bun bunny ★ dievin

꒰ O2: spa. ꒱

- Ow~ más despacio Kevin~ - gimió Diego, y Kevin cambio la velocidad de sus movimientos a unos más lentos - Oh~ mmh mierda, así ¡Ah, así! - gimió de nuevo por la placentera sensación de los movimientos de Kevin sobre su cuerpo.

De repente la puerta de la habitación de Diego se abrió con fuerza, dejando ver a un hombre adulto, un alfa, el padre de Diego.

- ¡¿Que demonios están ha-...?! oh. - su exprecion de enojo cambió a una avergonzada al ver a los dos jóvenes.

sentados en la cama de Diego, Kevin tras el omega, dándole un masaje en los hombros y espalda, los dos con la ropa puesta y con mascarillas en el rostro.

- Lo siento muchachos, yo pensé qué... bueno - El Señor Lainez se rascó la nuca, demasiado avergonzado para decir algo más.

- No se preocupe Señor, hasta yo lo hubiera pensado. - dijo Kevin, ganandose una mala mirada de Diego. - ¿Qué? es cierto.

- Yo... uh, los dejo, los llamaré cuando esté lista la cena. - el señor Lainez se fue cerrando la puerta de la habitación.

justo cuando se escucharon las pisadas del señor Lainez alejándose, Kevin soltó una carcajada y Diego corrió a ponerle seguro a la puerta.

- ¿No que no iba a estar? - preguntó Kevin aún con una sonrisita, Diego se pasó las manos por su rostro sonrojado. - que bueno que decidimos tener primero una sesión de spa, hubiera sido vergonzoso que tu padre nos viera, si parecemos conejos. - comentó Kevin, tratando de aminorar el ambiente con chistes.

- Tu eres un conejo Kevin. - Diego se tiró en su cama, quitándole a Kevin la almohada que tenía y usándola para tapar su rostro aún sonrojado.

- Sí, bueno, pero no soy yo el que salta. - cuando Kevin terminó la frase, la almohada impactó contra su cara, con tal fuerza que lo hizo caer de la cama. - Me dolió.

Kevin se levantó del suelo con rapidez, volvió a subirse a la cama y acostandose junto a su pareja.

- Y te va a doler más el pito cuando no me lo puedas meter ni por error, Álvarez. - sí, Diego se había enojado.

- Noooo, no te enojeeees. -

así estuvieron un largo rato, Kevin sabía que quitar el enojo de Diego era difícil, le pasaba por chistoso.

(...)