Sino fuera por su Voz

C2 - "Veritas Semper Vincit"

   Es de mi agrado informar que hoy es el gran día. ¿Qué día? Espera, déjame terminar.

   Hoy, es el día que inician mis largas vacaciones.

   Te preguntarás el porqué me he saltado 7 días de mis propios pensamientos, y la razón es muy sencilla.

   7 días de mi monólogo interno son aburridos, o al menos lo son para mí.

   Si quieres, te haré un resumen y así no tendrás quejas.

   Primero, ¿Qué sucedió con el borrador? Después de bañarme, fui a mi cama y lo encontré debajo de mis sábanas. Genial, ¿no? Solventado el problema de no encontrar mi borrador (temporalmente), pero no dibujé ese día, simplemente me fui a dormir porque debía irme a trabajar temprano.

   Segundo, en la semana que pasó sólo hubo trabajo, trabajo y más trabajo. Sí, me pasé yendo a trabajar toda la semana. No, no soy de salir a fiestas, es más, no soy del chico que hace amigos.

   Tercero, el resto del tiempo me la pasé escuchando canciones y viendo series o películas en casa.

   Ya, una semana aburrida, cosa que es normal en la vida de un chico "aburrido".

   Aunque hubo algo que me llamó la atención en una ocasión que entré a internet. Solamente era una frase pero me gustó bastante… Veritas Semper Vincit, lo que en español sería «La verdad siempre vencerá».

   Supongo que no hace falta explicar nada, la frase habla por si misma.

   Bien, sigamos en el presente. ¿Qué día es hoy? Hoy es 13 de agosto, día en el que me encontraré con una persona sospechosa, que piensa llevarme a un lugar que no conozco, para hacer algo que lamentablemente desconozco. ¿Dejo una carta indicando lo que haré hoy en caso de que me pase algo?

"Y funcionará tan bien que si tengo suerte, se darán cuenta que desaparecí unas semanas después."

    Tres horas, y debería estar en el "lugar designado" para encontrarnos. ¿Sólo soy yo, o ustedes creen que pasará algo malo si voy? Y si me quedo ¿No conseguiría que me despidieran del trabajo? Okey, esa idea es peor de lo que creí, porque de ser así "Organizador" tiene la libertad de hacer que me despidan.

–Yaaaaa… –me froto la sien molesto por sobrepensar tanto. Tengo esa mala costumbre y ya debería haberla dejado hace mucho–. Que sea lo que tenga que ser.

   Tomo mi teléfono y me detengo en la puerta mirando hacia atrás.

–Espero volver pronto, ojalá y todo siga acá cuando vuelva –"Si es que lo hago".

   Salgo de casa y me voy en el transporte dirigiéndome al lugar donde encontraré una verdad.

   Créeme, sólo hay una verdad, lo peor es que no sé cuál sea.

   Estoy aquí. Faltan 5 minutos, espero de todo corazón que nadie venga a buscarme, así tengo la coartada perfecta para decir «estuve en el lugar designado a la hora indicada, ustedes fueron irresponsables y yo tenía cosas más importantes que atender».

   Sonó mejor de lo que creía…

– Hey, ¿Eres Daryl Jacobs? –"esa voz, aún faltan 2 minutos, sólo debías retrasarte, no aparecer antes de la hora…"

   Aparentando estar en calma, encaro a la chica que me habló y mi sorpresa fue enorme.

   Sólo le veo la parte superior del rostro porque lleva puesta una mascarilla, pero a simple vista se puede saber que es considerada una belleza.

– Sí, soy Daryl. ¿Tu eres…?

– Puedes llamarme Misty. Acompáñame.

    No hay vuelta atrás.

    La seguí siendo cauteloso con ella, pero lo cierto es que me dejaron fuera de base al ser una chica quien se presentara.

"Esperaba encontrarme con alguien mucho más aterrador. No sé, un hombre musculoso con cicatrices en la cara."

   Jamás de los jamases, se me pasó pensar que me atraerían de esa forma.

"Empiezo a odiar esto de no tener un factor sorpresa a mi favor. Ellos si pueden sorprenderme y descolocarme, pero yo no he sido capaz ni de reaccionar."

    Será que soy muy simple y por ese motivo sabían cómo engatusarme.

– Sube al auto, iremos al campamento luego de comprar algunas cosas.

   No puede ser, esto si ha de ser una simple coincidencia (o tal vez no…).

   Uno de mis autos favoritos desde siempre ha sido el Mustang GT, y precisamente en ese modelo de auto me van a llevar…

    La voz de la chica sonaba un poquito exasperada cuando me regresó a la realidad.

– ¿Subirás o prefieres quedarte observando el auto…?

   Como dicen, mejor no tentar a la suerte y entrar al auto ya.

   Nos quedamos en silencio y aunque no era cómodo, tampoco era incómodo.

   Después de unos 15 minutos conduciendo (creo que iba bastante rápido, no me fijé por ir absorto en mis pensamientos) llegamos a lo que creo es una tienda de ropa.

– Sí, es lo que piensas, compraremos la vestimenta que usarás.

   ¿Y ya? dejó la frase así sin más y se fue caminando hacia dentro, no me queda de otra que seguirla.

– Primero hay que elegir el diseño de tu máscara, elige el que más te guste.

– Oh my God… ¿Cuántas máscaras hay aquí? –no recibí respuesta, y empecé a buscar. Habían diseños bastante interesantes. Por ejemplo una con figuras de dragones talladas en su superficie.

   Voy probando los diseños y me han gustado varios, pero sólo debo elegir una.

– Lo quiero –mi vista se quedó clavada en una máscara con un diseño retro.

   Claramente tiene dibujos con forma de espinas y lo que parecen ser algunas ramas entrelazadas.

   Aunque el diseño podría ser mejor, es perfecto.

   También está el detalle de que las máscaras son bastante cómodas. Es de suponer que lo serían, o no podríamos estar más de 2 días con algo que moleste.

– Definitivamente me llevaré esta.

   Si llegamos a exponernos al sol, no se nos quemará la piel, aunque hay posibilidades de que la máscara nos pueda hacer sofocar, mejor no arriesgarse a morir tan joven.

"¿Por qué hay gente que le teme a los 18 años? Yo pasé por allí y me dió igual. Claramente hay más responsabilidades, pero tengo dinero propio y con eso puedo comprar mis propias cosas."

   Elegí la ropa lo más rápido que pude, y cuando salimos ya no estaba el Mustang. Triste por mí. No tuve mucho tiempo para contemplarlo.

   Entre la ropa que elegí, aunque rápido, mi elección fue en su mayoría suéteres manga larga y pantalones deportivos.

   La chica me guió hasta un todoterreno que estaba aparcado allí cuando llegamos y al subir las personas de dentro del auto también portaban máscaras.

"¿Qué más se podía esperar? Se supone que no debería conocer el rostro de nadie. Aunque las que ellos llevan parecen parte de un uniforme, así que seguramente sean simples trabajadores."

   Creo que ya debería dejar de preocuparme, si me fuesen a hacer algo, a estas alturas ya lo habrían hecho.

– Chico, ¿trajiste tu teléfono, no? –mi respuesta fue asentir.

   Hora de despedirse de mi teléfono. Tampoco es que lo use mucho.

   Sabiendo que debía entregarlo se lo pasé apagado, a fin de cuentas no lo van a usar.