Bᵉᵗᵃ ☘️; DekuTodo

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A la deriva de un cielo obscuro...

Un pequeño beta de cabellos desiguales observa con anhelo la gran y reluciente luna que posa orgullosa en la punta del cielo, cientos de pensamientos rondan por su pequeña cabecita en aquel momento, pensamientos maliciosos nublados de espinas que se encargan de astillar su corazoncito.

El tiempo ha pasado y se siente demaciado triste.

La puerta se abre, dando paso a un alfa cansado que con pesadez deshace su corbata y deja su saco en el perchero. La habitación está silenciosa, más sin embargo no le extraña, a esas horas su pequeño beta lo espera abrazado de dulces ronquidos que a su parecer, son adorables.

Desabrochó su camisa y entró a la habitación que comparte con Sho, grande fue su sorpresa al encontrarlo en al balcón, usando únicamente lo que parece ser su camisa de trabajo, con cuidado se acercó a el abrazando su pequeño cuerpo que se encontraba helado por el viento nocturno.

Dejó un corto y dulce beso en la coronilla de su cabeza.

- ya llegué, amor. ¿Qué haces despierto?

Sintió su cuerpo estremecer en el momento, nuevamente aquellos invasores pensamientos llegaron a Todoroki, lágrimas brillaban por sus ojos y su nariz estaba roja, aparentemente no sólo por el frío.

El silencio parecía querer matarlos a ambos, ninguna palabra salió, simplemente pequeños hipidos acompañado de lágrimas que finalmente habían comenzado su recorrido por las niveas mejillas del beta, por alguna razón el tiempo va más lento de lo habitual.

- No llores, ¿si?, dime que es lo que sucede, amor - Izuku con cuidado agarró las mejillas contrarias acunándolas entre sus grandes dedos - ¿algo te molestó?, vamos Sho, dime que sucede pero por favor no llores, me estas preocupando. -

'Que frustrante y doloroso'

- pero incluso si te dijera como me siento... eso no arreglaría nada - dijo finalmente ocultando su rostro entre el cálido pecho de su pareja, el calor de sus brazos rodeándolo por completo le brindó la seguridad y confianza que tanto necesitaba.

Se aferró a su cuerpo y inhaló su perfume. Al instante los recuerdos de Midoriya yendo hacia el, con aquel olor leve a vainilla en su tercera cita llegaron a su mente, calentando su corazón, puesto que el alfa estuvo por 2 días buscando algún perfume que se asemejara lo más posible a sus feromonas solo para que el pudiera saber a que olía.

Esos detalles que Izu le regalaba, lo hacían sentirse especial entre todos, sentirse amado e importante para alguien, pero de igual forma lograban deprimirlo cada vez más, no es que el haga algo malo, nada de eso, simplemente son sus inseguridades que buscan atormentar su día a día, inseguridades que ya se acostumbró a guardar en lo más profundo de su ser.

- dime, Izu, ¿No prefieres andar con un... omega?

Esa pregunta heló completamente al peliverde, ¿A que venía?, apretó instintivamente el cuerpo que estaba entre sus brazos cuando lágrimas empezaron a brotar nuevamente del beta, temía que se fuera en algún momento.

- ¿A-A que viene esa pregunta? - Habla con sinceridad - Se más especifico, Sho.

Tomó las manos del beta entre las suyas, entrelazando sus dedos y Todoroki no pudo resistirse a ver esos grandes ojos verdes que tanto le gustan, esos en los que es capaz de perderse una eternidad si es posible, relamió sus labios antes de seguir.

- ¿Por qué me me elegiste? Esa duda ha estado comiendo mis pensamientos desde hace 2 años - soltó finalmente, las piernas le fallaron por un instante y agradeció que el alfa lo estuviera sosteniendo, de no ser por ello, ya estuviera en el piso. - Sabes... No puedo tener la familia que tanto deseas, ni mucho menos llevar tu marca adornando mi nuca, no puedo saber si estas enojado, feliz, triste, por que no puedo olerte, es... patético -