¿𝙿𝚘𝚛 𝚚𝚞𝚎 𝚖𝚒 𝚌𝚘𝚛𝚊𝚣𝚘𝚗 𝚎𝚜 𝚝𝚞𝚢𝚘?

[ Destino Incierto]

Los caminos del destino son inciertos es más, una cosa es segura: Más del 70% de las noticias en esta vida serán malas y el otro 30% serán buenas.

Aquella noche aparentaba ser una cena llena de regocijo y parte de ese porcentaje de buenas noticias, sin embargo, como si de la ley de gravedad universal se tratara, todo se vino abajo en un abrir y cerrar de ojos. Se escucho a lo lejos como la puerta principal fue abierta y detrás de ella se encontraba un grupo de cuatro oficiales, qué llevaban consigo una orden de arresto, gracias a esto entraron al domicilio. Para su mala suerte tuvo que ser a la fuerza, pues la ama de llaves no dejaría que dañaran a su señora, lamentablemente la fuerza policial fue mayor, así que terminaron dejando de lado a la pobre ama de llaves qué lucho con todas sus fuerzas para negarles la entrada, todo fue en vano, esos policías iban con una sola misión, detener a los presuntos culpables del secuestro del joven Kagaya Ubuyashiki, y ¿Quiénes eran sospechosos de ese delito? Eran La señora Kibutsuji y Muzan Kibutsuji.

Dentro del edificio los oficiales se separaron en dos grupos, dos fueron a inspeccionar las habitaciones de arriba y los dos restantes vagaron por el primer piso hasta dar con la sala de estar, mismo lugar donde aún comían despreocupados la pareja de jóvenes y la madre de uno de ellos. Cuándo los encontraron el menor de los policías alzó la voz, llamando la atención en esa sala, luego comenzó a acercarse con la orden que les daba el poder para detenerlos.

Oficial 1: Suelten todo lo que tengan en mano y ríndanse.... Muzan Kibutsuji y Akira Kibutsuji ambos están detenidos por el presunto secuestro del joven Kagaya Ubuyashiki.

Al oír estas palabras la Madre de Muzan bufo y se paro de la mesa, sin miedo alguno se acercó a ambos oficiales, para confrontarlos de manera "pacifica" o eso creía ella. Mientras tanto Muzan se levantó de inmediato llamando la atención de los policías, quienes dedujeron que quería escapar, debido a eso uno de ellos saco su arma y apunto directo hacia el sospechoso, no obstante, al darse cuenta que la acción del joven no era la de escapar, sino todo lo contrario, bajo el arma y dejo que se acercara al otro chico que lucia en shock por todo lo que estaba pasando.

Akira k: A ver oficiales... ¡¡Bajen sus armas!! ¿Creen en verdad que este joven está secuestrado? Si lo estuviera... ¡Ya hubiera corrido a protegerse detrás de ustedes!.

La mayor los miro a ambos con desprecio y odio por armar tanto alboroto en su hogar. Por otra parte los dos oficiales se miraron mutuamente, mediante claves y señas que solo ellos entendían, se pusieron de acuerdo para saber como. El mayor de ellos dio un paso adelante y le entrego la orden de aprensión a la señora, después la hizo a un lado y continuó caminando hacia Muzan, quien estaba con Kagaya, ambos aún estaban cerca de la mesa abrazados el uno de otro, en especial el menor qué reflejaba estar asustado y confundido.

Oficial 1: Señora... Tenemos una orden de arresto y no nos iremos de aquí hasta llevarnos al joven Kagaya de nuevo a su hogar.

Respondió el otro oficial qué se había quedo controlado a la contraria, él no logro intimidarme ante los reclamos de la adversa, en su lugar solo observó y espero que su compañero separara al sospechoso de la víctima.

Cuándo ese oficial lo logro, apartó al sospechoso de donde estaba el más joven, tomándolo de ambas manos impido su movilidad para que no intentara nada, al mismo tiempo le colocó las manos en la espalda y lo esposo, así evitaría qué se pusiera violento. A pesar de estar inmovilizado Muzan comenzó a forcejear, tratando de mantenerse al lado de su pareja, por desgracia le fue imposible, lo único que podía hacer, era hablar o en este caso gritar y exigirle al oficial qué lo soltara.

Muzan: ¡¡Espere!! ¡Yo no secuestre a Kagaya! Él es mi pareja y vive conmigo. Además ya es mayor de edad no pueden obligarlo...

Recalcó entre dientes. Por culpa de esta situación Kagaya estaba en un estado deplorable, estaba horrorizado, no sabía que hacer. Él solo junto sus manos y las puso sobre su pecho mostrándose afligido por todo esto, pensaba que era su culpa y si algo le llegaba a pasar a su pareja o a su suegra sería totalmente culpable de ello, estos sentimientos provocaron qué su corazón comenzará agitarse y su ritmo cardíaco se acelerará. De esto se dio cuenta rápido Muzan, ya habían pasado antes por esta situación, así que sabia exactamente que hacer. Desde donde estaba comenzó a llamarlo suavemente, rogando que se tranquilizara, gracias al cielo le funcionó, ya que Kagaya levantó su mirada y miro a su contrario con una leve sonrisa.