El amor es un estado de exaltación embriagante, o al menos eso dicen los poetas y eso creo cada que siento tu mano rozar la mía o cada vez que susurras un "te quiero" en mi oído.
El amor es un estado de exaltación embriagante y yo podría escribir un verso sobre un atardecer contigo y un libro sobre esa mirada tuya que se robó mi corazón.
Cada que te veo siento como si lleváramos siglos encontrándonos, como si nuestro amor traspasara todos los tiempos y tú y yo siempre estemos destinados a ser.
El amor es un estado de exaltación embriagante y tu voz se ha vuelto el sonido más dulce que mis oídos han escuchado, tus ojos se han vuelto mi cielo sin ser azules, tus brazos se han vuelto la calma ante toda tormenta y tú te has vuelto uno de mis más grandes vicios.
El amor es un estado de exaltación embriagante y yo ya no sé como vivir sin ti.
