Ave Dorada ||Sosvieshu x Heinry

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|Henry|

mi hermano me va a matar.

Observé al emperador que estaba muy entretenido tratando de peinar mis plumas.

Desde que fui puesto en sus brazos no me dejando solo

-Debería decirle a un sirviente qué te traiga gusanos, las aves como tú comen eso -Comento

-No- quise decir pero solo salió el típico ruido de un ave.

-Si debe ser-Veo como llama a un sirviente por los gusanos, trate de salir de sus brazos pero fue imposible.

un toque en la puerta sono y una mujer de pelo blanco entró.

-Rastha vino a ver al emperador, Rastha se pregunta cómo está

Entonces está es la famosa amante.

La mirada de Rastha se posa curiosa sobre mi.

-Va hacer ave a la plancha?- Pregunto, el horror llegó a mi y trate de huir

-Calmate, cálmate, nadie te va a cocinar-trato de tranquilizar -Rastha está Ave es un regalo

-Oh para Rastha

-No! Es mía- exclamó el emperador posesivamente tratando de nuevo de peinar mis plumas

hermano perdóname.

Tenías razón

Las manos del emperador tenían tacto suave sobre mi , mire su rostro y sus ojos grises me miraron con tranquilidad.

-Oh Entonces Rastha piensa que le regalaron algo bonito -Rastha comento

-Si, es buen regalo- comentó con una sonrisa.

-Los gusanos ya están aquí emperador-una sirvienta entro con ellos.

-Que no como gusanos- grite pero solo sonaron sonidos de ave.

-... que raro actúas- dice sosvieshu mirándome extrañando -Tal vez los gusanos no sean Tu gusto, tal vez una fruta.

Eso está mejor

Sosvieshu estira su mano y agarra una fresa y me la ofrece.

Porque este hombre estaba tan feliz conmigo.

Tanto quería una mascota

-Deberia ponete un nombre extravagante -Comento viendome comer la fresa.

Rastha se había retirado como un fantasma tal vez ya aburrida

-... que tal...Sergio Lorenzo o Héctor Saúl... mejor José Javier.

De dónde saca esos nombre para mascotas.

Agite mi ala y el río.

Esto será largo.

|Rastha|

Me encontraba caminando por el jardín, aburrida, no pasaba nada interesante

Esa ave se puede decir que algo nuevo

Suelto un suspiro de aburrimiento

-Asi que tú eres la amante del emperador-el hombre de aspecto loco me dice, lo miro se parecía una versión masculina de la emperatriz

Lo mire con desconfianza, pero una parte de mi estaba emocionada por el nuevo acontecimiento

-Si, tienes un problema con eso- comenté -Porque Rastha no tiene problemas en pelear