CAPÍTULO 5

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 Suena el teléfono era AS. 

Hola JG

                                                                                                     Hola AS ¿Que pasa?

Necesito que vayas a otra ubicación, no es seguro donde están, ahora necesito que te muevas con tu capullo ya 

                                                                                                 As deja de decirle así

Tranquilo JG, ella será la que te devuelva la alegría para que vuelvas a confiar y creer en el amor. 

                                                                                 Voy alistar todo para salir AS adiós. 

Fin de la llamada.

Me acerque a ella y le dije que debíamos irnos, ella empezó a temblar quedando inmóvil, la abrace mientras acariciaba su espalda, —le susurre al oído todo va a estar bien mi amor, ella me miro, su vista estaba nublada por las lágrimas que empezaban a bajar por su rostro asintiendo le di un beso y salimos del lugar.

Estábamos caminando por el bosque íbamos por el sureste para llegar al lugar de encuentro, en eso un cuchillo rozo cerca de Mizu quedando clavado en uno de los árboles del bosque.— Le dije a Mizu corre a gritos mientras yo buscaba donde están los hombres de las Triadas.

—AS, AS hablando por el comunicador nos están atacando, dime cuantos son, AS muévete, —estoy en eso, —no los veo As, —están en los arboles JG y otros están hacia el sureste por donde van ustedes, cambia y ve por el oeste.

Empezaron a disparar— Mizu quédate aquí ya vuelvo— pero Jesús

 —Mi amor espera aquí —y seguí luchando y matando a cada hombre estaba agotado, mi respiración estaba agitada entre cortada. 

—Jesús!—! un grito escuche y era Mizu uno de los hombres la había atrapado, tomándola por los cabellos, 

—Vas a ser mía antes de que te mate pasando su lengua por mi rostro, tocando mis partes íntimas

 grite desesperada —¡Jesús!, ¡Jesús ayúdame!.

Otros hombres también llegaron golpeándome fuerte en la cabeza por un momento quede desorientado, luego me puse de pie sacando mi arma disparando continúe corriendo buscando a Mizu, no la encontraba en eso vi dos camionetas negras en una de ellas montaban a Mizu empecé a disparar nuevamente matando a dos de ellos.

Volví a gritar — ¡Mizu corre! —y ella así lo hizo, entonces otro de los hombres tomo a Mizu tapando su boca haciendo que perdiera el conocimiento metiendola en el auto maldita sea no puede ser ¡Mizu!!

— AS sigue a las camionetas y ve hacia donde se dirigen.

—Voy JG, van al norte necesitas una motocicleta para alcanzarlos y rescatar a capullo, tome una de las motocicletas de los hombres de la Triadas ya que no lo necesitaría así que acelere hacia el norte buscando desesperada mente a mi mujer, si mi mujer Mizu era mía y yo le había prometido protegerla, así que cumpliría mi promesa. 

— JG debes rescatar a capullo antes de que entre a la fortaleza,

—Lo sé AS lo sé.

Mientras manejaba la moto solo podía recordar sus besos pero sobre todo haberla tenido en mis brazos haciéndola mía y solo mía, no podía permitir que se la llevaran acelerando, 

—AS veo las camionetas —en ese momento veo que lanzan un misil cerca de donde estaba.

Haciendo colisionar una de las camionetas volcándose, el segundo carro continuo su recorrido sin dejar de dispararme y yo esquivando las balas lo más que podía, dispare a los cauchos haciendo que se volcara para poder sacar a Mizu.

Me detuve abriendo la puerta del auto no antes haberle disparado al conductor y sus dos compañeros tome en mis brazos a Mizu ella estaba inconsciente, tenía un golpe en la cabeza que no dejaba de sangrar, note un piquete en el brazo le habían inyectado algo por eso aún no despertaba, la lleve hacia el bosque ocultándonos de los hombre que nos perseguían. 

—AS, AS responde como supieron de nuestra ubicación.

—Necesito sacar a MIZU de este lugar, ella está inconsciente alguien le inyectó algo y no reacciona aparte del golpe en la cabeza por la colisión del auto necesito al equipo ya en mi ubicación necesito un médico para que vea a MIZU ahora.

—Cálmate JG cálmate ya estamos cerca.

—¡¿Como quieres que me calme AS?! —grite— no puedo verla así, no quiero que se repita la misma historia, no podría soportarlo.

— Te entiendo créeme que se cómo te sientes pero no va a pasar vamos a salir de esto.

— JG ya estamos aquí 

—¿Por qué tardaron tanto? sabes que eres un imbécil— dándole un puñetazo

— Auch JG eso duele.

—Sabes que eres un idiota.

—¿Dónde está el médico?

— Aquí estoy JG 

—¿Dónde está la chica?

— Aquí está doctor, desde el rescate no ha despertado y aquí tiene una marca de que le inyectaron algo, aparte del golpe en la cabeza que no deja de sangrar.

— Déjame revisarla le colocare un medicamento que la ayudara a despertar pero debes esperar algunas horas para que la sustancia salga de su organismo y ella pueda despertar.

—Pero doctor no tenemos tiempo debemos salir de este lugar lo más pronto posible no es seguro aquí.

— JG por ahora a ella no la podemos mover así, hay que esperar para estar seguro aparte de la herida en la cabeza, hay que estabilizarla primero.

Me sentí impotente al verla tan frágil e indefensa mi corazón me dolía al verla así, como era posible que pueda sentí esto de nuevo, pasaron dos horas aproximadamente cuando Mizu empezó abrir levemente los ojos dando un quejido al tocarse la cabeza, yo estaba a su lado no me había movido para nada de su lado.

—Mi amor como te sientes, —empecé a llorar

Pensé que me habías abandonado Jesús.

—Perdóname MIZU por tardar tanto pero ya estoy aquí mi amor a tu lado, necesito que te recuperes para poder salir de este lugar y llevarte a un lugar seguro cariño— besando su mejillas.

 — Quiero estar donde tu estés Jesús por favor no me dejes sola te lo suplico.

Hola a todos... vaya este capitulo fue bastante intenso Jesús eres mi héroe. Nos leemos pronto se les quiere un montón. 

BRISAS DE LIBERTADDonde viven las historias. Descúbrelo ahora