Mimada en la casa de mi abuelo

206 al 210

"Segundo hermano, ¿qué estás haciendo aquí?"

Qiao Jing no dijo nada y solo le entregó la caja a Qiao Yue, indicándole que la abriera.

Qiao Yue abrió la caja y vio un collar con forma de engranaje dentro.

"¿No fueron los fuegos artificiales de ahora un regalo?"

"Porque has mejorado tanto, te doy dos regalos". La cara de Qiao Jing todavía estaba fría, como si él no fuera la persona que sonrió durante los fuegos artificiales hace un momento.

"Gracias." Qiao Yue sacó el collar de la caja.

El collar se sentía un poco más pesado de lo que parecía. Estudió el colgante y parecía que tenía un pequeño gancho. Cuando presionó el pestillo, salió una daga pequeña y delicada.

"¿Por qué el segundo hermano me dio un arma encubierta?" Qiao Yue había visto muchas armas, pero una tan exquisita era rara.

Jugueteó con el collar y miró a Qiao Jing con una media sonrisa.

"No te pongas más en peligro". Qiao Jing la miró a los ojos y, por alguna razón, imágenes de ella siendo drogada por Bo Ning aparecieron en su mente.

Los dos estaban muy cerca, sus respiraciones entrelazadas. Qiao Yue de repente se sonrojó.

"Buenas noches, segundo hermano".

Qiao Yue empujó a Qiao Jing por la puerta y se apoyó contra la puerta cerrada, con el corazón acelerado.

No se había desmayado por completo esa noche. Todavía recordaba algunas cosas. Recordó estar en los brazos de Qiao Jing, y los dos parecían haberse besado.

Al pensar en esto, su rostro se puso aún más rojo.

Qiao Jing realmente no creía que su "hermano menor" estuviera loco por él, ¿verdad?

Qiao Yue se molestó un poco al pensar en el incidente. La trampa de Bo Ning era tan poco sofisticada, pero ella fue demasiado descuidada y cayó en ella.

Debería haber estado más atenta.

Durante su tiempo en la residencia de Qiao, se había relajado mucho, probablemente porque estaba con su familia. No estaba tan atenta como antes. Ella debe ser más cuidadosa en el futuro.

Qiao Jing no se enojó después de ser empujado por la puerta. En cambio, se paró afuera de la habitación de Qiao Yue y se echó a reír.

Qiao Ren estaba en lo alto de las escaleras. Miró el rostro de su hijo y dejó escapar un suspiro casi inaudible.

Realmente lo parecía, pero muy mal...

Qiao Jing estaba a punto de irse cuando vio a su padre parado en lo alto de las escaleras, mirándolo con una mirada sin precedentes.

"Papá." Qiao Jing asintió con la cabeza a Qiao Ren. "A Qiao Yue le fue bien en sus exámenes esta vez. Estaba aquí para darle un regalo.

Qiao Ren asintió. Es lo correcto. Es tu hermano, así que deberías darle un regalo. Arreglaste los fuegos artificiales esta noche, ¿verdad?

Qiao Jing frunció el ceño. No se lo había contado a nadie y lo había arreglado todo él mismo. "¿Cómo lo supo papá?"

Qiao Ren respondió: "Solo estaba suponiendo. Acostarse. No dejes que te detenga.

Con eso, Qiao Ren se fue, dejando a Qiao Jing allí, sintiéndose algo desconcertado.

Su padre había estado actuando extraño últimamente. Se quedaba en casa todo el tiempo y nunca salía.