Esto aún no se ha acabado...

Vivo

- ¡QUE APROVECHE!

Todos tomaron sus platos con fideos hechos por el demonio cerdo y sus palillos, y empezaron a comer con alegría y ganas. Mientras hablaban y comían a la vez en como han podido salvar su mundo una vez más, un chico estaba algo alejado del grupo con su cuenco aún lleno de fideos. Mirando al frente, haciendo absolutamente nada. Con la cara serie y pensativo.

- "Nosotros no somos tan diferentes, ambos luchamos por lo que realmente pensamos que esta bien. Lo cual, nos lleva a dos cosas... Al dolor... Y a la muerte..."

Esas malditas palabras no podían parar de pasar por su cabeza, sobre todo esa ultima palabra...

- MK!

- AY! M-mei... Vaya susto...

- Tío, estas bien? Has estado como casi 20 minutos mirando hacia la nada y aún con los fideos sin comer.

Oh oh... Pillado

- Ouh... Es que- N-no tengo hambre... Hehehe...

- Enserio? Que raro saliendo de ti...

Toma de su mano delicadamente.

- Sabes que me puedes contar de todo amigo...

- No, es solo que... Estoy cansado... Demasiado... Toda la lucha contra la dama de huesos demonio me ha dejado exhausto y pensativo.

- Seh... A nosotros también, pero hey! Seguimos vivitos!

Se escucho una leve risa por como la chica dragón estaba haciendo una pose chistosa. Se quedaron un momento en silencio para después abrazarse.

- Me alegro que no hayas hecho esto tú sólo... A veces pienso que de verdad te está pasando algo y que no me lo quieres contar por no confiar en nosotros... Pero yo sé que nunca no harías eso a tu familia... Verdad?

- ...

Oh no...

- Claro que no Mei... Ustedes son lo único que tengo para seguir adelante...

Apretó más el abrazo y escondió su rostro en el hombro de su hermana. No quería soltarla... No quería lastimarla... No quería perderla...

- Eso ya lo sé... Siempre te estaremos apoyando en todo lo que necesites porque eres nuestro amigo... Eres mi hermano...

Se podía ver un abrazo demasiado tierno por fuera de lo común, pero para MK era... Triste... Como si fuese una... Despedida.

De repente, sintió como los brazos de la otra empezaron a aflojarse lentamente y separarse de su cuerpo. Y se levantó, sonriéndole.

- Bueno! Yo voy con los chicos, te vienes?

- Em... Si claro! Por qué no?

Un cambio de humor repentino salió disparado del repartidor.

- ... Ok!

Tomo de su mano para levantarlo y así ir directamente con el grupillo, cuyo grupo estaban sus dos padres, el príncipe de Loto, Sandy y Red Son... Un momento, donde están nuestros dos monos inmortales?

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- Si me has traído solo para decirme que soy el peor mentor que hay, me vo- AY-

- Ni hace falta decírtelo con las pintas que tienes siempre, pero estás de suerte, no te he traído por eso.

Decía el macaco de seis orejas mientras agarraba con mucha fuerza la oreja de su ex compañero. Literalmente, se la podía arrancar.

Cuando llegaron a un sitio donde podrían estar solos se sentaron de frente a frente.

- Ugh... Joder, mi oreja...

- Ay no empieces, solo fue peñizco.

- Bueno, qué carajos quieres?

El mono moreno se quedo por un momento en silencio...

- Espero que al menos, una vez, te tomes las cosas enserio cuando te diga esto...

Y ahí el rey mono se asustó por primera vez...

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En un bosque se ubicaba a un pequeño lobo que habitaba tranquilo en el suelo, durmiendo. Era una noche muy tranquila y oscura. El lobito estaba tan relajado cuando un ruido extraño lo despertó repentinamente. Con algo de cansancio y aún con ganas de seguir durmiendo se levantó con la decisión de irse a un lugar mejor para continuar con su siesta.

Pero lo que no sabía... Es que no estaba sola...

- Recipiente...

El lobo se percató del ruido...

- Poder...

Se quedó quieto...

- Destino...

Se asustó...

- Libertad...

Se dio la vuelta con miedo... Pero afortunadamente se encontró con una pequeña mariposa en su nariz...

Se relajó...

Y jadeó...

Sintió como algo muy frío se adentraba dentro de su cuerpo por su espalda hasta su cerebro. Escuchó voces en su cabeza que dolían como el infierno, su cuerpo de animal empezó a deformarse a ser casi... Humano...

Su cabeza le dolía, sus manos le dolían, sus pies le dolían, su cuerpo le dolía...

Su alma se mezcló con otra más fría y fuerte...

Y finalmente, gritó desgarradamente.

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- Escucharon eso?

Preguntó la chica dragón a toda su familia mientras recogía los platos.

- Pues ahora que lo dices... Creo que sí.

- Fue como un... Grito.

- Nah, yo creo que habrá sido el viento.

- Enserio chicos de los noddles?

- Deberíamos preocuparnos?

- Tranqui Mei, todo estará bien.

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El lobo se levantó después de haberse desmayado, pero ya no tenía la misma alma... Ni el mismo cuerpo...

- Estoy libre... ESTOY VIVO!

Y se empezó a reir de forma macabra y malvada.

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YEPA! SIGO VIVA AJUA!

Dentro de poco verán a mi propio villano 737

²⁴/⁸/²³~°