mirada se iluminó al ver a Nora con su cabello castaño largo trenzado de lado, un poco de delineador de ojos resaltando sus mirada de azul profundo que emanaban sinceridad, su sonrisa tímida enmarcada de esos labios finos, el inferior atrapado entre sus dientes, nerviosa por la mirada de Sebastian. El vestido azul cielo y el listón en su cabello la hacían verse de lo más tierna.

-Te ves... Hermosa- dijo Sebastian después de unos segundos sin habla.

-Gracias, tu te ves bien- respondió Nora, un poco tímida evitando la mirada verde claro de su amado.

-Te ves hermosa, Nissa. Gracias, tu igual.- dijo Ni,sonriendo irónicamente- vamos, tenemos que ir por Matt.

Nora y Bastian vieron extrañados a Nissa, intercambiaron miradas y rompieron a reír con un creciente rubor en las mejillas.

-Vamos Ni, no seas tan infantil- dijo Sebastian limpiándose las lágrimas de risa. En respuesta Ni le mostró la lengua y se dirigió a la puerta. Como gesto casual Bastian tomó la mano de Nora y salieron tras Nissa.

Ya en el estacionamiento Sebastian abrió la puerta de copiloto y subió Nora, atrás Ni y el ocupó su asiento frente al volante. Por la radio sonaba "A thousand miles" de Vanessa Carlton.

-Making my way downtown, walking fast, faces passed, and I'm home bound.- empezó a cantar Nissa moviendo sus dedos como tocando un piano invisible, al ritmo de la música.

- starying blankly ahead, just making my way, making my way, through the crowd- Le siguió Nora con una sonrisa moviendo los brazos de un lado a otro por encima de su cabeza.

- And I need you, And I miss you, And now I wonder- terminó Sebastian la estrofa.

Terminaron de cantar la canción con sentimentalismo moviéndose al ritmo y con repentinas risas por los tonos que usaban en su voz. Nora se sentía más que feliz de compartir ese momento con su hermana y el chico que amaba, ese preciso momento le gustaría meter en una botella y guardarlo en su corazón.

Momentos después de terminar la canción llegaron al aeropuerto, Sebastian se estacionó y abrió la puerta a las chicas, caminaron hasta la entrada, donde Ni se detuvo un momento nerviosa.

-¿Y si viene Javi con él? No estoy lista para verlos juntos otra vez, no tan pronto.- susurraba Nissa acomodando su cabello de un lado, de otro, cruzando los brazos; esto sin dejar de caminar de un lado a otro, estorbando a los peatones que pasaban por ahí.

Frustrada su hermana la tomo de los brazos poniéndoselos firmes viéndola a los ojos.-Carajo, Nissa, no seas tan melodramática, nada te va a a pasar si los ves juntos, no ha pasado nada con Javi, o ¿si?- como respuesta, Nissa negó con la cabeza y suspiró.

-Tienes razón, nada ha pasado ni pasará, solo estoy exagerando- dijo y repitió un par de veces tomándolo como su nuevo mantra -vamos.

Nora sonrió a su hermana y empezaron a caminar con Sebastian a su lado. Tomaron asiento en la sala de espera, no mucho tiempo después, mientras Ni veía a la gente salir de una de las puertas de abordaje, lo encontró, una figura no muy alta, al menos para ella era alto, los cabellos rubios claros alborotados, sus ojos azules como el cielo de verano, la sonrisa sencilla, dientes rectos y relucientes que se asomaban por la ventana de sus poco gruesos labios. Matt se acercó a donde ellos, Ni se puso de pié y corrió a sus brazos casi tirándolo.

-Hola, princesa- dijo Matt con la sublime voz que Nissa amaba, con su acento argentino combinado con lo poco reseca de su voz, que al escucharlo te daba seguridad al momento en que te intimidaba.

-Hola, cariño. Te extrañé mucho- respondió Ni en el hueco de su cuello inhalando el dulce aroma de lavanda que sus ropas desprendían. Se separaron del abrazo y Matt le dio un rápido pero tierno beso en los labios, con un suspiro, obligado a quitar la vista de su novia giró a ver a los acompañantes de Nissa.

-Hola Nora, ¿Qué hay?- preguntó Matt acercándose a besar la mejilla de su cuñada- Hola, sos Sebastian, ¿no?- preguntó tendiéndole la mano al aludido.

Bastian con una sonrisa de lado, le correspondió el saludo atrayendo a Nora protectoramente con la mano libre.

-Un gusto, Sebastian Leblanc- se presentó después del apretón y bajo la mano- vamos, a menos que esperemos a alguien.

-Ammm...hay que esperar a mi hermano, esta recogiendo su equipaje- dijo Matt con un tono de pocos amigos.

A esta respuesta Nissa hizo una mueca y suspiró como tratando de controlarse.

- No mencionaste que Javier vendría- susurró con la voz un poco ronca del enojo.

-No creí que fuera necesario- respondió Matt entornando la mirada en la de su novia, tomó su rostro entre sus manos dando un suspiro- Ni, te juro que no habrá problemas, ¿de acuerdo?-dijo tratando de animarla. A esto, Nissa se encogió de hombros, escuchó un carraspeo y al voltear se encontró con Javi.

*Flash Back*

Nueva York, verano pasado.

Nissa esperaba en el aeropuerto, vio a Matt salir de la puerta de abordaje, ambos corrieron a abrazarse y momentos después, salió por la misma puerta Javi, esa fue la primera que lo vió. Un chico que podría pasar por gemelo de Matt exceptuando su cabello un par de tonos más oscuros y sus ojos igualmente, más oscuros, misteriosos.

-Un placer al fin conocerte- saludó Javi con una voz gruesa, acercándose a la mano de Nissa depositando un beso en los nudillos de esta.

*Fin del Flsh Back *

-Hola Nissa- dijo Javi inclinándose para besar la mejilla de esta- Nora- volvió a hablar, asintiendo a la aludida, que le asintió de vuelta.

-Un gusto verte otra vez- respondió Nora- El es Sebastian Leblanc. Sebastian, el es Javier Eduardo de León-Presentó formalmente. Javier sonrió y estrecho la mano de Bastian.

-Un gusto... ¿Nos vamos?-preguntó acomodandose una de sus maletas en el hombro. Todos asintieron y caminaron a la salida.

Y justo en ese  momento, Sebastian se dio cuenta que era pésima la idea de llevar a los hermanitos De León a la tranquila casa de sus padres, este esperaba que su máximo drama esas vacaciones fuera el color de rosas que le daría a Nora al pedirle ser su novia.