Estirpes de Linajes (Descubriendo la verdad)

Capitulo 3

Durante la media noche Jules se levantó, se dirigió hacia el limite donde estaban acampando para admirar el cielo estrellado y limpio de nubes. Suspiró dos veces, recibiendo la paz en que se encontraba en ése mismo momento, pensando en lo que había vivido, lo que les quedaba por hacer. Venelope se dio cuenta que no estaba, se levantó también, al verlo se acercó y le dijo: - ¿En que piensas Jules?¿No puedes dormir?- mientras se frotaba los ojos. Jules le contestó: - Pienso lo feliz que estoy de estar aquí, las personas que conozco y todo. Necesitaba respirar para despejarme, hace días que no luchamos, ni practicamos. Tengo ganas de quitarme ésta energía acumulada. ¿tu no necesitas descargar la tensión acumulada?- dijo con una sonrisa. Venelope le respondió: - Si la verdad que tenemos que estar agradecidos, tenemos la familia que siempre quisimos tener en nuestras vidas pasadas. Si, quiero pelear, antes preferiría no hacerlo, pero últimamente mi sangre de Bestia me pide pelear. Podemos decirlo en cuanto comamos algo por la mañana a los demás, a ver que nos dicen. - dijo con mucho entusiasmo. Cuando terminó Marlene les interrumpió y les dijo: - ¡Hecho! Vosotros tres seréis mis contrincantes. La verdad que me estaba aburriendo solo comer, estar sentada y no hacer nada productivo. - lo dijo con mucha energía. Jules les dijo: - Habrá que dormir para mañana estar en plena forma. Volvamos al campamento. ¿por cierto, lo has escuchado todo Marlene?- Ella le contestó mientras lo cogía por el cuello con el brazo: - Claro que sí. Eres un buen chico, que no se te olvide, aunque lo de "otras vidas pasadas"... sois todos rarisimos. Pero os queremos como sois los tres. Vamos a dormir para mañana. -

Al día siguiente al despertarse Jules y los demás. Se aproximaron a la hoguera, vieron a Cleit y a Hym tomando café sentados mirando hacía el fuego. Jules preguntó donde estaba Marlene, antes de acabar la pregunta se escuchó un fuerte estruendo al lado sud de donde estaba el campamento instalado. Los tres se agacharon sin saber el motivo de tal magnitud. Hym les contestó: — Ahí la tienes. El estruendo lo ha provocado ella misma. Comer algo y ahora vamos a verla. —

Venelope le dijo:

— No me la quiero imaginar cuando luchemos contra ella. Que ganas tengo de practicar con ella. —

Lyam al escucharla le contestó:

— Tranquila, irás después de mi. — Mientras lo decía en modo chistoso. Venelope se giró de golpe y le respondió:

— ¡De eso nada majo! Aquí los tres tenemos que hacerlo a suertes, así no habrá ninguna queja ni peleas por quién empiece primero. —

Lyam le preguntó:

— ¿A suertes? Bueno... ¿tienes alguna idea de como hacerlo?—

Venelope sonrió y gritó:

— ¡Lo haremos a la vieja usanza! —

Lyam se fijó en su sonrisa malvada y le dijo:

— Ahh! ¿No pensarás en ése juego?—

Venelope le contestó:

— ¡Si! Piedra, papel y tijeras. Y que sepas que yo soy la mejor. Venir los dos aquí y empecemos. —

Jules se puso la mano en la frente resignado. Cleit y Hym no entendían que juego era ese y por la curiosidad de saber se acercaron. Los tres empezaron con el juego, sacando las manos y recitando el juego. Marlene se aproximaba por allí, observó lo que estaban haciendo, se acercó al Rey Hym y le preguntó:

— ¿Que están haciendo esos tres? —

Hym le respondió:

— Si nos hemos enterado bien, están decidiendo quién luchará primero contigo, mediante un juego que aún no consigo entenderlo. —

Marlene movió la cabeza de lado a lado con una sonrisa chistosa. En ese momento Lyam sacó una piedra, Venelope y Jules tijeras. Lyam entusiasmado dijo:

— ¡GANÉ! Yo seré el primero. —

Venelope con rabia le dijo:

— ¿No os había dicho que era el mejor de tres? Aparte como me has ganado, has hecho trampa. —

Lyam le gritó:

— ¿Como puedo hacer trampa? Vale, no hay problema, ya os he pillado los movimientos. —

— Eso lo veremos. — dijo Venelope.

Marlene al ver el show que dieron esos dos le dijo a Cleit y a Hym:

— Parece mentira que tengan tanto poder, cuando se comportan así. lo mejor que he hecho es unirme al viaje, me lo paso muy bien. —

Luego se fijó en Lyam y pensó < Sobretodo quiero probar el poder de él, tengo la sensación que fluye el mismo poder que yo. > Jules captó el pensamiento de Marlene en ese instante, pero al escuchar lo último que dijo se sorprendió, no se esperaba escuchar semejante ¡SECRETO!, he hizo que perdiera y Lyam ganara las tres que necesitaba para ser el primero en combatir. Venelope resignada se dirigió hacía Jules para seguir con el juego, pero él le dijo que no le importaba ser el último, aún tenía en la cabeza lo que escuchó de Marlene. Marlene se acercó a los chicos y les dijo:

— He visto un buen terreno al sur de aquí, la verdad que podremos excedernos sin ningún problema. Solo hay arena y dunas. Aparte así podré quitarme estrés. Venid todos. —