Te enseñare a jugar

CAPITULO 22

DIEGO

La luz me despierta, aunque ya no se si es la luz o el dolor de cabeza. Tome demasiado alcohol anoche, Zac tuvo que irme a buscar a un bar porque claramente me fui a un bar en vez de ir a ver a Daffne. No niego que me lo planetie hacer pero no estaba de animos para esas cosas, asi que decidi ahogar mis penas en el alcohol.

Zac me hizo compañía toda la noche, me escucho llorar y me escondio el celular para que no la llame, para que no la escriba. Si llegaba hacerlo no sabría que le iba a mandar, capaz primero la insultaba de la peor manera y después le juraba amor eterno.

Me levanto de la cama y agradezco que no se me haya salido todo lo que llevaba en el estomago, Zac no estaba asi que supongo que prepara el desayuno. Salgo al comedor y ahí esta mi mejor amigo.

-          Diego, ahí tenes jugo exprimido, no creo que quieras comer nada.-

-          Gracias y no lo digo solo por el desayuno, te arruine la noche con Ash.-

-          No pasa nada, no siempre se ve a Diego llorando por amor.- Trato de tomarme eso como una joda pero me cuesta

-          No entiendo el chiste de enamorarse si vas a sufrir de esta manera.

-          Diego, enamorarse no es solo cosa mala. Enamorarse también es algo lindo.

-          Que poco nos duro lo lindo a nosotros.

La mañana paso tranquila, trataba de alargar lo más posible el tener que volver a casa. No quería verla, no podía verla. No sabia como iba a reaccionar.

Si la veía sabia que iba a querer besarla, iba a querer rogarle, iba a suplicarle que me deje de nuevo demostrarle que la amo. Pero tengo a mi orgullo, mi estúpido orgullo que arruina todo. Me dolia en mi orgullo, no solo me dejo sino que además que cuando le dije que la amaba no me dijo nada.

Yo entiendo que hice mal, que no tendría que haber jugado con ella pero... No puedo decir que me arrepienta porque estaría mintiendo, no puedo arrepentirme de lo que me hizo fijar en ella, en su carácter en todo lo que ella es.

Pero no podía atrasar más mi regreso a casa, Zac se ofreció a acompañarme pero le dije que no aunque no sirvió de nada porque ahora estaba entrando atrás mio al departamento. Para mi sorpresa había un gran silencio, parecía que no había nadie.

-          Por lo menos ella esta con animos de salir.- Digo mientras busco en la heladera

Entonces el celular de Zac suena y el atiende.

-          Amor ¿Qué paso?.- Esta hablando con Ash y yo lo miro mientras me sirvo jugo.- ¿Cómo? ¿Por qué?.- Zac casi estaba gritando y empezó a moverse por todos lados.- Pasame con ella ahora.- Nuestras miradas se cruzan y entonces entiendo que esta pidiendo hablar con Natasha.- ¿Por qué?.- Mi curiosidad crece y él evita mi mirada.- Esta bien, yo entiendo. Si es lo mejor para vos entonces te apoyo pero no te olvides de mi, no desaparezcas.- Sonrie, lo veo.- Si, Diego esta conmigo.- Le pregunto por mi y entonces él me mira.- Okey yo le digo, también te quiero cuídate.- Y cuelga

Me mira y no me dice nada ¿Por qué no habla? ¿Qué le dijo que me diga?

-          No pensas hablar.- Le digo algo desesperado.

-          Natasha dejo una carta para vos en tu habitación.

-          ¿No le da la cara para decirme las cosas de frente?.- Le digo mientras voy a mi habitación

Entro y en mi mesa de luz encuentro la carta, ahí esta, con su perfume, con su letra. La tengo en mis manos y no se si abrirla, tengo miedo. Me siento en la cama y tomo aire, mucho aire, cierro los ojos y pienso en sus ojos, sus hermosos ojos. Vuelvo a soltar aire y entonces tomo la carta y la abro...

"Hola bombón... No se como arrancar esta carta, no se por donde empezar.

Perdóname amor mío, yo no quería lastimarte. Bueno en un principio si, pero las cosas cambiaron. Cuando escuche tu conversación con Zac te tenia tanta bronca, me veias como un trofeo, como algo a conseguir y entonces decidí que lo mejor que podía hacer era enseñarte a jugar. Llego un momento en el que yo no sabia distinguir la línea fina de tus mentiras y tus verdades, por un lado tenia mis dudas y por otro lado tenia mis certezas porque cuando te miraba a los ojos sentía tanta paz, tanto amor. Confie en vos, confie en mi, confie en nosotros pero... La base de una relación es fundamental y nuestra base era un juego.

Perdón, perdón por lastimarte, creo que nunca voy a cansar de decirlo. Por favor no vuelvas a ser el de antes, no te cierres ante una mala experiencia.

Mi amor, quiero que sepas que esto me duele en el alma, quiero que entiendas que... Quiero que entiendas que TE AMO.

No se si es tarde para decirlo, pero solo se que cuando lo leas yo ya voy a estar en un avión de vuelta a Argentina. No me juzgues ni te enojes pero necesito distancia, los dos la necesitamos. No hagas desastre en mi ausencia, extrañame.

Nos vemos, tu chiquita te ama."

 

No se desde que momento las lagrimas empezaron a salir, salgo de mi habitación y ahí esta Zac.

-          Se fue.- Le digo un susurro.- Mi chiquita se fue.