CarLando one shots

Vacaciones Pt2.

Odio tus ojos, tu boca y tu voz
Odio que nunca dijeras adiós
Odio que pelearas hasta que no estabas
Odio tus besos, tu pelo y tu piel
Odio lo mal que defines ser fiel
Pero lo que más odio es que no te odio
Y nunca lo haré

Lando miro como Lewis y Oscar estaban peleando por que cocinar, mientras el australiano quería hacer una parrilla, él siete veces campeón se negaba a cocinar cerca de la carne y que el podía preparar algo delicioso sin necesidad de la carne. Logan y Nico solo veían a sus parejas pelear mientras jugaban con roscoe.

El australiano se vio en la necesidad de llamar al mayor, cuando al tercer día Lando se negaba a comer si quiera la mitad del plato. La relación entre ambos británicos era casi de padre e hijo, Lewis no dudo en tomar un avión desde los ángeles para asegurarse que su pequeño se encuentre comiendo adecuadamente. Así que un par de horas después de la llamada de Oscar, la pareja felizmente casada apareció en la residencia de Logan, junto al hermoso Roscoe.

"Hey, deseas" apareció Nico con una bolsa de snacks, ofreciéndole algo al baby britt, como Nico lo había apodado. "seguirán peleando por un rato, así que te recomiendo que lo comas, Logan fue a la tienda por algunas cosas que faltaban." Lando lo miro divertido.

"Solo esta escapando, porque Oscar va querer que este de su lado, pero no quiere enfrentarse a Lewis ni a la furia de su novio" menciono tomando la bolsa para comer un par de las frituras de la bolsa.

"Es cierto" el rubio se recostó en el pasto con el británico. "¿Quieres hablar?" todos habían evitado hablar sobre el tema, no querían presionar de ninguna manera al rizado.

"Estamos hablando, ¿no?" bromeo, dando una sonrisa falsa. "Me sigue escribiendo por redes, y su mamá me hablo" Nico lo miro curioso. "Siempre tuve una buena relación con su familia y al parecer ya lo saben así que, Reyes me llamo..."

-------------- flashback------------------

Lando estaba acurrucado y tapado hasta la cabeza con la sabana, queriendo ser una bolita y solo desaparecer de esta tierra. Que todos se olviden de él y él olvidarse de todo y de todos.

Había silenciado su celular por las constantes llamadas de Caco, había ignorado aquellas de Carlos senior, de Ana y Blanca. Pero cuando su celular empezó a vibrar y vio el nombre de Reyes en la pantalla no pudo deslizar su dedo a colgar, así que solo acepto la llamada.

"¿Lando?" la melodiosa voz de la matriarca de la familia Sainz se hizo presente, al igual que las lagrimas en los ojos verdosos del británico.

"Hola" una suave voz, temblando y casi rota es lo escucho la española.

"mi niño, lo lamento tanto" Lando no pudo retener el pequeño sollozo que salió de sus labios. "No, corazón, no llores. Por favor, hay Landito. ¿Cómo estás? ¿Estas con tu familia? ¿Necesitas algo?" El corazón de Lando se calentó un poco, por la preocupación de la española. Así que sorbio su nariz e intento respirar para calmarse.

"Estoy bien, Reyes. Gracias por preocuparte" respondió intentando calmar las preocupaciones de la mujer.

"Como no me preocuparía, mi niño. Pero, ¿estas acompañado?, ¿estas comiendo bien? Por favor, Landito, nadie vale la pena que te descuides. Ni mi hijo, ni una carrera, ni nada o nadie. Eres increíble cariño, un chico maravilloso y si no lo supo valorar aunque sea mi hijo es un idiota y no vale la pena que te dañes a ti. ¿Si?"

Lando lloraba en silencio por las palabras de la española. Reyes había visto al muchacho transitando problemas con la comida, pequeños ataques que vivió cuando perdió en Sochi, cuando paso por el odio masivo en redes. Ella había visto al muchacho pasar esos momentos y como era tan duro con él, que se castigaba a si mismo, no cuidándose.