Capítulo 25

358 22 1
                                    

Hola chicos! Muchas gracias por su respuesta al capítulo pasado... varios mencionaron que les agradó que Bella se defendiera sola en vez de esperar por el rescate de alguien más. Los que han leído mis historias saben que en general así es como lo prefiero... Girl Power!

Sin más los dejo con el reencuentro de Bella y su Osito, espero que les guste.

Cariños.

%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%

-Emm! Osito! Estoy viva! –Exclamó la voz de mi Bella... un poco más musical, pero definitivamente la voz de mi Bella.
-Bella! –Exclamé y rompí a llorar.


Capítulo 25

Estoy tan cansada como tú,

pienso en no sentir, desaparecer.

Soy yo y no lo quiero ver.

Soy yo yéndome otra vez,

soy yo, lo hago sin querer,

lo hago sin querer.

Lo siento.

Lo siento.

Lo siento.

Lo siento/Christina Rosenvinge


Emmett POV
-Emm! –Sollozó la voz de Bella en el teléfono.
-Creí... creí que te había perdido para siempre! –Exclamé tratando de controlar mis emociones –Bells, Osita... dónde estás? Estás bien?
-Estoy en Black Canyon City, cerca de Phoenix... estoy en una casa de un humano que salió a trabajar... pero me tengo que ir al bosque... su esencia... la sangre... el aroma es irresistible –Me explicó erráticamente, probablemente por la sed.
-Lo sé osita –Dije poniéndome una chaqueta y tomando las llaves del jeep, mi billetera y mi chequera. Jasper y Alice me esperaban junto al vehículo para acompañarme –Ahora dime... cómo te sientes? Te hizo daño? –Gruñí.
-Bueno... James me convirtió... -Dijo Bella calladamente –Del resto prefiero hablar en persona... -Me dijo.
-Bells, esta noche vas a estar en mis brazos –Le prometí y aceleré a fondo.
-Vas a venir por mí? –Preguntó ella como si no pudiera creerlo.
-Por supuesto que voy por ti, ahora mismo estoy yendo por ti Bella! –Gruñí. De dónde venía esa inseguridad?
-Gracias...! te voy a esperar en la entrada norte del pueblo... en el bosque –Dijo ella suavemente –Ahora me voy a ir de esta casa... su dueño puede regresar.
-Te amo Bells, nos vemos en unas horas –Le dije.
-Te amo Osito... no lo olvides nunca –Se despidió.

...oOo...

Al llegar a Seattle arrendamos un jet privado que nos llevara a Phoenix. El vuelo fue relativamente corto, pero ni las oleadas de calma que me enviaba Jasper podían con mi frustración de no poder ir más rápido, de llegar a mi Bella instantáneamente.
-Alice, cómo es que no la puedes ver? –Le pregunté a mi hermana por enésima vez.
-No lo sé Emm, es como si Bella no existiera. Ni siquiera puedo ver tu futuro con ella, ni tu reencuentro... Debe ser una cualidad de ella como vampiro, el poder evitar mi don... me pregunto si también repelerá el don de Jasper... -Y así comenzó un debate entre ellos sobre lo inusitado del caso de Bella.
Yo miré por la ventanilla y, moviendo la pierna nerviosamente, me concentré en la felicidad que me embargaba al saber que en sólo unas horas estaríamos juntos.
Ya falta poco... ya falta poco...

...oOo...

