Los Prisioneros

Capítulo 6 : Ese lugar al que fuimos enviados

El polvo se disipó cuando los dos salieron de la Zona Fantasma y fue una de esas situaciones de buenas y malas noticias. La buena noticia era que estaban fuera de la Zona Fantasma y, según todos los indicios, nadie parecía seguirlos. Eso siempre fue una buena noticia; de hecho, se podría argumentar que podría ser la mejor noticia de todas. El joven mago de cabello oscuro se paró al lado del kryptoniano rubio y vieron bien a su alrededor.

La mala noticia era que, honestamente, no tenía idea de dónde estaba, pero afortunadamente Kara sí, a juzgar por la sonrisa y la mirada de reconocimiento que cruzó su rostro. La hermosa rubia echó una mirada larga y evaluadora alrededor de las torres de cristal, empapándose de las estructuras con los ojos antes de girar sobre sus talones. La sonrisa en su rostro era deslumbrante como sus ojos.

"Bienvenido a Krypton, Harry".

Esta fue una pequeña noticia que sorprendió a Harry y su expresión se volvió un poco hacia ella, antes de ofrecer una sola pregunta y esperaba que Kara pudiera darle la respuesta que necesitaba. Su rostro se transformó en un ceño fruncido cuando cruzó los brazos y decidió decir una declaración obvia.

"Sin ofender, ¿pero Krypton no murió?"

Kara sonrió, en realidad era una declaración sabia y se preguntó si los habían enviado a alguna dimensión alternativa donde Krypton no explotara.

"Explotó, según Kal-El", respondió Kara, en realidad ella estaba allí cuando estaba a punto de destruirse, incluso dos veces y Brainiac la envió a la Zona Fantasma la segunda vez. Luego conoció a Harry, pero naturalmente eso no era nada que ella tuviera que hacer. "Esto es... parece tan pacífico ahora, no puedo creerlo".

Kara reflexionó sobre la situación en su mente y llegó a una sola conclusión cuando siguió caminando para obtener una evaluación completa de su entorno. No sabía dónde estaba, pero el problema era cuándo estaba; ese fue el pensamiento que pasó por su mente cuando tomó su mano y los dos continuaron caminando más allá de las estructuras de cristal. No había duda, estaban en Kandor.

Kandor antes de que explotara por primera vez y se restaurara poco antes de que ella naciera, anotó mentalmente.

"Esta es Kandor, la ciudad capital de Krypton, esta es... era mi casa", susurró Kara cuando miró a Harry antes de volverse hacia él y mirarlos a los ojos. "Yo... no estoy seguro de si todavía estamos en el presente o no. La gente de la Zona Fantasma dijo algo acerca de que todavía existe, pero está restaurado. Me pregunto qué le pasó, no parece … bueno, no es como si lo supiéramos hasta que echamos un vistazo”.

Harry miró a su alrededor, impresionado por lo que tenía delante. Esto era mucho más impresionante que cualquier lugar en el que hubiera estado en la Tierra y luego había una cualidad en él y era que era el hogar, el hogar era donde estaba el corazón. Se preguntó si finalmente había encontrado un lugar al que pertenecía.

"¿Cómo se destruyó Krypton de todos modos?" Harry le preguntó, quería saber esto porque, afrontémoslo, los planetas no explotan sin más. Al menos no explotaron sin una buena razón, y sus ojos estaban fijos en Kara esperando la respuesta.

"El núcleo de este planeta, bueno, vio días mejores, pero habría aguantado quizás quince o veinte años más, a menos que... bueno, mi padre decidiera encargarse de escalar la destrucción del planeta. Él no era de los que esperaban". alrededor y sea paciente para cualquier cosa. Pensó que cumpliría una profecía, la Profecía de Rao. Es una larga historia, se trata de dos kryptonianos que repoblarían un planeta y lo convertirían en un Nuevo Krypton ".