¿Cómo se siente estar enamorado? //Kiribaku//

Capitulo 9.- Enfrentamiento

En la mañana de los exámenes, entré al salón y observé a todos repasando, incluso los más brillantes de la clase. Me sorprendió ver a Eitther en el asiento de Bakugou y a Bakugou sentado detrás de él. Me acomodé junto a Eitther, ocupando mi lugar habitual.

"¿Por qué cambiaste de lugar con Bakugou?" Le susurré a Eitther, consciente de que Bakugou tenía audífonos puestos y no podía escucharme.

"Fue... un favor que me pidió", respondió Eitther con una pequeña sonrisa antes de volver su atención a su cuaderno y seguir escribiendo.

La actitud de Bakugou no me permitía concentrarme; ayer no pude hacerlo y hoy, que estaba intentando concentrarme, tampoco lo lograba. Suspiré frustrado.

"¿Todo bien? ¿Necesitas ayuda?", preguntó Eitther al escuchar mi suspiro de frustración.

"No, tranquilo. Estás estudiando, no quiero distraerte", respondí, rascándome la cabeza mientras esbozaba una leve sonrisa.

"¡Ah, no! No te preocupes. En realidad, no estoy estudiando, estoy dibujando", dijo Eitther con una sonrisa radiante y me mostró su cuaderno, que contenía un dibujo extremadamente realista de Tamaki sonriendo.

Mientras admiraba el dibujo de Tamaki en el cuaderno de Eitther, no pude evitar reírme suavemente. "¡Eres realmente talentoso!, Pero no te preocupes estudiaré por mi cuenta", le dije en voz baja, sin querer interrumpir la concentración de los demás.

Eitther sonrió tímidamente y murmuró un agradecimiento antes de volver a sumergirse en su dibujo. Mientras tanto, Bakugou continuaba absorto en sus propios apuntes y parecía ajeno a todo lo que sucedía a su alrededor.

A medida que pasaba el tiempo, el ambiente en el salón se volvía más tenso conforme se acercaba el inicio de los exámenes. Observé cómo algunos de mis compañeros repasaban frenéticamente, mientras otros parecían estar tratando de relajarse antes de la prueba. La ansiedad también se apoderaba de mí, y mis pensamientos seguían regresando a la situación pendiente entre Bakugou y yo.

Eitther dejó de dibujar por un momento y volvió su mirada hacia mí. "¿Aún te preocupa lo de Bakugou, verdad?", preguntó con un tono comprensivo.

Asentí con un suspiro. "Sí, no puedo evitarlo. Siento que deberíamos hablar y aclarar las cosas antes de que esta tensión siga creciendo."

Eitther apoyó su mentón en su mano, pensativo. "Lo entiendo, Kirishima. Pero a veces, las cosas necesitan su tiempo..."

Entonces entro el profesor Aizawa, interrumpiendo la conversación que tenía con Eitther, todos empezaron a guardar sus cosas y dejando lo necesario para poder empezar con los exámenes.

Con el ambiente tenso y la concentración en su máximo punto, el profesor Aizawa comenzó a repartir los exámenes. Mientras miraba el papel frente a mí, no podía evitar que mis pensamientos se desviaran hacia Bakugou. ¿Cómo habíamos llegado a este punto de distancia y confusión?

Eitther me dio una palmadita en el hombro, sacándome de mis pensamientos. "Vamos, Kirishima, concéntrate en el examen. Bakugou está aquí, lo verás después."

Traté de centrar mi mente en las preguntas, aunque el ruido de fondo de los lápices rasgando el papel y los suspiros de mis compañeros de clase se entremezclaban con mis preocupaciones. A pesar de todo, logré completar el examen en el tiempo asignado.

El día transcurrió en medio de los exámenes, y durante la hora del almuerzo, todos excepto Eitther parecían absortos en repasar todo lo que pudieran para las últimas pruebas. Aunque intenté acercarme a Bakugou en varias ocasiones, siempre parecía esquivar mi presencia. Finalmente llegó el momento de los últimos exámenes, y al final del día, nos entregaron nuestras pruebas calificadas.