En Phoenix debimos arrendar un auto, y el maldito trámite nos tomó cuarenta putos minutos.
Cuando finalmente salimos del aeropuerto ya estaba oscureciendo. Decidimos que Jasper manejaría para que Bella y yo nos pudiéramos volver en el asiento trasero. Jazz aceleró rumbo al norte y en media hora nos encontrábamos entrando a Black Canyon City.
Atravesamos el pueblo a velocidad normal y yo ya me estaba comenzando a desesperar de nuevo.
Quince minutos después encontramos el letrero de la salida norte.
Nos estacionamos y yo comencé a buscar con la mirada en el bosque. Nos bajamos del auto y pude oler la dulce esencia de Bella, pero más concentrada... vampirizada.
-Bella? –Llamó Alice con incertidumbre. Jasper simplemente olisqueó el aire.
-Bella! –Grité yo. Nada de sutilezas conmigo.
De pronto sentimos el movimiento de hojas a nuestra derecha, y todos nos giramos de inmediato para ver aparecer a una muy tímida Bella que casi no se atrevía a acercarse a nosotros.
Estaba cubierta de sangre animal y pelos y hojas del bosque, su cabello se veía desordenado y salvaje... y nunca se vio más hermosa en su vida.
-Emm... -Susurró ella, y fue suficiente aliciente para mí. Corrí a abrazarla con fuerza, besando su rostro con devoción. Ella se aferró a mí y saltó para que sus piernas estuvieran rodeando mi cintura. Su cuerpo había cambiado un poco con la transformación. Había rellenado un poco más sus curvas y estilizado aún más los rasgos de su rostro, excepto por su boca, que estaba un poco más llena... más besable.
Mi boca recorrió su boca succionando, mordisqueando, y ella inmediatamente me concedió entrada, masajeando su lengua con la mía, volviéndome loco de felicidad. Por fin la tenía a mi lado! Por fin era mía para siempre! Nunca más una frágil creatura... Una nueva y renovada Bella, fuerte y eterna.
Y no dejamos de besarnos hasta que Alice y Jasper nos interrumpieron.
-Ejem... -Carraspeó innecesariamente Alice –Deberíamos salir de la carretera... es sospechoso.
-Vamos al auto –Le dije a Bella dirigiéndonos al vehículo. Pero Bella inmediatamente se soltó de mi abrazo y mirando el suelo me dijo
-Primero tenemos que hablar...
-Podemos hablar de todo lo que quieras en casa! –Le dije amorosamente besándola en la coronilla.
-No Emm, tiene que ser ahora –Dijo tirando de mi mano para internarnos en el bosque. Yo crucé miradas con Alice, pero ella se encogió de hombros sin saber de qué se trataba el asunto.
Sin tener otra alternativa, la seguí un par de kilómetros bosque adentro hasta que ella se detuvo.
-Qué es Bells? –Le pregunté suavemente al ver su cara angustiada.
-Emm... me podrás perdonar? –Me dijo con la voz más triste del mundo –Porque si no me perdonas, no voy a ninguna parte!
-Qué tengo que perdonarte? Fui yo el que te dejó sola en el momento de mayor peligro... no sé exactamente cómo lo hizo James para atraerte a la academia de ballet, pero sé que no fuiste por gusto... -Le dije tratando de serenarla.
-Emm... James... no me quería como su cena, me quería como su pareja –Me dijo y yo la interrumpí con un gruñido de rabia e impotencia. El hijo de puta se aprovechó de mi Bells? –Él me convirtió para sí, y me obligó a besarlo... me tocó... -Me dijo avergonzada.
-Donde está ese hijo de puta que lo voy a matar! –Rugí temblando de ira. Bella me miró con miedo y me dijo
-Yo... lo maté cuando él intentaba violarme –Reconoció con el rostro lleno de pena y arrepentimiento.
-Bells... ven acá –Le dije abriéndole mis brazos aliviado de que James no hubiera alcanzado a violar a mi Bella –Me alegro que hayas matado a ese hijo de perra, aunque me hubiera gustado haberlo hecho yo mismo –Ella vaciló y dio un paso hacia atrás.
-Hay más... -Me confesó –Yo... maté a dos personas que James tenía secuestradas para mí. James le rasgó la garganta a uno de ellos frente a mí y no me pude contener Emm... me lancé sobre ellos y los drené... soy una asesina –Dijo y rompió a llorar.
-Bells... -Le dije acariciando su largo cabello –Todos hemos cometido errores, todos hemos tenido deslices... yo también! Pero si quieres seguir la dieta vegetariana con nosotros, te vamos a ayudar a controlarte cerca de los humanos.
-Pero Emm...! Pensé que me ibas a odiar cuando supieras todo esto... -Dijo confundida.
-Bella tú eres mi alma gemela –Le dije –No hay nada que perdonar entre nosotros. Te amo y te voy a amar siempre. Simplemente estoy agradecido de tenerte nuevamente a mi lado.
-Te amo Osito... -Susurró ella abrazándome con fuerza –Vamos a casa.

El Crepúsculo de EmmettDonde viven las historias. Descúbrelo ahora