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Henry se toma unos días para pensar en las repercusiones de decírselo a Tony, todavía lo ama. Henry hizo que IAN lo ayudara a hacer una lista de pros y contras, la única desventaja que se le ocurrió fue que Tony no sentía lo mismo que él, pero eso era bastante grande, así que Henry pensó que contaba mucho.
Henry sabía que tenía que decírselo a Tony, pero estaba asustado, así que acudió a la única persona en la que podía pensar, Rhodey.
Las manos de Henry comenzaron a sudar cuando la levantó para llamar a la puerta, escuchó que alguien caminaba y luego la puerta se abrió.
"¡Henry Oakley! No te he visto en mucho tiempo". Roberta Rhodes abrazó a Henry.
"Hola, señora Rhodes". Henry sonríe y entra en la casa cuando Roberta se hace a un lado.
"Por favor, te dije muchas veces que me llamaras Roberta. ¿Qué puedo hacer por ti?"
"Me preguntaba si Rhodey está aquí". Henry mueve los pies para limpiar la suciedad que pueda haber en sus zapatos.
"Oh, sí, está en la sala de estar, ¿todavía recuerdas dónde está?" Roberta pregunta amablemente.
"Si, gracias." Henry sonríe.
"Estaré en la cocina con Jeanette". Roberta asiente y se va hacia la cocina.
Cuando Henry entra en la sala de estar, ve a Rhodey sentado en el sofá hablando con una niña que nunca antes había visto.
"Hola, espero no estar interrumpiendo". Henry llama tímidamente al marco de la puerta de la sala de estar.
"¡Henry! Hola, qué agradable sorpresa. Ven, siéntate". Rhodey asiente con la cabeza hacia la silla grande y cómoda separada del sofá.
"¿Quién es esta chica?" Henry le hace señas a la niña que está sentada frente al sofá mirando a Henry.
"Es Lila, la hija de Jeanette. Cariño, ¿por qué no vas a ver si tu mamá necesita ayuda? Henry y yo tenemos que hablar de cosas de adultos". Lilia resopla pero recoge sus juguetes y camina hacia la cocina.
"¿Cómo supiste que necesitaba hablar contigo?" Henry se ríe.
"Tienes la misma mirada que tenías cuando me preguntaste si puedes salir con Tony". Rhodey niega con la cabeza con cariño.
"Supongo que soy así de predecible, eh". Henry sonríe recordando lo nervioso que estaba.
"Lo siento, mamá quería que os sirviera un poco de café. Me alegro de verte de nuevo, Henry". Jeanette entró en la sala de estar con dos cafés, ambos en tazas de café Oakley Technologies.
"Eh, lindo". Henry se llevó la taza de café a los labios y le sonrió a Rhodey. "Um, ¿estás seguro de que todavía le gusto a Tony?" Henry espeta después de poner la taza de café en la mesa a su lado.
"Estoy seguro." Los ojos de Rhodey brillan con orgullo.
"¿Cómo estás tan seguro?" Henry frunce el ceño.
"Todavía tiene el tatuaje de la flor en el tobillo". Henry jadea, se levanta la pernera del pantalón para revelar el pequeño tatuaje de flor en un lugar a juego en su tobillo.
"Oh", susurra Henry, sin importarle que las lágrimas inunden sus ojos.
"Si ya no te amara, lo habría cubierto, créeme. Lo intentó muchas veces pero nunca pudo hacerlo, porque te ama Hen, siempre lo ha hecho y siempre lo hará". Henry se levanta y camina hacia inclinándose para abrazar a Rhodey, susurrando un gracias, camina hacia la puerta.
"¿A dónde vas?" Rhodey se ríe.
"A profesar mi amor". Henry le guiña un ojo a Rhodey y sale por la puerta.
No había tiempo para ponerse nervioso ahora, Henry tenía algo que hacer.
****
Los nervios comenzaron una vez que Henry se detuvo en el Compuesto de los Vengadores.
La duda comenzó a llenar la mente de Henry, pero la apartó, tenía que hacer esto, tenía que obtener respuestas. Antes de que Henry se diera cuenta, estaba en el ascensor subiendo hacia el penthouse de Tony.
"Oh, hola Henry, no esperaba verte hoy". Tony sonrió brillantemente cuando Henry salió del ascensor.
"Hola Tony." Henry se sentó en la sala de estar, repentinamente vencido por el nerviosismo.
"No es que no esté feliz de verte, pero ¿por qué estás aquí?" Tony se ríe torpemente.
"¿Recuerdas cuando nos hicimos el tatuaje juntos?" Henry traga.
"Por supuesto que sí, dijiste que para nosotros significaba para siempre, lo cual, supongo, no era cierto". Tony se ríe sin humor.
"Todavía podemos tener un para siempre", dice Henry en voz baja.
"¿Qué quieres decir? Rompimos". Henry se levanta de repente y se sienta junto a Tony.
"Tony, todavía siento algo por ti". Las manos de Henry pican por agarrar la mano de Tony, pero él se resiste.
"¿Qué? ¿Por qué? Rompimos". Tony niega con la cabeza.
"Bésame." Henry espeta.
"¿Qué?" Tony mira a Henry confundido.
"Bésame y si no sientes nada, te dejaré en paz". Henry decide dar un salto de fe y agarra la mano de Tony, de la que Tony no retrocede.
"Bien, pero cuando no sienta nada te olvidarás de nosotros, ¿verdad?" Tony mira severamente a Henry quien asiente.
Henry se inclina hacia Tony, coloca sus manos detrás de la cabeza de Tony, lo besa suavemente, esta posición le pareció natural a Henry, Henry podía sentir a Tony derretirse en el beso.
"Lo sentiste, ¿no?" Henry pregunta en voz baja, jadea un poco ante el asentimiento de Tony.
"Lo hice, y recordé por qué fue tan difícil romper contigo". Tony traga saliva.
"Siempre podemos intentarlo de nuevo, para siempre esta vez". Henry frota su dedo sobre los labios de Tony.
"Para siempre." Tony se inclina hacia Henry y lo besa de nuevo.
Claro, Henry realmente no sabe si tienen una eternidad, pero tienen una segunda oportunidad, y eso es lo que le importa a Henry.
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