Papá Toru//One shots

Lluvia

Desde que Satoru tenía memorias con su pupilo, Megumi jamás se había roto de la manera en que lo estaba haciendo ahora. Y si era sincero, nada lo había preparado para el dolor que se instaló en su propio corazón al ver las lágrimas cayendo de esa mirada que había dejado de ser indiferente.

Su Megumi, su pequeño bebé ya no tan pequeño estaba hecho pedazos por saber a su hermana inmóvil en una cama de hospital con un diagnóstico bastante deprimente.

Tsumiki había sido maldecida. Y Gojo realmente quería acercarse a su querido niño y poder decirle que todo estaría bien, que se resolvería, pero realmente no estaba pensando.

Satoru estaba inmóvil frente a su hijo mientras este parecía rogarle por algo con la mirada. Y Gojo sabía que no podía dárselo. Gojo no podía prometer que salvaría a Tsumiki, tanto poder en sus manos no servía de nada justo ahora.

Así que, hizo lo único que su cuerpo pareció creer correcto. Abrazó al chico y simplemente lo sostuvo mientras parecía que se deshacía en sus brazos. Megumi tratando de no sollozar y apretando la tela de su ropa en fuertes puños... No, definitivamente no estaba listo para esta situación.

Satoru acabó en el suelo acurrucando al adolescente en sus brazos. Megumi escondió su rostro cerca de su cuello y simplemente se siguió aferrando a él como un pequeño niño.

Megumi, su pequeño Megumi, su chico independiente que jamás había pedido nada de él, que siempre despreció su hábito de no respetar su espacio personal, y que siempre mostraba un ceño fruncido cada vez que chillaba su nombre. Ese mismo chico estaba en sus brazos ahora, y... Nada. De verdad que Satoru se había quedado sin palabras por primera vez.

Era cierto que nada lo había preparado para enfrentar una situación así. Él no sabía cómo consolar a una persona. Era un idiota. Megumi no podía simplemente estar bien si un idiota como él estaba a cargo de dicho adolescente. Satoru no podía ser indiferente al dolor de su hijo, pero era muy consciente de su propia incompetencia para buscar la forma de hacerlo sentir mejor.

Si era sincero, jamás había sentido tanto el dolor ajeno como si quemara bajo su propia piel. Era lacerante. Atípico. Y pronto sus propias lágrimas se deslizaron por sus mejillas.

-Todo estará bien, cariño. -musitó Satoru mientras acariciaba suavemente la espalda del menor.

En cualquier otro momento, Megumi se habría avergonzado de un apodo como ese, pero actualmente ese era el menor de sus problemas.

Gojo y su hermana habían sido la única constante en su vida. Fue lo único que lo mantuvo de pie y funcionando. Y ahora, una de esas partes vitales ya no estaba con él. Megumi deseaba desaparecer, que su propia sombra se lo tragara y lo desapareciera de la faz de la tierra.

Fue entonces que Satoru fue consciente del cambio en el ambiente y de la oscilación en las sombras que los rodeaban, prueba del profundo dolor por el que su bebé estaba pasando. Así que lo apretó más contra su pecho, respiró sobre su alborotado cabello negro y luego le besó la sien varias veces, susurrando que estaba bien, que estaría bien.

Megumi soltó un pesado suspiro y luego se estremeció. Las sombras volvieron a su estado natural de manera gradual.

Minutos más tarde Gojo se dio cuenta de que Megumi se había dormido totalmente en sus brazos. No tuvo corazón para separarlo. A pesar de la inconsciencia, el menor aún se aferraba dolorosamente a él, como si temiera que él también desapareciera.

A la mañana siguiente, Megumi tampoco fue invadido por la vergüenza al haber amanecido sobre el pecho de su sensei. Contrario a lo que haría en cualquier otra situación, solo se acomodó mejor y recargó su mejilla contra el pecho del mayor, dejando que su oído escuchara el rítmico latir del corazón de Gojo.

Los brazos del albino se apretaron en su espalda como si quisiera transmitir que estaban allí.

El abrazo era cálido, pero algo se sentía mal. Tsumiki no estaba con ellos.

-¿Por qué? -preguntó Megumi de manera suave y distraída, casi como si estuviera hablando consigo mismo-. ¿Por qué ella que no puede... Podía ver maldiciones?

Gojo solo acarició la espalda del chico en respuesta.

-Ella no merece esto. Siempre... Creí que sería yo quien se iría primero.

Las manos de Satoru se detuvieron repentinamente ante esa declaración, pero segundos después volvieron a lo que hacían.

-Debes luchar por ambos ahora-dijo el mayor en un susurro-. Ella haría lo mismo por ti.

El silencio permaneció por varios minutos antes de que Megumi solo murmurara un bajo "lo sé," para posteriormente restregar su rostro contra el cuello de su papá.

Megumi jamás había llamado a Satoru papá, pero esperaba que fuera consciente de lo mucho que significaba para él. Megumi no era precisamente bueno con las palabras, y no sabía cómo externar sus emociones. Solo deseaba que en este momento, Satoru supiera que lo amaba y que era lo único que le quedaba.

***
Hola 😵
He aquí el primer fic de este apartado. Cómo dije antes, solo conozco el ánime, y pues... No tengo idea T.T nunca había escrito sobre personajes de otro fandom que no fuera Marvel, pero espero que esto esté mínimamente decente y les haya gustado.

Pd: el OS se llama lluvia haciendo referencia a las lágrimas y el estado de ánimo de Megumi y Satoru.

Eso es todo

Saluditos! 🎉