Un Fantasma en los Mares

Capítulo 4 : Un fantasma es un ninja

Resumen:

entran los piratas del sombrero de paja

"¡Woo-hoo! ¡Hora de celebrar!"

"¡Muy bien! ¡Ahora es uno de nosotros! ¡Aquí está Fire-Fist Ace!"

"¡Salud!"

Luffy, Chopper y Ussop chocaron las jarras de madera y se bebieron la bebida.

"Espera", Ace los miró con incredulidad, una jarra en la mano mientras se inclinaba sobre un barril, "¿Quién dijo que me uniría a su tripulación?"

Lo ignoraron por completo y compartió una mirada dudosa con Shiro. Se sentó contra el barril en la cubierta de madera, con una jarra intacta descansando entre sus piernas cruzadas.

"Y a las bebidas deliciosas, ¿eh?" propuso Ussop.

"¡Salud!" Lloraron y golpearon las jarras nuevamente antes de beber.

"Oh, no te preocupes", lo tranquilizó Nami con una sonrisa con los ojos cerrados, "no puedes tomar nada de lo que digan en serio cuando están así. Se vuelven tontos cuando beben".

Lanzó una mirada de incredulidad al trío que continuaba levantando sus jarras y vitoreando. No esperaba que Luffy fuera así cuando se emborrachaba, tal vez un poco, pero no así de cabeza hueca.

Dos manos delgadas sostenían una jarra y se encontró con los grandes ojos de Shiro mirándolo. "Puedes tener el mío, el alcohol no me hace nada".

Realmente debería saber que no debe desafiar a un pirata a un concurso de bebidas.

Él le sonrió. "Eso suena como un desafio."

Sus cejas se fruncieron hacia él. "El Maestro Sasori se aseguró de que los venenos y las toxinas no funcionaran". Ella balanceó hábilmente la jarra sobre la de él, extrañando la forma en que él se atragantó con la cerveza que bajaba por su garganta. "En cualquier caso, la regla número 8 establece que debemos abstenernos de sexo, alcohol y dinero".

Tosió y se golpeó el pecho con el puño mientras miraba a la chica ajena con los ojos muy abiertos. Ella lo había dicho tan rotundamente, y para él, un pirata, negando las tres cosas que un pirata navega en busca de una aventura.

"¡As!" Luffy gritó: "¿Estás seguro de que no quieres unirte a nosotros? Será divertido, lo prometo".

"No puedo en este momento, estoy persiguiendo a alguien". Tomó un gran trago refrescante, alejándose de la extrañeza de Shiro. "Es un pirata llamado Barbanegra".

"¿Barbanegra?" Ussop repitió.

"Hemos oído hablar de él", jadeó Vivi. "Él es el que atacó el Reino Drum".

Suspiró y se acomodó en la cubierta junto a la chica de pelo blanco. "Verás, Barbanegra solía pertenecer a la Segunda División de los Piratas de Barbablanca... Era uno de mis propios hombres, pero cometió el pecado más imperdonable que un pirata podría... Mató a uno de sus compañeros de tripulación y luego abandonó el barco... Como comandante de la Segunda División, es mi responsabilidad cuidarlo".

"Así que es por eso que lo persigues", discernió Ussop.

Continuó, lanzando una mirada a la chica a su lado, encontrando sus grandes ojos de cierva ya mirándolo fijamente, escuchando sus palabras con devota atención cuando escuchó sobre Barbanegra por primera vez, "Vinimos aquí porque escuchamos que Barbanegra fue visto en Arabasta en un lugar llamado Yuba", miró de nuevo a los piratas de Sombrero de Paja, "así que ahí es donde nos dirigimos".

"Oye..." Nami dijo arrastrando las palabras, mirando hacia Vivi, "Ese es nuestro destino también".

"Sí", asintió la princesa. "Acabamos de entrar al río Sandora, lo llevaremos a Eramelu donde atracamos, y luego seguiremos a pie hasta llegar a Yuba. El líder del ejército rebelde está allí. Hacia allá vamos".