Capítulo 4: Las calles doradas del cielo

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<<Los muchachos vinieron a buscarme para ir a casa de GR, y les dije que sí>>
Es una tarde muy bonita, y los chicos se reúnen en casa de GR nuevamente, (como dije antes, la casa del chico es grande, y muy bonita, es de dos plantas, tiene un árbol de mango y otro de coco que se encuentra en el porche y atraviesa los pisos de hasta llegar a la terraza. Pretenden jugar dominó, está Lian (que la vez pasada faltó), Darianna, Roniel (un nuevo integrante), por supuesto GR y Anyela, pero faltan dos Ronel no pudo ir y Alis estaba ocupado, como la madre de GR estaba descansando no pueden jugar en el porche, dentro de la casa, ni siquiera en el patio ya que debido a los ruidos se despertaría así que suben a la terraza ahí hay mucho espacio, hay sombra proporcionada por el árbol de mango, el atardecer  está hermoso casi en su mejor punto y desde allí hay una vista increíble que cautiva a Anyela ya que ella es muy fanática del cielo y toda su magia.
Para jugar dominó se necesitan cuatros personas y habían cinco ( alguien sobraba) como a Anyi no le gusta mucho jugar dominó se va a ver el cielo se sienta lejos de todos, cerca de la superficie y para acompañarla se le suma GR quién se fué detrás de ella dejando a los jugadores incompletos.
El chico pálido junto a Anyi contemplan el atardecer que se pinta de muchos colores  amarillo, varios tonos rojizos y tonalidades ámbar, rosa, celeste naranja quemado y diferentes tonos de azul simplemente algo espléndido también habían nubes con formas y de colores naranja y otras rosadas que parecían algodón de azúcar, GR toma esta oportunidad para conocer un poco más a Anyela y mientras hablaban le buscaban las formas a las nubes y a veces chocaban sus miradas una encima de la otra fijamente sin parpadear, sin siquiera respirar
Luego la desvían de nuevo al cielo quien es testigo de las miradas culpables de estos dos chicos, entre tantas nubes vieron dos con forma de corazón, una súper gigante que tenía un gran parecido a un tanque de guerra, una que parecía un patito con gorro de Chet, también una que tenía forma de perrito y otra que aparentaba ser una nave espacial.
Mientras GR tiene su mirada perdida en el horizonte, Anyela lo observa como si él fuera, el que tiene todos los colores que refleja el cielo, en eso GR cambia su mirada pasándola a ella quien ahora tiene toda su atención
- ¿por qué me miras tanto?- preguntó el chico pálido
Anyi intento disimular mirando su cabello pero eso no funcionó
- ¿tengo un mono en el cabello acaso?- preguntó levantando una ceja
- no, n-o, no te estoy mirando a ti ni a tu feo cabello, mira hacía allá el cielo del lado izquierdo hay como un tanque de guerra ahí
A eso se parece esa nube, y justo a la altura de tus greñas se ve esa rojiza nube con un fondo de cielo azul fuerte- suelta  Anyi casi en un maullido de un gatito asustado y desvía su mirada a equis parte del cielo,
GR voltea al lado izquierdo para confirmar lo que dice la chica y si es verdad hay un cielo muy azul con una nube muy grande y roja como a punto de estallar y su forma es bastante parecido a "un tanque de guerra" todo queda en silencio hasta que se escucha la voz de Dari que se acerca y pregunta:
- hola, ¿Qué hacen?-
- ¡agh! Darianna estaba muy bien cuando estabas por allá lejos- le dice GR a hermana
- ahm... Estamos viendo el atardecer Dari, mirá contemplando su hermosura-
Darianna levanta su vista y exclamá:
- sí, está muy lindo por allá hay como un patito con gorro de Chet ¡¿no les parece?!... No les quisiera interrumpir pero Lian y Roniel están algo enojados, se sienten excluidos y se quieren ir-
Anyela se sintió algo incómoda porque momentos antes GR le había pedido volver a dónde se encontraban los demás y ella no quería, GR nunca se fué de su lado no quería dejarla sola. Él solo quería estar con ella pero ya Anyela se le acaba el tiempo y tiene que irse su permiso era hasta las seis, así que se despide y junto a ella se va también Lian y Roniel, la acompañaron hasta su casa y luego se esfumaron.

En el camino Lian empezó a interactuar un poco más con Anyi y compartían cosas en común (una de esas, que la madre de Lian también viajaba mucho y él quedaba encargado de la casa).

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