El brillo en Tus ojos

Día 6 de Marzo

De verdad que quiero irme luego de esta casa.

Ayer luego de clases mi madre me esperaba con una lista llena de cosas para hacer de inmediato, yo no me sentía muy bien y le dije que las haría despues ya que quería descansar un poco, lo que a ella no le gustó para nada y tuvimos una pelea.

No quiero recordar eso, pero para variar fue un montón de insultos hacia mi persona, así que despues de llorar un poco en mi habitación, le puse llave a la puerta y dormí hasta hoy.

Como no queria ver a mi madre salí más temprano que de costumbre, lo malo es que olvidé mi colación, asi que tendré que pasar los recreos con el estomago vacío.

Llegué al colegio y en las escaleras pude ver a José con una gran cara de sorpresa.

—¿Que pasó? Nunca habías llegado tan temprano

—Ayer discutí con mi madre, así que quería salir antes de que se despertara

No sé si soné muy afectada, pero José se levantó rapido y me atrapó en un calido abrazo el cual, luego de aguantarme las ganas de llorar, le correspondí.

—Ya me hacía falta una dosis de José— dije antes de romper el abrazo

—Siempre la tendrás cuando la necesites— aseguró con una sonrisa —Ahora entremos que tengo frio.

Después de pasar a los casilleros José me dijo que tenía que buscar unos dibujos en su sala, así que decidí acompañarlo.

—Me da envidia esta sala— dije cuando entramos —Es la más grande, y la unica con suelo alfombrado

—Y sin contar la bodega— dijo mi amigo sacando la lengua.

Yo tambien le mostré la lengua, antes de que se metiera a la bodega.

Mientras mi amigo buscaba sus dibujos yo me quedé apreciando los trabajos que estaban excibidos en la sala, habian unos cuadros muy bien pintados, algunas mascaras, varios dibujos, unas pequeñas esculturas y por ultimo varias maquetas con forma de domo, las cuales me quedé mirando por un largo tiempo.

—Cosa vamonos— dijo de repente José, dandome un susto

—¡Ya voy!— respondí tomando mi mochila y acercandome a él.

La campana sonó apenas entramos a inglés, lo bueno es que la clase fue rapida pues fue solo un repaso de cosas basicas.

José y yo nos fuimos a sentar a la entrada del colegio para pasar el recreo, gracias a la generosidad de mi amigo, me pude medio alimentar de unas cuantas galletas.

—¿Y qué era ese dibujo tan importante?— pregunté cuando terminé de comer

—Un par de retratros que estaba practicando

—¿Puedo verlo?

—Nop— respondio abrazando su mochila —Es un secreto hasta que lo perfeccione

Yo me puse a refunfuñar, antes de que José viniera y me revolviera el cabello.

—Aún no me acostumbro a este uniforme

—Yo tampoco, y saber que debo usar falda me estresa— dije soltando un suspiro

—Almenos tu tienes opción, yo solo puedo ocupar short en gimnasia

—Hablando de Gimnasia ¿Viste al entrenador durante el verano? Porque no he tenido ningun infimo detalle de tu verano amigo mío— dije juzgandolo con la mirada.

El entrenador y José tienen una relación algo rara, por lo que me ha contado mi amigo, el entrenador lo trata igual que si fuese su hijo, eso si siempre fuera del colegio, dentro es un alumno más. Y aunque se me hace un poco extraño, me alegra saber que tiene un adulto en quien confiar, pues sus padres son caso perdido y tema sensible desde que lo conozco.