Un Fantasma en los Mares

Capítulo 3: El mundo de un fantasma cambia

Habían pasado diez días desde que abandonaron Drum Kingdom, y como le prometió a Luffy (aunque solo fue en un mensaje), estaba en Nanohana. Con su bolso colgado del hombro y su sombrero tapando el sol, deambulaba por las calles preguntando a extraños si habían visto al niño en el cartel de buscado. Shiro deambuló a su lado, sus ojos se desviaron mientras observaba a los ciudadanos hacer su día. Había curiosidad rebosante en ellos. Era como si estuviera viendo algo familiar pero completamente nuevo.

Nanohana era una colorida ciudad portuaria. Sus calles estaban abarrotadas, llenas de gente, su bazar rebosante de vendedores y el aire caliente cargado con el aroma del perfume. Era un laberinto de arquitectura en forma de bloque con cúpulas rematadas, de cualquier manera que miraras, encontrarías algo sorprendente mirando hacia atrás.

Ace estaba más divertido por la forma extraña en que Shiro caminaba. Ella lo siguió un paso detrás de él, la atención nunca permaneciendo en el lugar por más de un segundo, los dedos de los pies soportando su peso mientras se enterraban bajo pequeños montículos de arena. Después de Drum Kingdom, decidió no volver a comentar sobre las elecciones de ropa de Shiro. Estaba seguro de que era una regla que Makino le había dicho una vez, pero era un detalle tan pequeño e intrascendente entre todas las reglas de cortesía y urbanidad que no podía precisarlo en sus recuerdos.

Shiro continuó andando de puntillas detrás de él con un salto en su paso, su túnica blanca moviéndose alrededor de sus ramas de sauce, y solo tenía que saber por qué cambió su modo de andar. "¿Por qué caminas así?"

Había estado esperando una respuesta en blanco, tal vez una afirmación sobre cómo era más efectivo caminar de puntillas en la arena con su energía misteriosa, o simplemente que estaba entusiasmada con la ciudad. Lo que obtuvo hizo que sus cejas saltaran y una carcajada saliera de él.

Ella se sonrojó. El enrojecimiento latía desde la punta de sus orejas sobre ella hasta sus mejillas mientras deliberadamente miraba hacia otro lado. "Es fácil mantener mi cuerpo caliente en el frío, pero este lugar es caluroso". Su voz se volvió mansa. "La arena me está quemando los pies".

Continuó riéndose mientras le daba la espalda y doblaba las rodillas. Miró por encima del hombro, "Súbete, tenemos que encontrarte unos zapatos antes de que derritas tus pies".

Ella negó con la cabeza mientras retrocedía unos pasos. "No, está bien. Estaré bien".

"No me voy a mover hasta que te subas".

"Ace, ya gastaste dinero en mí en Drum Kingdom".

Decidió no recordarle que le robaron mucho Berri a los piratas a los que golpeó. Era más dinero de lo que quería admitir, incluso después de que dejaran la mayoría del botín a la gente del pueblo.

"Shiro", pronunció con firmeza, con un brillo autoritario en sus ojos plateados, "somos un equipo, así que adelante " .

Ella vaciló. Su peso se movió de una cadera a la otra cuando cedió a sus palabras. Shiro era ligero sobre su espalda cuando abandonaron la búsqueda de Luffy y deambularon por el bazar en busca de un zapatero.

"¿Cuál es tu problema con los zapatos de todos modos?"

Podía recordar claramente su risa de camino a la isla de invierno en el momento en que le sugirió que se pusiera sus botas. Su risa era alegre y alegre. Solo podía desear que ella fuera siempre así, poder recordar tiempos preciados y reír, limpiando su alma de la oscuridad que se demoraba sobre ella como una tormenta.

Los brazos alrededor de su cuello se tensaron por un momento. "El Maestro Obito nunca me dio zapatos. En la Hoja, esa es la aldea en la Tierra del Fuego, Lord Third me puso bajo la supervisión de Kakashi-sensei. Nunca tuvo ningún problema con eso, pero un día nuestro equipo fue enviado a una misión. para escoltar a un equipo de filmación en su camino a filmar en la Tierra de las Nieves. Solía ​​cubrir todo mi cuerpo con muchas vendas, el Maestro Obito y el Líder Pain nunca tuvieron problemas con eso, pero Kakashi-sensei insistió en usar zapatos. Sakura También fue muy mala al respecto, ahora que lo pienso. Dijo que siempre me veía como una momia y medio muerta.