¿Sabías que existe un síndrome llamado "Shaken Baby Syndrome" o Síndrome del niño zarandeado/sacudido?
Suena, literalmente, como es.
Imagínate que un bebé no deja de llorar incontroladamente (todos sabemos que el sonido de los bebés está hecho instintivamente para prestarle atención) y que su madre lo intenta calmar en repetidas ocasiones con el mítico movimiento de balanceo.
Quizás, en un momento dado, el estrés provocado por la situación hace que su madre le sacuda con bastante más fuerza de la necesaria, sin sujetarle bien la cabeza.
Esto provocaría, como es obvio, un daño en el cerebro del recién nacido. El cerebro "rebotaría" contra las paredes del cráneo, provocando múltiples lesiones. Podría hacer que los vasos sanguíneos se rompiesen y comenzase un sangrado en el interior (hemorragia subdural), que la columna vertebral a nivel del cuello se lesione, sangrado de la retina (membrana interior del ojo) o lesión en el tronco del encéfalo (que controla la respiración y el estado de conciencia entre otras muchísimas funciones).
Obviamente, esto se considera una forma de maltrato hacia el niño, aunque son muy pocos los casos registrados al año (y menos mal).
Si tuviéramos dudas de si un bebé sufre este síndrome, el primer paso médico sería hacerle una resonancia magnética. En ella podríamos comprobar si existe sangrado en el interior de la cabeza, si hay moratones o falta de oxígeno.
Los síntomas visibles por cualquier persona serían, entre otros, mucha somnolencia, vómitos, problemas para respirar, color pálido de la piel o incluso azul y, en el peor de los casos, un coma o parálisis.
Conclusión: no agitar a un bebé con rabia, por mucho que llore.
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Psicología para no psicólogos
Não Ficção¿Sabías que...? ¿Sabías que no hace falta estudiar psicología para aprender sobre ella? ¿Sabías que existen un millón de curiosidades al alcance de todos? Datos curiosos explicados para todo el público, dilemas morales que han hecho revolverse a tod...